Será el 21 y 22 de febrero en el marco de la Fiesta Nacional del Lúpulo en El Bolsón. Tendrá como escenario el auditorio de Lago Escondido y es con inscripción gratuita.
El coordinador Hernán Testa adelantó que “contamos con el acompañamiento del Inta y Conicet” y que “ya están confirmados disertantes internacionales y nos siguen apoyando las empresas Hopsteiner (EE.UU.) y Fermentis (Brasil), que son líderes mundiales en la temática”.
En detalle, el programa de la jornada inaugural incluye al propio Testa hablando sobre “Ciencia lupulera aplicada desde el campo hasta el dry hopping”. Le sigue Richard Shaye (Hopsteiner, EE.UU.), con el tema “el mercado del lúpulo, repaso del año”.
Más tarde, Manu Núñez (Antares, Mar del Plata) y René Nogel (Kunstmann, Valdivia), expondrán sobre “Manejo de lúpulo a gran escala; Frank Peifer (Hopsteiner, Alemania) con “cambios en el aroma del lúpulo a través de la clarificación de la cerveza) y Diego Setti (Zeta Atelier, Buenos Aires) con “Evaluando estilos lupulados, la mirada del juez en los concursos).
Luego, los asistentes tendrán la oportunidad de visitar los lupulares del Camino de los Nogales, con las chacras ya en plena cosecha.
El programa del sábado 22 prevé la disertación de Andrea Trochine (Ipatec-Creltec, Bariloche), sobre “Avances en análisis genéticos de variedades de lúpulos locales y ensayos de estabilidad”.
Cabe destacar que en la Comarca Andina se produce el 90% del lúpulo del país, con unas 140 hectáreas en producción: 60 en el Camino de los Nogales, la zona más fértil; 40 en Mallín Ahogado y otras 20 en Lago Puelo, divididas entre dos productores. Se agrega la empresa Quilmes con unas 30 hectáreas en Fernández Oro (unas 50 toneladas). Sin embargo, en total se abastece apenas el 30% de la demanda argentina. Cascade, Traful, Victoria, Nugget, Tehuelche, Catarata y Bullion son las principales variedades que se cultivan.
El lúpulo es el ingrediente con menor porcentaje en la cerveza, pero tiene un valor fundamental al ser el responsable del aroma, amargor y sabor. También tiene un rol clave en la estabilización de la espuma, generada previamente por la malta de cebada. Entre El Bolsón y Lago Puelo, son más de 60 familias las que viven del lúpulo, que es uno de los cultivos que más mano de obra necesita, incluso más que la frambuesa.
Luego de luchar durante años en busca de mayor competitividad y rentabilidad, durante la última década los productores de lúpulo de la Comarca Andina fueron recuperando un papel protagónico con el surgimiento masivo de las cervecerías artesanales que se observa por todo el país.
El “boom” de consumo, paulatinamente, les facilitó la incorporación de tecnología, maquinaria e innovación para satisfacer a un mercado que “exige calidad y mucha precisión a la hora de elegir el aroma y sabor” en relación al lúpulo.
Fiesta
La 46° edición de la Fiesta Nacional del Lúpulo, se desarrollará los días 21, 22 y 23 de febrero y contará con “Agapornis” para el viernes; “Las Pelotas” y “Ella es tan cargosa” para el sábado y “Ráfaga” para el domingo, además de una grilla de músicos regionales de primer nivel. En el cierre, el público presente tendrá la posibilidad de participar de una lotería familiar, que este año tiene como premio mayor un automóvil 0 km.
Los festejos buscan homenajear a los colonos que desde principios del siglo 20 se dedicaron a desarrollar la producción del lúpulo en la región. El origen de la fiesta radica en una antigua reunión popular que se realizó por primera en 1964 y siguió en el tiempo para celebrar la llegada de las cosechas, tradición que aún sigue vigente, señaló EQSNotas.