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Argentina en crisis

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El presidente Alberto Fernández afirmó hoy que el Gobierno trabaja para que «no se profundice la recesión” y que este mediodía analizará con el ministro de Economía, Martín Guzmán, un “menú” de medidas con “mecanismos de compensación” para los sectores productivos y asalariados que puedan llegar a ser afectados por los efectos del coronavirus.

“Nosotros no debemos dejar que se profundice la recesión, estamos en recesión”, subrayó Fernández en diálogo con Radio 10 y radio Mitre.

El Presidente dijo que va a mantener una reunión en la Quinta de Olivos con el ministro Guzmán para definir “un menú” de medidas económicas para compensar los problemas que pueden llegar a generar las restricciones que puedan aplicarse para evitar la propagación del virus.

“Hay que buscar mecanismos de compensación”, señaló el jefe del Estado”.

Fernández adelantó además que mañana a las 10 se reunirá el Gabinete Social, coordinado por el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, para terminar de definir las distintas propuestas.

“Lo que más hace falta es garantizar el salario de los que se quedan en su casa por orden del Estado y garantizar créditos muy blandos para que el que deja de producir pueda sobrevivir”, resumió el jefe del Estado.

El presidente Alberto Fernández afirmó que la Argentina necesita “tiempo” para poder resolver el problema de la deuda y ratificó la decisión de su gobierno de “priorizar” la resolución de problemas que afectan a los sectores más desprotegidos.

“Es prioritario sacar de la crisis social a los argentinos. La deuda no nos va postergar las cuestiones sociales”, dijo el Presidente.

“El primer tema que tengo que tratar con Martín Guzmán es el tema deuda”, detalló el Fernández respecto a la agenda de reuniones que mantendrá hoy.

“El capital no tiene mucho corazón”, dijo Fernández al ser consultado sobre el tema deuda y la propuesta que presentará la Argentina a los tenedores de deuda.

“Estamos encaminados y lo que nos está pasando nos está dando la razón, porque veníamos mal y esto nos hace peor, por eso necesitamos tiempo”, sostuvo el Presidente.

Fernández advirtió que “el escenario del mundo ha cambiado mucho” a causa del coronavirus.

“El mundo ha cambiado por esta enfermedad. Si vale el ejemplo, en el caso de Argentina, nosotros veníamos achacados, nos agarra el virus y nos hace mucho más daño”, concluyó.

egún los registros que realiza el Observatorio de Economía de la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad Nacional de la Patagonia S.J.B, en tres años el precio de la canasta básica total de Comodoro Rivadavia se elevó a más del doble de su valor, al compararse informes de marzo de 2017 contra la última actualización, divulgada esta semana: desde un monto de 26.565 pesos, subió a 57.608 pesos con datos basados en el IPC de enero, aunque al actualizar el IPC de febrero se iría a 59.000.

Los datos surgen de la comparación entre informes periódicos que realiza el mencionado observatorio, que integran, entre los otros, los docentes César Herrera y Alejandro Jones.

Este último fue quien dio a conocer los valores que surgen del Indice de Precios al Consumidor acumulado en los últimos 11 meses, para una familia compuesta por cuatro integrantes, con dos adultos y dos adolescentes, ubicando ese valor en 57.608 pesos.

La Canasta Básica Total se compone de alimentos y servicios, aunque el deterioro en el poder adquisitivo de salarios hace crecer la incidencia del gasto en alimentos, reduciendo lo destinado a otros fines, como pueden ser indumentaria, educación y esparcimiento.

En marzo de 2017, el Observatorio registraba un costo que puede resumirse en las siguientes referencias: mientras una familia de 3 integrantes necesitaba 20.977,42 pesos por mes, un hogar de 4 integrantes requería 26.565,67 pesos. Para 5 miembros, la C.B.T ascendía 28.680,50.

Según los valores de ese momento, un adulto necesitaba 2.914,34 por mes para no caer por debajo de la línea de indigencia, equivalente a 100 pesos diarios sólo para alimentarse, ya que ese valor correspondía a la canasta básica alimentaria. Si se toman en cuenta los valores actualizados para marzo de 2020, la cifra diaria se duplica fácilmente, superando los 200 pesos diarios por persona.

Discusiones salariales

Los datos sobre el costo de vida en la ciudad o la región patagónica en su conjunto dan marco a las discusiones paritarias que comienzan en diversos sectores, donde la pulseada estará dada entre la inquietud del gobierno nacional, para que se discuta en base a sumas fijas, frene a la opción de las cláusulas de ajuste por inflación, como se había dado hasta fines del año pasado.

El propio presidente Alberto Fernández no ignora que el tema de los precios es uno de los de mayor gravedad en el complejo escenario actual: lo expresó el miércoles, en un foro plagado de los principales empresarios del país, entre quienes apuntó a los formadores de precios de alimentos, para requerirles responsabilidad: “no hay presión del dólar, ni aumento de tarifas y seguimos bajando las tasas de interés”, planteó ante esa selecta audiencia, con la expectativa de que los indicadores inflacionarios empiecen a ceder en una carrera en la que los ingresos salariales pierden largamente.

Cuando esta semana se conozcan los nuevos datos del IPC febrero, sumado a las mediciones sucesivas, se podrá verificar si ese mensaje fue asimilado o si pasó de largo.

Un producto y la mitad de otro…

Los precios de los alimentos se aceleraron especialmente en los últimos dos años, con una inflación que supera el 100 por ciento entre ambos períodos, con una fuerte incidencia en la canasta alimentaria. Esto es notable a partir de los datos oficiales del INDEC, que en febrero de 2018 registraba un kilo de pan francés a 41,85 pesos en la Patagonia, pasando a 70,83 en igual período del año pasado y elevándose a 111,71 el mes pasado.

La carne picada común, que hace dos años presentaba un valor de 98,77 para la región patagónica (vale recordar que Comodoro Rivadavia presenta valores más altos que el promedio de la región), el mes pasado se ubicó en 252,91, más de un 150 por ciento de incremento.

Similar evolución se da para la mayoría de los productos esenciales para la alimentación. Un litro de leche en sachet, que valía 25,79 hace dos años, en la medición divulgada en febrero se ubicó en 62,83. Un kilo de pollo, sobre la pieza entera, saltó en dos años desde 46,42 pesos hasta los 120 pesos divulgados el mes pasado.

El azúcar, que registraba 24,61 pesos en febrero 2018, midió 55,51 pesos el mes pasado. La harina de trigo común, que costaba 13,52 hace dos años, registró 45,35 pesos en la última medición.

Los fideos secos (cual bolsillo asalariado), tipo guiseros, saltaron desde 22,81 pesos a 59,26. El arroz, que hace dos años se conseguía por 27,88 pesos, en febrero cotizó un promedio de 70,15 pesos. La papa no es la excepción: de 21,91 pesos, saltó a 39,66 en enero último.
Los huevos de gallina subieron desde 45 pesos por docena, según el IPC patagónico de hace dos años, a los a 105,86 pesos registrados el mes pasado. No es una metáfora popular, sino una simple cuenta matemática: en dos años, puede decirse, sin temor a equivocaciones, que el precio del producto avícola se incrementó exactamente en un huevo más… y la mitad del otro.

El ministro de Economía, Martín Guzmán, mantuvo un encuentro con la titular del Fondo Monetario Internacional, Kristalina Georgieva, en el marco del foro de ministros de finanzas de los países integrantes del G-20 que se lleva a cabo en Arabia Saudita. Tras la reunión, la titular del FMI aseguró –a través de un comunicado– que está dispuesta a apoyar al gobierno de Alberto Fernández «en sus esfuerzos para estabilizar la economía y reducir la pobreza» y destacó que se continuará discutiendo los planes «para garantizar una solución sostenible y ordenada de la situación de la deuda».

Luego de la charla que Guzmán mantuvo con Georgieva, el FMI difundió un comunicado donde definió la conversación como «otro intercambio fructífero» que se concentró en «los desafíos del país y el camino a seguir para garantizar un crecimiento más sostenible e inclusivo para la Argentina». Allí, Georgieva reconoció que «apoyé al ministro y el liderazgo del presidente Alberto Fernández, en sus esfuerzos para estabilizar la economía y reducir la pobreza», destacó.

Además, indicó que «sobre la base de la reciente misión del personal técnico del FMI a Buenos Aires», también se discutieron «los planes de las autoridades para garantizar una solución sostenible y ordenada de la situación de la deuda de Argentina».

En la misma linea, manifestó: «En este contexto, acogí el compromiso de las autoridades argentinas de continuar profundizando nuestra colaboración, a través de una Consulta del Artículo IV y oportunamente obtener un programa respaldado por el Fondo. Las modalidades de estos próximos pasos se seguirán discutiendo».

«Como dije desde el principio, nuestro compromiso y enfoque están con la Argentina y su población. Queremos ver que la economía argentina se recupere de manera duradera, que se reduzca la pobreza y que las argentinas y los argentinos prosperen», concluyó Georgieva.

El propio presidente Fernández había considerado «histórico» el paso dado por el FMI. «Es un triunfo de la razón, que por una vez no nos apeguemos a los dogmatismos y miremos la realidad», celebró al mismo tiempo que resaltaba que a pesar del avance «tampoco debemos ser exitistas».

En tanto, el ministro de Economía no ocultó «su satisfacción por el intercambio constructivo sobre los desafíos del país y el camino a seguir para garantizar un crecimiento más sostenible e inclusivo», según reza un comunicado emitido por la cartera que conduce.

En ese texto, el funcionario ratificó la intención de iniciar las consultas que prevé el Artículo IV del organismo. El ministro consideró que se trata de «un paso valioso que permitirá profundizar el entendimiento mutuo entre el gobierno argentino y las autoridades del FMI, en el camino a contar oportunamente con un nuevo programa con el organismo».

El artículo al que tanto Guzmán como Georgieva hacen referencia es el que avala un monitoreo anual sobre la economía de los países miembros y que hasta 2015 la Argentina había restringido esta revisión luego de que el presidente Néstor Kirchner cancelara la deuda que mantenía la Argentina con el organismo multilateral.

El ministro Guzmán ahora tiene en agenda un encuentro previsto con el secretario del Tesoro de los Estados Unidos, Steven Mnuchin; con sus pares de México, Arturo Herrera; y de Francia, Bruno Le Maire, entre otros. La reunión con el funcionario norteamericano es importante porque ese país es el principal accionista del FMI y como tal tiene una mayor influencia en el organismo multilateral. De hecho, fue el Estado que promovió la autorización el endeudamiento que reclamó el entonces gobierno de Mauricio Macri y que terminó por desatar la mayor crisis de la Argentina de las últimas décadas.

La declaración completa de Kristalina Georgieva

«El Ministro Guzmán y yo tuvimos otro intercambio fructífero sobre los desafíos del país y el camino a seguir para garantizar un crecimiento más sostenible e inclusivo para la Argentina. Apoyé al ministro, y el liderazgo del Presidente Alberto Fernández, en sus esfuerzos para estabilizar la economía y reducir la pobreza.

«Sobre la base de la reciente misión del personal técnico del FMI a Buenos Aires, también discutimos los planes de las autoridades para garantizar una solución sostenible y ordenada de la situación de la deuda de Argentina. En este contexto, acogí el compromiso de las autoridades argentinas de continuar profundizando nuestra colaboración, a través de una Consulta del Artículo IV y oportunamente obtener un programa respaldado por el Fondo. Las modalidades de estos próximos pasos se seguirán discutiendo.

«Como dije desde el principio, nuestro compromiso y enfoque están con la Argentina y su población. Queremos ver que la economía argentina se recupere de manera duradera, que se reduzca la pobreza y que las argentinas y los argentinos prosperen.»

El ministro de Economía, Martín Guzmán se reunió con el secretario del Tesoro de Estados Unidos, Steve Mnuchin en lo que voceros de la cartera económica consideraron fue un “muy buen” encuentro. La posición de Estados Unidos es determinante tanto en las negociaciones con el FMI como con los acreedores privados.

Luego de la reunión el propio Mnuchin emitio un tuit destacando que había tenido una “conversación productiva” con el ministro argentino acerca de sus planes para implementar sus políticas económicas.

Del encuentro también participaron el subsecretario para Asuntos Internacionales del Tesoro, Brent McIntosh, y el representante argentino ante el Fondo Monetario, Sergio Chodos.

En un tuit posterior, el propio Guzmán agradeció el gesto del secretario del Tesoro y consideró “por demás alentador encontrar coincidencias».

El apoyo del gobierno norteamericano, que detenta el 16,5% del poder de voto en el directorio del FMI, es clave para la renegociación con el organismo y también para la restructuración que el gobierno de Alberto Fernández les proponga a los acreedores privados.

El encuentro tuvo lugar en el marco de la segunda jornada de la reunión de ministros de Finanzas y presidentes del Banco Central del G20, en cuyo plenario de ayer Guzmán pidió la “cooperación” de los países miembros de este foro internacional para lograr la “sostenibilidad” de la deuda argentina.

Guzmán también mantuvo reuniones bilaterales con sus pares de México, Arturo Herrera; y de Canadá, Bill Morneau, en las cuales se apuntó a afianzar el diálogo entre los países y fortalecer las relaciones entre la Argentina y el mundo.

En la primera jornada, Guzmán ya había mantenido varias entrevistas bilaterales, comenzando con la directora del FMI, Kristalina Georgieva, con quien acordó el reinicio de las misiones de “revisión” (conocidas como “de artículo 4”) y coincidieron por primera vez, tanto en los comunicados de Georgieva como en los de Economía, que comenzarán que los negociadores de ambas partes comenzarán a discutir un “programa” económico.

En la jornada de ayer el ministro también se reunió con sus pares de Alemania, Olaf Scholz; de Francia, Bruno Le Maire; de Suiza, Ueli Maurer; de India, Nirmala Sitharaman; y de Arabia Saudita, Mohammed Al-Jadaan.

La reunión con Le Maire, que actualmente encabeza el “Club de París”, un grupo informal de acreedores oficiales (gobiernos y agencias gubernamentales de seguros, garantías e inversiones) de la Argentina, es importante para que Guzmán logre sus objetivos de prorrogar vencimientos por 1.900 millones de dólares remanentes de una negociación de 9.400 millones de dólares realizada en 2014 por Axel Kicillof, y reducir la tasa de interés, actualmente de 9%.

En todos los encuentros, señaló un comunicado de Economía, “los ministros le manifestaron a Guzmán el apoyo de sus países a las negociaciones que lleva adelante la Argentina para reestructurar su deuda soberana y acordaron una agenda de cooperación en pos de afianzar los vínculos estratégicos bilaterales”.

Además, la Ministra de India le anticipó la intención de su país de realizar inversiones productivas en la Argentina.

G20 y después

La India es el próximo país que estará a cargo de la presidencia del G20.

El G20 es un foro que se constituyó en 1998, en medio de la tormenta financiera internacional por las crisis en los países del sudeste asiático. Lo integran 19 países y la Unión Europea. Los países son la Argentina, Australia, Alemania, Brasil, Canadá, China, Francia, India, Indonesia, Italia, Japón, Corea del Sur, México, Rusia, Arabia Saudita Sudáfrica, Turquía, Reino Unido y Estados Unidos.

Luego de su participación en la reunión de ministros del G20 (la cumbre de Jefes de Estado tendrá lugar en la segunda mitad del año), Guzmán viajará a Estados Unidos. El lunes estará en Washington, donde tomará contacto con el Fondo y otras instituciones multilaterales, como el Banco Mundial y el BID y el martes viajará a Nueva York, donde tomará contacto con bancos y fondos de inversión, los principales tenedores de deuda argentina.

El domingo próximo, el presidente Alberto Fernández hablará por segunda vez ante la Asamblea Legislativa. Ratificará rumbo y medidas, hará un repaso de la gestión que lleva menos de tres meses, remarcará la magnitud del descalabro dejado por el ex presidente Mauricio Macri. Anunciará proyectos de ley (varios anticipados en el día de la jura) y subrayará los avances referidos a la renegociación de la deuda externa.

El mandatario comenzará a redactar el borrador mañana, los ministerios (es habitual) le hacen llegar informes y sugerencias.

Para el período ordinario de Sesiones, el Ejecutivo impulsará las siguientes leyes.

· Reforma judicial.

· Creación de un Consejo para la Calidad Institucional del Poder Judicial.

· Consejo Económico Social.

· Aborto libre, legal y gratuito.

Se anticipan conflictos referidos a la interrupción del embarazo.

Otras iniciativas del Gobierno levantarán vientos de fronda: el aumento de las retenciones a la soja y la ley que reforma a la baja las jubilaciones de privilegio que ya se está tratando.

El paquete de normas que propondrá el mandatario no contiene leyes mordaza o restrictivas de libertad de prensa.

Tampoco un proyecto para sancionar el negacionismo del terrorismo de Estado. Fernández dijo en París que estudiaría dicha idea pero la desechó para prevenir acechanzas contra la libertad de expresión.

Lo actual y lo posible

Los primeros resultados del Plan contra el Hambre entusiasman al Presidente que maneja al dedillo los datos de Concordia, la ciudad entrerriana en la que primero se aplicó. Miles de tarjetas usadas sabiamente por las jefas de familia se traducen en consumo local, ganancias para pequeños comercios, mejoras palpables en la alimentación de los pibes.

En otra provincia, Santa Fe, el gobernador Omar Perotti se entusiasma, refiere el presidente, con el dinamismo impreso por el nuevo derecho social. Los dos ejemplos, desde ya, son micro. Para que pudieran potenciarse será necesario aliviar a la Argentina de los pagos de deuda externa en los próximos años. Miles de millones de dólares que reactivarían en el corto plazo, durante los seis-siete-ocho últimos meses de 2020. “Obra pública, el Plan de Viviendas que está atrasado” proyecta Fernández. Actividades clásicas, mano de obra intensivas, para masas de trabajadores desocupados o que changuean hoy en día. “Keynes corazón”, cantaría la hinchada aunque es consabido que dichos resurgimientos no serán suficientes. Habrá que promover subsidios o incentivos que permitan el nacimiento de industrias con potencial exportador o la resurrección de la capacidad ociosa tras el industricidio macrista.

La clave, la cifra propondría Jorge Luis Borges, es conseguir reducción y aplazamiento de la deuda externa en manos de privados y del Fondo Monetario Internacional (FMI). El comunicado del Fondo dibujó sonrisas aunque no euforia en la Casa Rosada. Cuando recaló en ella, Fernández insistía con la imagen del micro que se encaminaba al precipicio. “En diciembre el default era la posibilidad mayor. Ahora cobra fuerza la perspectiva de la renegociación razonable”. Firmar un acuerdo ruinoso, lleno de condicionalidades ajustadoras queda fuera del radar del oficialismo. “Jamás firmaremos un Megacanje II” cantan en canon en torno del Presidente o del ministro de Economía Martín Guzmán.

Fernández interpreta que el bondi frenó su marcha suicida pero sin pegar un giro de 180 grados. Propone otra comparación sobre una idea-fuerza heredada del presidente Néstor Kirchner. Alberto F se volvió devoto de los equilibrios fiscales, anche del superávit, y adversario de la emisión monetaria incontrolada. “Son como una adicción. Se empieza probando, tal vez con resultados gratos o inocuos. Luego se tornan imparables, nocivas”. Crecer para pagar sigue siendo la consigna pero con cuidado para no drogarse.

El mandatario ensaya un rizo sugestivo: “Si hay equilibrios, mayor recaudación y se incrementan las reservas hasta se podría ampliar la emisión, con respaldo suficiente”.

Hay que proteger a los que menos tienen… la contracara dialéctica es que los más ricos deben tributar más. Objetivo que se bifurca en dos movidas que generan oposición furibunda. Suba de retenciones y modificación de los privilegios jubilatorios de jueces y fiscales. Bramarán las corporaciones respectivas, el Gobierno está dispuesto a afrontar el chubasco.

El fantasma de la 125

En el recinto o pocos días después se publicitará la elevación de tres puntos para las retenciones a la soja y al aceite de soja, conforme la facultad que le delegó el Congreso. La Sociedad Rural y Carbap, está en el inventario, pondrán el grito en el cielo y en los grandes medios.

Curtido en el conflicto por las retenciones móviles, el Presidente enumera qué productos abonarán menos retenciones, suponiendo un mapa político y regional heterogéneo. “Se verán beneficiados, por ejemplo, el trigo, el maíz, la alfalfa, los cultivos de economías regionales”. La asimetría, entiende y activa el Gobierno, dividirá a las corporaciones del “campo”. Los asociados y dirigentes de la Federación Agraria y de Coninagro acompañarán la política sectorial.

La recaudación mejorará, el modo genuino de mejorar sin recortar inversión social.

Jueces al borde de un ataque de nervios

Las lacrimógenas e insolidarias declaraciones de jueces que ganan fortunas, se jubilan con un régimen de magnates y eluden el impuesto a las ganancias no disuaden al presidente. Las reformas a las jubilaciones de privilegio, evoca, estaban contenidas en el proyecto original de cambio en el sistema previsional. Se sacaron a último momento, por consideraciones técnicas. La oposición denunció la inequidad que ahora tutela con argumentos fariseos.

¿Vale la pena insistir, promoviendo un entredicho formidable? La pregunta rondó al propio oficialismo. La magnitud de los privilegios, el valor fastuoso de las jubilaciones que se pagan en gran medida del presupuesto nacional persuadieron al Presidente para avanzar. Será ley muy pronto, posiblemente. En las sesiones ordinarias llegará el turno del demorado…

Consejo Económico Social

Fernández esperó al ex ministro Roberto Lavagna (alias Godot) a quien veía como la figura ideal para presidir el Consejo Económico Social (CES). Conversan a menudo, Lavagna da buenos consejos, disiente a veces, como cuando cuestionó la política internacional iniciática, a su ver muy sesgada hacia Venezuela y Bolivia. “Pero me felicitó después de la gira por Europa”, matiza Fernández como elogio. De igual modo, analiza un argumento del ex ministro de Economía para rehusar el cargo: “Piensa que cualquier comentario crítico sería traducido como un reproche o competencia con Guzmán. Por eso aconseja buscar a un no economista”. Fuera cual fuera la experticia del virtual funcionario, Fernández confiesa no dar con la persona indicada. Alguien con prestigio ampliamente reconocido, peso específico, cintura política. El sistema político argentino, híper competitivo y despiadado (añade este cronista) acicatea el canibalismo entre protagonistas. De cualquier forma se irá avanzando, porque cayeron en saco roto los paliques entre Fernández-Lavagna o los sondeos que hicieron altos funcionarios del área económica con los integrantes del heterogéneo bloque de diputados que responde al ex ministro. No hay modo, se resignan todes.

“El ministro de Trabajo Claudio Moroni habla con los sindicalistas, el de Producción Matías Kulfas con los empresarios, se está preparando un documento” describen en los pisos altos de Hacienda. En Ordinarias se tratará el proyecto mientras se discierne quién se pone el traje de Godot.

AF está conforme con la dirigencia sindical, que acompaña al oficialismo. Nota templanza en los reclamos. Calcula que la Paritaria Nacional Docente llegará a buen puerto y que las clases empezarán en fecha en todas las provincias. Tal vez Chubut sea la más comprometida. Información de funcionarios de otras áreas de gobierno y de gremialistas agrega que los acuerdos no serán anuales, sino pagos por suma fija revisables dentro de unos meses.

Otros derechos también existen

El Presidente porotea con atención y tal vez con voluntarismo los votos en el Senado para la ley de interrupción voluntaria del embarazo. Calcula que alcanzarán. La propuesta vendrá en combo con una norma de protección a mujeres vulnerables en riesgo o a madres con dificultades. La idea es morigerar las reacciones de la Jerarquía de la Iglesia Católica… difícil que el chancho chifle.

La Reforma Judicial cuya concreción tardó más de lo previsto se conoce a grandes trazos. Concierne al Código Procesal Penal, al sistema acusatorio. Y, de modo más vasto, al Fuero Federal. Las lacras y anomalías de los Tribunales tienen su epicentro en Comodoro Py pero no se circunscriben a ese famoso antro. Un nuevo proyecto atiende a esa falencia. Toma como inspiración el Consejo para la Consolidación de la Democracia, creado por el presidente Raúl Alfonsín, asidua referencia para Alberto Fernández. Se llamará Consejo para el Fortalecimiento Institucional del Poder Judicial (u otro nombre cacofónico similar), los conformarán juristas de reconocida reputación y surtidas filiaciones políticas. La ambición, como en el CES, es articular un ámbito de debate y formulación de propuestas no vinculantes. Los nombres del elenco se barajan sin estrépito. León Arslanián, acaso Federico Pinedo, abogados radicales, que abundan.

El presidente despotrica contra abusos cotidianos de los Tribunales. Por ejemplo contra el pésimo uso que hace la Corte Suprema del recurso extraordinario. Habilita demasiados, rechaza un montón sin dar fundamento alguno. O los deniega cuando entiende que el futuro trámite del expediente puede sanear una injusticia de origen. La consecuencia: cientos de causas “nacen” enfermas de nulidad y tramitan durante años para recién al final sanear el vicio. La cuestión, tan grave como muy técnica, es densa para simplificar. La nombramos acá, dejamos explicaciones para columnas futuras.

En todo caso se instalan dos instituciones novedosas, abiertas al intercambio y las polémicas públicas, un aporte interesante para una sociedad cuyas discusiones saben parecerse al estudio de Intratables o a tantos programas de chimentos.

Seis meses para reparar

AF insistió en que la revisión del cuadro tarifario de servicios públicos subsistirá durante seis meses sin aumentos en ese lapso. Otro alivio para el bolsillo de los ciudadanos-usuarios.

La ley jubilatoria que determinará una nueva fórmula de actualización de haberes insumirá el mismo lapso, prefijado a fines de 2019. En el ínterin crecerá la judicialización de los aumentos concedidos por decreto, entre ellos, el reclamo planteado por el Defensor de la Tercera Edad, Eugenio Semino, en representación de jubilados de bajos ingresos. Dicho reclamo, entiende este escriba, tiene mayor sustento legal y ético que las demandas inminentes de jueces opulentos que abusarán de la condición de local.

El Gobierno necesita tiempo para cumplir sus promesas, discurre atendiblemente Fernández que valora la paciencia social mientras mide minuto a minuto los vaivenes de los precios. Quienes conversan un rato con él (quien firma esta nota pudo hacerlo en la semana que hoy termina) perciben una interesante mezcla de calma, preocupación y un compromiso con lo público bien distinto al de Macri.

En menos de un trimestre el presidente disipó las dudas acerca del doble comando para una carrada de interlocutores nacionales e internacionales. Sostiene un estilo calmo y coloquial, accede a requisitoria de periodistas como ningún otro primer mandatario desde 1983. Los avances con el FMI lo estimulan, los apoyos ciudadanos lo entusiasman. Sabe que falta mucho para conocer el desenlace de las tratativas con los bonistas privados. Los lobos y los buitres de Wall Street, tienta apodarlos, aunque uno cree que esos motes son injustos con los animales y demasiado piadosos con los ases del sistema financiero global.

A pesar de que ya está en suelo argentino, la gira de Alberto Fernández por Europa sigue generando repercusiones. Hoy se publicó una entrevista en el diario francés Le Monde, realizada cuando aún estaba en París, en la que el Presidente pedía “un tiempo para reconstruir” la economía, comenta INFOBAE. El mandatario lamentó también que el país se hubiera endeudado “en una velocidad inusual, en cantidades increíbles” y que además se hubiese comprometido “a devolver en tiempo récord”.

Tal como le había dicho a este diario , Fernández consideró “cumplidos” los objetivos de su visita a los cinco países europeos, a los que viajó en la antesala de la renegociación de la deuda externa con el FMI contraida por Mauricio Macri. “El primer objetivo era volver a Europa, porque siempre fui un europeista convencido”, remarcó.

La nota de Le Monde reseña el viaje de Fernández en busca de “apoyo para renegociar la fenomenal deuda” del país y da cuenta de su visión a partir de los “ecos positivos” que encontró en sus pares de Italia, Alemania, Francia y España.

“Lo que pido no es exorbitante, mi mensaje fue: pagaré la deuda, pero me daré tiempo para reconstruir nuestra economía. Y recibí un apoyo masivo de mis interlocutores”, afirmó el mandatario.

Esa deuda equivale, cita el diario parisino, al “91 por ciento del PIB, mientras el país está sumido en una grave crisis económica”. En ese sentido, Fernández se quejó porque el pasivo fue contraído sin que se haya sometido el proceso a votación en el Congreso.

Por otro lado, resaltó que era fácil vaticinar el desenlace del acuerdo desde un primer momento por el contexto económico nacional. “También podría decirles a los acreedores: ‘Ustedes sabían que se estaban metiendo en problemas cuando invirtieron en un título con una tasa de interés del 8 por ciento, pese a que en todo el mundo era del 0 porciento. Cuando las limosnas son desproporcionadas, incluso el santo desconfía”, ironizó.

Aún así, juzgó que no se le puede “pedir al mundo de la especulación financiera que tenga ese tipo de reflexión”, más allá de que “era evidente que Argentina no podría pagar porque la economía estaba en recesión”.

“Pero la legitimidad de la autoridad que contrajo esta deuda no puede ser cuestionada, así que se debe hacer frente a eso”, expresó en la nota, titulada “Déjenme tiempo para reconstruir la economía argentina” y acompañada por una foto de Fernández en actitud reflexiva.

La “realidad escondida de Macri”

El Presidente denunció además que el cuadro de hambre extendido en el país formaba parte de una “realidad escondida” por la administración de Macri y describió su relación con la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner.

“No toma ninguna decisión, pero yo la consulto mucho. Fue presidenta durante 8 años; es de una inteligencia singular y no quiero privarme de su experiencia”, manifestó, y reivindicó la alianza entre sectores antes enfrentados que ahora se dieron cuenta que “millones de argentinos habían sufrido” por esas separaciones.

“Hay que separar el aborto de la esfera religiosa”

Finalmente, defendió su intención de legalizar el aborto, para lo que enviará pronto un proyecto al Congreso. “El Papa conoce mi posición desde hace mucho tiempo”, reseñó el presidente, que estuvo la semana pasada en el Vaticano con Francisco.

“Soy católico, pero hay que separar el aborto de la esfera religiosa. Esta no es una medida contra la Iglesia, sino en favor de los derechos de las mujeres y de la salud pública”, concluyó.

“¡Cristina, Cristina corazón, acá tenés los pueblos para la liberación!”, cantaban en la sala Nicolás Guillén en la 29º Feria Internacional del Libro de La Habana cuando Cristina Fernández de Kirchner apareció en el escenario para presentar por primera vez en el exterior Sinceramente junto al escritor y periodista Marcelo Figueras. La vicepresidenta explicó ante una sala repleta que en 2015 dejó un gobierno con cero pesos de deuda con el FMI y cuatro años después el macrismo “nos entregó el país con una deuda de 44 mil millones de dólares” con el Fondo Monetario Internacional. “Nunca se había debido una suma de esta magnitud. Eso no fue casual; claramente hay un ciclo de endeudamiento fenomenal mucho más grave que en 2003”, alertó la vicepresidenta. “De la misma manera que Alfonsín entendió que había una deuda con la democracia en materia de derechos humanos, tiene que haber un ‘Nunca más’ sobre la deuda”, agregó Fernández de Kirchner.

En la sala, a CFK la escuchaban en primera fila el presidente de Cuba, Miguel Díaz Canel Bermúdez, además de varios escritores e intelectuales locales, como el poeta y editor Alpidio Alonso Grau, ministro de Cultura de Cuba; el narrador y ensayista Abel Prieto, presidente de Casa de las Américas; Mariela Castro, directora del Centro Nacional de Educación Sexual (Cenesex); el autor de libros testimoniales Orlando Cardoso Villavicencio, la novelista Marta Rojas, la autora de literatura infantil Olga Marta Perez y la ensayista, investigadora y crítica Cira Romero, entre otros.

Marcelo Figueras reconoció estar “muy honrado de estar en este país que siempre ha sido tan generoso con nosotros y en esta ciudad que cumple 500 años de vida”. Desde que presentó Sinceramente en mayo de 2019 en la Feria del Libro de Buenos Aires, la ex presidenta estuvo recorriendo distintas ciudades del país, pero en cada sitio en que estaba con Figueras se trataba “más que de la presentación de un libro, de algo más parecido a un concierto de los Rolling Stones”, comparó el escritor y actual director de Radio Provincia. “En cada lugar donde presentaba Cristina este libro, que fue un fenómeno editorial y político, yo siempre decía ‘hoy toca Cristina en Santiago del Estero o Rosario’. Así que corresponde que dega ‘Hoy toca Cristina en La Habana’”, subrayó Figueras al principio del diálogo.

El lawfare
CFK precisó que el primer capítulo del libro lo terminó de escribir en La Habana. Ahí se refirió al lawfare como mecanismo para arrinconar a los líderes populares en base al sistema mediático primero, y de los aparatos judiciales después, que en América Latina tuvo un capítulo especial con las persecusiones contra Lula da Silva, Rafael Correa y Evo Morales. “En Argentina el lawfare tuvo además un componente mafioso porque extendió el ataque a toda la familia. En mi caso, se tradujo en la persecución a Florencia, tal vez por verla vulnerable, tal vez porque advirtieron que era un lugar especial para mí, donde podían horadarme”, reconoció la vicepresidenta. Allí agregó que su hija, que está bajo tratamiento en Cuba desde el 17 de febrero de 2019, “hoy está muchísimo mejor” y agradeció a las autoridades de la isla y a “la humanidad de los médicos cubanos”.

La ex presidenta reflexionó entonces sobre la evolución de las herramientas políticas utilizadas contra las disidencia en América latina y planteó que durante las dictaduras militares en la región tenía vigencia la doctrina de seguridad nacional y se usaron a las fuerzas armadas para la represión de los militantes políticos. “En aquel momento desaparecían a dirigentes y militantes porque no había forma de doblegarlos. En el período neoliberal que se instauró después de 24 de marzo del 76 era impensable convencer a los militantes de abjurar de lo que creían y el único método que se encontró fue la desaparición. En el posmodernismo, donde se desarrolla el lawfare, ya no era necesario desaparecer sino invalidar políticamente primero por la condena mediática y luego por una decisión judicial”, advirtió la vicepresidenta. “Se sustituyó la desaparición física por la desaparición mediática de la estigmatización. Eso fue lo que intentaron hacer conmigo. Condenarme socialmente, aislarme de modo tal que no fuera un peligro para lo que querían hacer”.

Graciela Ramírez, sobreviviente de la ESMA que vive en La Habana desde agosto de 1994, estaba en las primeras filas de la sala Nicolás Guillén. Ramírez dirigió la campaña para liberar a los cinco militantes cubanos que estuvieron presos en Estados Unidos durante 15 años desde 12 de septiembre de 1998 hasta 17 de noviembre del 2014. Teresa Muñoz Lopera, de Colombia, que leía muy atentamente el libro de Cristina, confesó que la persecución de Cristina la viven también en su país con el asesinato de líderes sociales y culturales. En enero de 2020 asesinaron a 21 líderes y lideresas en Colombia.

La deuda

Sobre la trampa del endeudamiento, Figueras recordó que hay un refrán en inglés que dice: “si me engañas una vez, la vergüenza es tuya, pero si me engañas dos veces, el que debería sentir vergüenza soy yo”, para referirse a lo sucedido en Argentina con el regreso al sobreendeudamiento durante el gobierno de Macri. A partir de ello, Fernández de Kirchner dijo que este momento tiene que ser un punto de inflexión en la historia del endeudamiento en la argentina. “El no haber investigado es lo que permitió volver a hacer lo mismo con los mismos personajes. Sturzenegger estuvo en el megacanje, vino por segunda vez como presidente del Banco Central y volvió a hacer lo mismo. Hoy está dando clases en una universidad americana, mientras los argentinos nos debatimos en una situación económica y social terrible”, resumió la ex mandataria que volvió a cuestionar la responsabilidad de los organismos de crédito internacionales como el Fondo Monetario Internacional (FMI) por haber «violado su normativa interna» respecto de no otorgar préstamos que permitan la fuga de capitales. “No fueron préstamos para hacer represas o carreteras” sino “para que se fugara el dinero”, alertó Fernández de Kirchner.

“Las soluciones tienen que ser expuestas ante la sociedad porque es la sociedad la que va a pagar; son los 45 millones de argentinas y argentinos. Todos tenemos que estar de acuerdo en que se apliquen las normas, pero el deudor va respetar las normas si el acreedor también las respeta”. Hubo también otro mecanismo de fuga con el incremento de las tarifas porque “con los pesos que les sacaron a los argentinos de los bolsillos con aumentos del 2500 por ciento las empresas compraban dólares y se los llevaban al exterior”. “Lo importante es que ahora podamos tener un diagnóstico de lo que pasó. No podemos pagar si no nos dejan crecer y no podemos crecer si el Estado no inyecta fondos a la economía. En una recesión el único que puede invertir es el Estado”, analizó la vicepresidenta y mencionó que Roosevelt salió de la recesión con una gran inversión pública.

“Las tarifas públicas tienen que ser revisadas”, expresó CFK, que manifestó su confianza en que el presidente Alberto Fernández realizará una revisión tarifaria en sintonía con lo prometido en la campaña. “Contamos con todos los instrumentos para hacerla. Estoy convencida de que se va a hacer. Lo he hablado con Alberto y lo va a hacer porque tiene ese compromiso con la sociedad. No tengo dudas”, confirmó la vicepresidenta.

La grieta

“En mi país hay muchos admiradores de lo que pasa en Estados Unidos, que quisieran vivir ahí y lo ponen como modelo de lo que hay que hacer. Ustedes vieron que en el discurso de Trump, estaba Nancy Pelosi de los demócratas y Trump no solo no le da mano, le dio vuelta el cuerpo, y después Nancy Pelosi le rompió el discurso. ¿Ustedes se imaginan eso en la Argentina? ¿Escucharon algún comentario acerca de la grieta en Estados Unidos? Se dan cuenta lo tilingos que somos los argentinos al adoptar comportamientos que te imponen un modo de pensamiento. A nosotros nos hubieran excomulgado. Es hora de dejar de ser un poco tilingos”, propuso la autora de Sinceramente. “Si hay grieta en Argentina, no sé que hay en Estados Unidos entre demócratas y republicanos”.

En cuanto a la salud de las democracias, precisó que «hay una insuficiencia para regular las relaciones económicas y sociales. La gran disputa que se está dando hoy es quién conduce el proceso capitalista de producción. El capitalismo en el modelo americano lo conduce el mercado. El capitalismo en el modelo chino lo conduce el Estado asociado con empresas. En China hay 1500 millones de personas, si el mercado condujera no tendríamos la China potente. No hay proceso de inclusión capitalista más grande que el de China. La discusión va por dos andariveles complementarios y paralelos: quién conduce el proceso económico y de qué representaciones nuevas dotamos a las constituciones. Que el mercado conduzca todo nos conduce al desastre, hasta al desastre climático; es la gran discusión que se viene”, auguró hacia el final de la presentación libro y mencionó una vieja pelea que tuvo que dar. “Hasta tuve que pelear, que me dijeran presidenta. Hasta que una señora consultó que la RAE le dijo que era más conveniente que me dijeran presidenta. Finalmente la Real Academia Española nos dio la razón”.

Varios argentinos presentes en la sala, como Víctor Santa María, titular del Grupo Octubre, la diputada del Frente para la Victoria (FpV) Gisela Marziotta, Hugo Soriani, director general de PáginaI12, Javier Figueroa, el embajador argentino en Cuba, y el sociólogo Atilio Borón consiguieron entre sonrisas que hasta los cubanos cantaran con entusiasmo “la marcha peronista”. Un mulato repetía con entusiasmo “combatiendo al capital” (una interpelación que moviliza el imaginario revolucionario de los cubanos); algunos hacían la V peronista cuando pronunciaban “Perón, Perón sos el primer trabajador”. Antes de dejar la sala, Cristina se quedó firmando casi 300 ejemplares de su libro. CFK tocó por primera vez en La Habana y la rompió.

El economista y consultor Orlando Ferreres calculó que la inflación “va a bajar”. En enero y febrero se ubicaría entre “2,5% y 2,7%”, mientras analizó que es “posible” encontrar una “solución” para la deuda para fines de marzo.

Muchos analistas señalan la crisis financiera de los años 2007 y 2008 como la peor desde la década del 30. Pero se trata de algo más complejo: es una nueva crisis del capitalismo, económica, ecológica, política y “del cuidado”.

“Va a bajar la inflación. Para enero, calculamos que un 2,5% ó 2,7% y para febrero, posiblemente, lo mismo. No esperamos ningún aumento importante”, estimó.

Sin embargo, advirtió que “el tema es cuando empiecen a vencer los plazos de congelamientos”.

“Cuando empiecen a aparecer esos aumentos, puede venir una inflación y, encima, la cantidad de dinero aumentó más que en otros años durante diciembre y enero. Ahora tendría que venir una reducción en esa cantidad de dinero y estamos esperando la última semana de enero para ver si se reduce”, evaluó.

De ese modo, alertó que “es un tema peligroso porque con mucha cantidad de dinero es difícil que baje la inflación”.

Con relación a la deuda, consideró que “es posible encontrar la solución para el 31 de marzo y que, de ahí en adelante, comiencen otros programas que puedan dar un poco de crecimiento económico”.

“Con todos los impuestos adicionales que hay, va a ser difícil que la gente pueda gastar dinero”, apuntó y aseguró que “está gastando menos y eso es un tema que complica mucho la actividad económica”.

Para Ferreres, es probable que el Gobierno resuelva las negociaciones de la deuda para fines de marzo porque “no está tan dispersa la cantidad de deudores de la deuda pública argentina”.

“Son fondos de inversión y es mucho más fácil poder hablar y adecuarse con ellos”, confió y puntualizó: “Los bonistas prefieren quitas de intereses y no de capital”.

“Tiene que ser una quita importante de forma tal que la proyección del futuro del sector externo dé bien y pueda ser pagado con reservas y generación de exportaciones. Es lo típico de cualquier concurso privado”, enfatizó.

Asimismo, subrayó que: “Tenemos que pagar la deuda para lo cual hemos apretado con impuestos a distintos sectores de la clase media”.

Al ser consultado respecto del tipo de cambio, sostuvo –según publica Ámbito– que “hay que moverlo porque a ese dolar bajo se aplican los derechos de exportación”. Afirmó que ello “va a traer problemas con el campo” y argumentó: “Creo que eso va a tener que empezar a moverse. Ya hay prevista una huelga de comercialización del campo que van empezar a sentirse sus efectos en la medida en que se prolongue”.

La gestión del presidente Mauricio Macri llega a su fin esto próximo 10 de diciembre. Las políticas económicas recesivas han tenido un fuerte impacto cuyo correlato fue en muchas ocasiones la pérdida de fuentes de trabajo. A lo largo de los cuatro años de gestión, desde diciembre de 2015, se perdieron 5.800 empleos en Chubut.

Mientras para diciembre de 2015 cuando asumió Macri la provincia contaba con 101.400 asalariados registrados en el ámbito privado, para septiembre de 2019 (último dato disponible desde la cartera de Trabajo de Nación) hay 95.600 trabajadores.

Sin embargo, en el balance de estos cuatro años, el que estamos transitando no ha sido el más complicado al menos desde las fuentes laborales. De acuerdo con las cifras oficiales a lo largo de 2019 se destruyeron 300 empleos, más allá que reste aún los datos para octubre, noviembre y diciembre.

El peor año de la provincia fue 2018. Hubo una merma de 2.600 fuentes de trabajo, en un contexto de fuerte volatilidad cambiaria que hizo que el dólar saltara de los $20 a los $40 y con una inflación del 50% para la Patagonia. También en 2016, durante el primer año de gestión de la actual administración nacional fue otro período con fuerte devaluación tras la salida del Cepo Cambiario, que dejó afuera del mercado de trabajo a 2.400 personas como corolario.

En tanto que, en 2017, único año de crecimiento que registro la gestión macrista, fueron 500 los puestos que se perdieron.

El balance fue siempre negativo a lo largo de los cuatro años para Chubut. Y el dato de septiembre de 2019 lleva a los valores de empleo similares a los que cerraba Chubut en 2013, seis años atrás.

En el resto de la región, la situación fue bastante similar en la tendencia, a excepción de Neuquén, que tuvo crecimiento de fuentes de empleo, fundamentalmente apoyada por el boom del yacimiento no convencional de Vaca Muerta y la fuerte apuesta de inversión que llevó adelante el Gobierno Nacional. En dicha jurisdicción se crearon 7.400 empleos en los cuatros años que pasaron.

En Santa Cruz, las bajas llegaron a las 8.400, mientras que en Río Negro los trabajadores que quedaron sin empleo superaron los 10.000. Y en Tierra del Fuego, en tanto, fueron 10.600 menos. En La Pampa hubo 900 empleos menos. Es decir que en toda la Patagonia desde fines de 2015 hasta la actualidad se destruyeron 28.400 empleos del sector privado.

Datos país

Según el último reporte de Trabajo de Nación, en septiembre En septiembre de 2019 se registraron 6.074.553 asalariados en el sector privado, 138,7 mil menos que en el mismo mes del año anterior (-2,2%). En términos desestacionalizados presentó una variación de -0,4% (-22,7 mil trabajadores).

Tres de las 24 jurisdicciones registraron aumentos interanuales en la cantidad de asalariados registrados en el sector privado: Neuquén (+5,4%), Santa Cruz (+1,2%) y Salta (+1,1%). Las mayores caídas se dieron en Formosa (-4,6%), San Juan (-4,8%), Santiago del Estero (-5%), La Rioja (-6,4%), Catamarca (-6,7%) y Tierra del Fuego (-10,4%). Teniendo en cuenta su peso en el empleo total, las provincias que más incidieron en la dinámica general fueron Córdoba (-3,6%), Buenos Aires (-2,7%), CABA (-2,3%) y Santa Fe (-2%).

En la evolución mensual desestacionalizada, 6 de las 24 provincias mostraron aumentos del empleo con respecto a agosto. Las de mayor expansión fueron Formosa (+0,1%), Chaco (+0,1%), Misiones (+0,1%), Tucumán (+0,2%), Neuquén (+0,4%), y La Pampa (+0,5%). Las de mayores caídas se observaron en La Rioja (-0,6%), Mendoza (-0,6%), Santa Cruz (-0,6%), San Luis (-0,7%), Corrientes (-0,7%), San Juan (-1,2%) y Tierra del Fuego (-1,3%).

Cuatro de los catorce sectores tuvieron crecimientos interanuales en la cantidad de asalariados registrados. Los aumentos se dieron en Explotación de minas y canteras (+5,1%); Agricultura, ganadería, caza y silvicultura (+1,3%), Suministro de electricidad, gas y agua (+0,8%) y Enseñanza (+0,4%). El resto de los sectores presentó variaciones negativas. Intermediación financiera (-1,6%), Hoteles y restaurantes (-2,4%), Transporte, almacenamiento y comunicaciones (-2,9%), Comercio y reparaciones (-3,6%), Construcción (-4,2%) e Industrias manufactureras (-4,5%).

En la variación mensual sin estacionalidad, el crecimiento relativo se dio en 3 sectores : Explotación de minas y canteras, Intermediación financiera y Enseñanza. Por otro lado, el resto de los sectores presentaron caídas en el empleo: Suministro de electricidad, gas y agua (-0,2%), Servicios sociales y de salud (-0,2%), Agricultura, ganadería, caza y silvicultura (-0,3%), Comercio y reparaciones (-0,3%), Industrias manufactureras (-0,3%), Hoteles y restaurantes (-0,5%), Construcción (-2,6%) y Pesca (-2,8%).

La calma del dólar que tuvo lugar durante octubre en un contexto de controles cambiarios colaboró con la desaceleración del ritmo de suba de precios. Según consultoras privadas, que por estas horas ajustan sus estimaciones finales con los últimos datos, el mes pasado tuvo una inflación cercana al 4%, una caída respecto al 5,9% de septiembre aunque todavía en los niveles más altos del año.

Octubre no tuvo aumentos pronunciados puntuales, pero contó con un efecto «arrastre» del pico inflacionario de septiembre que dejó una base alta de suba de precios. Según la consultora Elypsis, la inflación total del mes fue de 3,9% y de 3,6% si se toma en cuenta solo el valor de los alimentos.

«Los precios subieron 0,3% entre el lunes 28 y el jueves 31. El 7,1% de los precios relevados tuvieron aumentos. Hubo subas y también reducciones en la medida que el tipo de cambio se deslizó hacia abajo lunes y martes, pero sobre el jueves muchos volvieron a ajustarse. Igual, eso amortiguó la inflación sobre fin de mes y estaría permitiendo finalizar octubre levemente abajo de 4%», explicó un informe de esa consultora.

Para el IPC Bahía Blanca, una medición privada que se centra solamente en la evolución de costos de esa ciudad bonaerense, los precios aumentaron a ritmo de 3,94%. En este muestreo se destacaron los alimentos (4,43%), transporte y comunicaciones (4%) y esparcimiento (9%).

Otras estimaciones privadas son incluso más elevadas. Para FIEL, por ejemplo, el IPC de octubre estará cómodamente por encima de 4%. «Nuestro resultado preliminar es de de 3,7 o 3,8% en la Ciudad de Buenos Aires A nivel nacional hay que estimar 4,2 a 4,4% por la diferencia de canastas que hay, con más bienes. La última semana vimos muchos aumentos», explicó a TN.com.ar Juan Luis Bour, economista de ese centro de estudios.

Por su parte, Ecolatina proyectó 4,5% para octubre. «Si bien este dato muestra una desaceleración respecto al pico alcanzado en septiembre, se mantiene todavía en niveles elevados. De hecho, los precios acumularon un alza de 42,6% en los primeros diez meses del año y de 51,6% con respecto a igual mes del 2018», informó la consultora.

En general, los economistas creen que no hay mucho espacio para un proceso de desinflación hasta que termine el 2019. Para Federico Moll, de Ecolatina, es difícil que el Índice de Precios al Consumidor «perfore el 3% mensual en lo que queda del año».

Para Elypsis, por su parte, «como se anticipan aumentos en diversos bienes y servicios en los próximos días, sostenemos la proyección de inflación noviembre en 4,5%. Para diciembre, en la medida que persistan los controles actuales y la incidencia del dólar blue y CCL se mantenga acotada, la inflación debería estar en niveles similares (4,5%)».

La transición entre el Gobierno actual y el próximo a partir del 10 de diciembre estará enmarcada en subas de precios en rubros sensibles para el bolsillo, como alimentos, combustibles, tarifas y medicina prepaga. Algunas de esas subas ya comenzaron y otras tendrán lugar en los primeros días de mandato del Frente de Todos en la Casa Rosada.