El gobierno venezolano solicitó una reunión urgente del Consejo de Seguridad de la ONU tras denunciar un despliegue militar “sin precedentes” de Estados Unidos en el Caribe.
Según el canciller Yván Gil, la maniobra norteamericana amenaza la estabilidad regional y podría derivar en un conflicto armado.
Caracas alerta sobre “riesgo inminente” de agresión
En una carta dirigida a Vassily Nebenzia, presidente del Consejo de Seguridad de la ONU, el canciller venezolano Yván Gil advirtió que “un ataque armado puede ocurrir en un muy corto plazo”.
El documento señala que las operaciones de Estados Unidos “incluyen destructores misilísticos, aviones de combate, tropas élite y un submarino nuclear cerca de las costas venezolanas”, lo que pone “en grave peligro la zona de paz de América Latina y el Caribe”.
La Cancillería venezolana calificó el despliegue como una “escalada de agresiones” y exigió la intervención inmediata del Consejo de Seguridad para frenar lo que considera una amenaza directa a su soberanía.
Washington justifica su presencia por operaciones antidroga
El presidente estadounidense Donald Trump justificó las acciones militares señalando que buscan desmantelar redes de narcotráfico presuntamente vinculadas al mandatario venezolano Nicolás Maduro. Durante su discurso en la Asamblea General de la ONU, el 23 de septiembre, Trump afirmó que Estados Unidos “usa su poderío militar para combatir organizaciones criminales transnacionales”.
Sin embargo, Caracas sostiene que estas acusaciones son parte de un “plan de cambio de régimen” impulsado por Washington, con el objetivo de controlar las reservas petroleras del país.
Según DW , Venezuela denunció que, durante las operaciones estadounidenses, cuatro embarcaciones de presuntos traficantes fueron destruidas, dejando un saldo de 21 personas muertas, lo que calificó como una “pena de muerte en altamar”.
Escalada diplomática y llamado a la mediación internacional
El gobierno de Maduro busca respaldo de aliados internacionales, entre ellos Rusia, China e Irán, para contrarrestar la presión militar y diplomática de Estados Unidos.
Expertos advierten que el incidente podría agravar la tensión geopolítica en el Caribe y poner a prueba los mecanismos de resolución pacífica de la ONU.
En tanto, la comunidad internacional observa con preocupación la creciente militarización de la región, en un contexto de alta volatilidad política y económica.
Un conflicto que reaviva viejas disputas hemisféricas
El enfrentamiento entre Caracas y Washington vuelve a poner sobre la mesa la disputa por el control energético y la influencia política en América Latina. Venezuela insiste en que su soberanía debe ser respetada y que las acusaciones de narcotráfico carecen de fundamento jurídico.
Mientras tanto, el Consejo de Seguridad deberá decidir si convoca a una sesión extraordinaria para debatir la situación y definir si el despliegue estadounidense viola el derecho internacional.