Así lo destacó un relevamiento de la Asociación Argentina de Marcas y Franquicias (AAMF), del cual se desprende que las ventas actuales de los locales vinculados a la gastronomía reportan en la actualidad caídas de ventas en un promedio interanual del 65%.
La implementación de un sistema de take away ampliado permitiría incrementar entre 15 y 20% las ventas de los comercios de gastronomía, de acuerdo con el tipo y ubicación del local, mientras que la posibilidad de incorporar mesas al aire libre con protocolos elevaría la mejora un 30% en los niveles de ventas.
Así lo destacó un relevamiento de la Asociación Argentina de Marcas y Franquicias (AAMF), del cual se desprende que las ventas actuales de los locales vinculados a la gastronomía reportan en la actualidad caídas de ventas en un promedio interanual del 65%.
El informe precisó que durante las diferentes fases de cuarentena, en promedio, el 75% de los consumidores eligió el delivery para realizar sus pedidos.
La implementación de un take away ampliado (posibilidad de comer o beber en el exterior del punto de venta) permitiría incrementar entre 15% y 20% las ventas gastronómicas de acuerdo con el tipo y ubicación del local.
A su vez, la posibilidad de incorporar mesas al aire libre con protocolos reportaría hasta un 30% de mejora en los niveles de ventas actuales.
Del relevamiento del sector gastronómico realizado por la AAMF participaron grandes cadenas de pizzerías, heladerías y cafeterías, para conocer cuál es la diferencia económica entre el take away (para llevar) y el delivery (envío a domicilio), tanto para el consumidor como para el comerciante, durante las distintas fases de la cuarentena.
Así en la fase 1, en la que el 100% de las ventas fue por delivery porque no estaba habilitado el take away, las caídas de venta oscilaban entre el 70% y el 100%, dependiendo de tipo y ubicación de negocio, con gran cantidad que aún no podían operar porque no tenían desarrollado el delivery
En la fas 2 con la habilitación del take away las ventas crecieron levemente versus la fase 1, y alcanzaron caídas que oscilaban entre el 60% y el 80%, y en la actualidad, los comercios relevados afirmaron tener un nivel de actividad del 35%, es decir caída del 65% ante lo esperable para esta época.
Ante esta situación, el gerente general de la AAMF, Ezequiel Devoto, consideró que «es imprescindible y urgente la habilitación de las mesas exteriores y el interior de los salones con un aforo del 50%, obviamente con protocolos de higiene y distanciamiento».
La eventual habilitación, coincidió el directivo del sector franquicias, debe contemplar «la continuidad de los planes de asistencia, para evitar que sigan cerrando negocios y se sigan perdiendo puestos de trabajo”.
Se estima que el sector gastronómico emplea en forma directa a más de 500.000 personas en todo el país.