El periodista brasileño Rafael Henzel, uno de los seis sobrevivientes del accidente aéreo en Colombia que diezmó el equipo Chapecoense en noviembre de 2016, falleció este martes a causa de un infarto después de un partido de fútbol, informó la radio en la que trabajaba.
«Él jugaba al fútbol con amigos y sufrió un infarto fulminante. Fue llevado al Hospital Regional de Chapecó, donde fue confirmado el fallecimiento del colega periodista», dijo el locutor Marcinho San en radio Oeste Capital.
Henzel, de 45 años, había sobrevivido al accidente aéreo que el 28 de noviembre de 2016 causó la muerte de 71 personas, entre ellos 19 jugadores del Chapecoense que viajaban a Medellín, noroeste de Colombia, para disputar ante el Atlético Nacional la final de la Copa Sudamericana.
Entre los sobrevivientes hay tres jugadores del club brasileño, que no tardó en expresar su «profundo pesar» y condolencias a la familia debido a la muerte del narrador de fútbol, según un comunicado publicado en su página web.
Rafael Henzel (derecha), posando para las fotos durante un homenaje a los sobrevivientes del accidente aéreo de Chapecoense. /AP Photo/Silvia Izquierdo/
«Durante su brillante carrera, Rafael narró de forma excepcional la historia del Chapecoense. Se convirtió en un símbolo del equipo y en las páginas verdes y blancas de esta institución, siempre habrá el recuerdo de su ejemplo de superación y de todo lo que hizo, con amor, por el equipo, la ciudad de Chapecó y todos los apasionados del fútbol», escribió el plantel.
«Deseamos de todo corazón que la familia tenga fuerza para enfrentar otro momento tan difícil y esta pérdida irreparable», añadió.
El avión de la aerolínea LaMia, con matrícula boliviana, se precipitó poco antes de llegar al aeropuerto José María Córdova, a 20 kilómetros de Medellín. Una investigación de las autoridades colombianas determinó que la nave se accidentó por falta de combustible.
Henzel resultó herido, con siete costillas fracturadas y neumonía, que lo llevaron a permanecer 20 días en cuidados intensivos. Poco después de su recuperación, el periodista volvió a ejercer su oficio. Incluso el martes a la mañana, horas antes de morir, presentó, como era habitual, un programa en la cadena brasileña Radio Oeste Capital FM.
«No recuerdo cuanto tiempo pasó desde que se apagaron las luces y el avión se estrelló. Sólo me acuerdo de que miré hacia mi lado izquierdo, ya que estaba en la penúltima fila del avión, y vi a un comisario de a bordo que tenía el cinturón de seguridad bien extendido. Cuando el avión quedó a oscuras, el silencio que hubo fue sepulcral. Aterrador. Porque todos los motores dejaron de funcionar. Después de ese silencio tan atroz, el avión chocó. Tuve la suerte de despertarme cuando unos socorristas pasaban cerca de donde había caído y comencé a gritarles para llamarles la atención para que me atendieran», le contó Henzel al diario Marca un mes después del accidente.
«Mi asiento había quedado atrapado entre dos árboles y mis piernas estaban atrapadas entre las ramas. Cuando desperté vi a mis dos colegas (Renan Agnolin y Djalma Neto), con los que iba sentados, junto a mí, ya que se habían despegado los tres asientos a la vez. Yo iba en el medio de los tres. Ellos dos fallecieron. Fue muy impactante», explicó el único sobreviviente de los 21 periodistas que viajaban en el avión.
Sus recuerdos del accidente los plasmó en el libro «Vive como si cada día fuera el último» («Viva como se estivesse de partida»), presentado en 2017. También contaba su historia en diferentes eventos, como ocurrió hace diez días cuando en Bilbao se presentó el documental ‘Nosso Chape’, en el marco del Festival Thinking Football.
Además del periodista, los otros sobrevivientes de la tragedia que marcó al Chapecoense fueron los jugadores Jackson Follmann, Neto y Alan Ruschel y dos tripulantes bolivianos, Erwin Tumiri y Ximena Suárez. El arquero Danilo, el séptimo rescatado al momento del accidente, murió cuando ya estaba en la sala de operaciones del hospital.
Clarín