El Museo Municipal de Artes Visuales de Trelew (MMAV) exhibirá desde este viernes a las 20 horas nuevas muestras, recibiendo en esta oportunidad a los artistas Horacio Marras (historietas- humor – pintura –Oleos), Patricia Robles- (FOTOS-“Sentidos”) y Pablo González Medrano- (Pintura -Oleo).
En la Sala 2, Patricia Robles, presentará “Patagonia …Viva”, una colección de fotos de nuestra Patagonia que retrataron cinco fotógrafos que representan, Puerto Madryn, Trelew, Gaiman y Rio Turbio, Santa Cruz: Mariel Bonavia: (Gaiman), Pedro Tagliabue (Gaiman), Héctor Luis Pereyra (Madryn), Mirta Virginia Errendasorro (Río Turbio, Santa Cruz) y Patricia Robles (Trelew).
Bajo la premisa “Unidos por el arte, queremos contar las vivencias urbanas y rurales que se viven en nuestras ciudades», se exhibirán imágenes de 30 x40 editadas a color y en blanco y negro.
En la Sala 1 y 3, estará Horacio Marras (Gaiman 25/10/1947 – 11/11/2007). El artista realizó dibujos para la historieta de contenido histórico sobre “Simón de Alcazaba” y “Los Rifleros de Chubut”, editado en formato revista, en el año 192. Además fue dibujante de LU90 CANAL 7 de Rawson, de los Diarios El Chubut y Jornada e hizo ilustraciones de libros de distintos autores del Chubut.
Además realizó de humor gráfico y político para los medios Cordilleranos de Bariloche, El Regional de Gaiman y en la revista “Policía y Comunidad” de Rawson. Fue expositor y disertante invitado en diversos eventos culturales. Fue dibujante y Perito en Planimetría y Retrato hablado ( Identikit) de la Policía del Chubut; presentó exposiciones en Chubut, Santa Cruz, y Buenos Aires.
Sus obras se encuentran en distintas colecciones particulares, del País y el extranjero y veinte de sus cuadros están en exhibición en la Biblioteca Nacional de Gales. Otras de sus importantes obras, son los escudos Municipales de Gaiman y Camarones.
Finalmente en la Sala 4 exhibe sus trabajos Pablo González Medrano. La pintura del premiado artista plástico refleja el espíritu de esos lejanos parajes de la Patagonia, lugares ventosos y áridos donde apenas sobrevive una sencilla edificación. En esta aparente soledad, habita el detalle, la textura y los colores intensos. Todo confluye en equilibrio, imprimiendo vitalidad y luz, donde sólo aparecen paredes descascaradas o herrumbres junto al mar, destacándose una maestría en el uso de la perspectiva y atmósferas de gran sensibilidad. Sus paisajes alcanzan también la geografía de otras provincias, a partir de encuentros de pintores en los que participa. Muchas de sus obras las pinta in situ y para ello, se traslada con sus óleos y su caballete.