La Unión Tranviarios Automotor (UTA) lanzó una advertencia contundente: si las empresas no depositan los sueldos de noviembre antes de la medianoche, el viernes podría comenzar con una “abstención de tareas” que paralice el transporte en varias ciudades del país
La situación mantiene en alerta a usuarios, autoridades y al propio sector empresario. La información fue difundida, según Noticias Argentinas.
El conflicto se desató luego de que las cámaras empresarias anticiparan dificultades para abonar los sueldos en tiempo y forma. Desde la UTA remarcaron que el derecho al salario es “intocable” y que los trabajadores no están dispuestos a absorber los problemas financieros del sector.
El vocero del gremio, Mario Calegari, fue categórico: “Si no hay salario, no trabajamos”.
Además, subrayó que la responsabilidad del paro no recae sobre los choferes: “Los empresarios son los que no brindan el servicio, no nosotros. Necesitamos cobrar, no estamos en condiciones de financiar a las empresas”.
Cómo sería la abstención de tareas
Calegari explicó que si el sueldo no aparece acreditado antes de las 00 horas, los choferes se presentarán igual en sus empresas, pero sin salir a la calle.
“Si cobro, trabajo; si no, habrá retención de tareas con presencia en las cabeceras hasta que se efectúe el pago”, señaló.
El dirigente también recordó que la ley establece que los salarios deben pagarse antes del cuarto día hábil, por lo que aseguró que están actuando dentro del marco legal.
Un conflicto que involucra al Gobierno y a las empresas
Desde el gremio responsabilizan al Gobierno Nacional, al considerar que su demora en asistir financieramente a las empresas deriva en estos atrasos salariales.
La UTA cuestiona la intención de algunas cámaras de dividir el pago del sueldo en dos tramos y de fraccionar el aguinaldo, lo que profundizó la tensión.
Según la Agencia Noticias Argentinas, el Ejecutivo aprobó en el Boletín Oficial el giro de más fondos al sector, con el objetivo de desactivar el paro y garantizar el pago inmediato. Sin embargo, hasta el momento, la postura gremial sigue firme y el panorama para el viernes permanece abierto.
La pulseada entre la UTA, el Gobierno y las empresas suma un nuevo capítulo y amenaza con derivar en un paro que afectaría a miles de usuarios. El gremio insiste en que la única solución es simple: “pagar lo que corresponde y en tiempo”. El sector empresario y las autoridades tienen ahora la última posibilidad de evitar la medida.




