El 24 de noviembre la conocida delincuente comodorense no volvió de su salida transitoria. Está acusada como cómplice de un crimen, quiso incendiar la Alcaidía, amenazó a su ex con un arma y quemó con agua hirviendo a un guardia.
Brenda Vargas (26) está prófuga desde el 24 de noviembre pasado cuando accedió al beneficio de las salidas transitorias para ver a su familia.
Desde ese momento no se tienen rastros de ella: nunca regresó a la Alcaidía de Comodoro Rivadavia, donde estaba detenida. Su historia llegó incluso a los medios nacionales, incluso el diario Clarín tituló: “La historia de Vargas, la presa que quema comisarías cuando no la dejan fumar”.
Es que Vargas tiene un prontuario diverso, está acusada como cómplice de un crimen, intentó incendiar la Alcaidía de Comodoro Rivadavia, amenazó a su ex con un arma y quemó con agua hirviendo a un guardia porque no le quiso convidar fuego para un cigarrillo.
Fue en octubre del año pasado, en el marco de un juicio abreviado, que le unificaron cuatro causas. Vargas aceptó la autoría de todos los hechos que se endilgaban y recibió la pena única fue 4 años y medio de prisión efectiva.
El 24 de diciembre Vargas cumplió un mes de libertad. El beneficio de salidas transitorias lo había conseguido apenas unas semanas antes de escaparse y ahora tiene pedido de captura internacional.
ADN Sur