La mercadería a distribuir fue canjeada por más de 5 mil litros de bebidas alcohólicas decomisadas en el transcurso de este año, a partir de los controles efectuados por la Coordinación de Inspecciones Generales, dependiente de la Secretaría de Gobierno, junto con Guardia Urbana y Policía de la provincia. Previa consulta a cada entidad, el municipio destinará una cantidad determinada de alimentos en virtud de la demanda.
«La idea es hacer un bien al barrio, a partir del mal que provoca la venta clandestina de alcohol», expresó el responsable del área, Héctor López.
Decisión del intendente
La bebida fue decomisada durante el transcurso de este año. Y «por decisión del intendente Adrián Maderna se propuso canjearla por alimentos no perecederos para clubes de abuelos, hogares de niños y adolescentes, comedores, entre otros, en función de profundizar el compromiso social y apuntar a la solidaridad en beneficio de los más carenciados», comentó el funcionario.
«Por resolución del intendente, hechas las consultas pertinentes, se tomó la determinación de avanzar con esta idea, que es trabajar por aquellos que menos tienen», finalizó López.
