La muerte de la profesora Lorena Andrade (34), ocurrida en la noche del viernes a consecuencia de un accidente de tránsito protagonizado por caballos sueltos, fue este lunes el detonante para que centenares de vecinos salgan a exigir “que no haya más animales sueltos” y que “se coloquen reductores de velocidad en las calles y rutas de acceso”.
“Con el ánimo de hacer un aporte para la seguridad vial en las calles y en las rutas de acceso, solicitamos y exigimos que en un plazo no mayor a 15 días se coloque señalización de velocidad máxima y se instalen reductores de velocidad, junto a mejorar la iluminación y hacer cumplir las normas que prohíben la presencia de animales sueltos, previendo la aplicación de multas y aumentando los valores de sanciones”, reflejaron en un petitorio entregado al intendente Luis “Chalo” García, quien salió a recibirlo acompañado de su secretario de Gobierno, Antonio Guzmán, y varios de los concejales y funcionarios.
Los restos de Lorena Andrade fueron sepultados este domingo en el cementerio local, con acompañamiento masivo de la población. En la marcha se dijo varias veces que “fue una muerte absolutamente evitable”, recordando que varios vecinos advirtieron en las horas previas sobre los equinos sueltos, pero “nadie nos dio bolilla”.
Al hablar frente a la manifestación –integrada mayoritariamente por los alumnos del colegio secundario donde la víctima dictada sus clases de biología-, “Chalo” García recordó que en la entrada sur al pueblo ferroviario “hay un club hípico y siempre funcionó un campo de jineteada, además de equinoterapia. Siempre hubo caballos, pero lo que nunca tuvo que pasar es que estén sueltos sobre la ruta”.
Aclaró enseguida que asume “la responsabilidad que me debe tocar ante la justicia, si el municipio es responsable pagaremos por esta situación”. Sin embargo, “más allá de que haya responsables, duele saber que nadie devolverá la vida de Lorena a su familia, fue un accidente que se pudo haber evitado y hoy nuevamente la comunidad de El Maitén está de luto”.
El lamentable suceso ocurrió sobre la ex ruta 40, a unos mil metros del casco urbano. Por el lugar transitaba un automóvil VW Gol Trend, guiado por Damián Esteban Rosolino, de 36 años de edad, quien iba acompañado por su esposa, Lorena Andrade, de 34 y su hija de solo 2 años.
El conductor, debido a la niebla imperante en el sector a esa hora, no pudo evitar la colisión y el equino fue levantado en el aire para caer sobre el techo del vehículo, aplastándolo.
El informe agrega que hubo que destruir parte del vehículo para sacar a quienes viajaban en el mismo, constando que Lorena Andrade había perdido la vida en el momento. Por su parte, su esposo y la niña sufrieron lesiones de consideración y tuvieron que ser trasladados al Hospital Zonal de Esquel, donde quedaron internados con carácter reservado pero, se confirmó, que sus vidas, no corrían riesgo.
Policía y la justicia competente, trabajan para dar con el propietario del equino que fue causante de este trágico accidente sufrido por esta familia radicada en El Maitén.
Fuente: Noticias del Bolsón