En las últimas horas trascendió en las redes sociales una publicación de la página del Ministerio de Seguridad, donde se afirma que el ministro estaría contagiado de coronavirus; una información reciente pondría en duda dicha situación…
No es ningún secreto, que la palabra de los políticos está seriamente devaluada a raíz de todas las mentiras y entuertos en los que se vio involucrado el estado provincial.
Eso, sumando lo informado por un par de fuentes cercanas al gabinete político de Arcioni, provocaría dudas acerca de cuál es el verdadero estado de salud del ministro Massoni.
Se dice que el ministro habría inventado tener coronavirus para jugar políticamente con la ola de delitos que acechó a la ciudad de Trelew estos últimos días, para la que no encontraría solución alguna.
Aparentemente lo habría hecho para hacerles creer tanto a los trelewenses como al resto de los chubutenses, lo “indispensable” que es él para la seguridad de la provincia y que en caso de su ausencia, la población no se vería tan “protegida” como lo está cuando él anda recorriendo las calles; una perversa puesta en escena con la que buscaría producir un juego entre la empatía y la admiración en la gente.
Si Massoni pretende generar eso en la sociedad realmente estaríamos en condiciones para aseverar lo estúpido que considera al ciudadano chubutense.
Pero eso no sería todo… existiría un doble propósito, uno es el mencionado y con respecto al segundo objetivo, para comprenderlo bien es importante responder a un interrogante: ¿En contra de quién haría Massoni esta jugada política? y esto, según fuentes, estaría necesariamente relacionado con el hecho de que el gobernador Mariano Arcioni le habría pedido la renuncia a comienzos de esta semana, a raíz de una serie de desencuentros que habrían provocado una tensa relación entre ambos, sin embargo el ministro se habría rehusado a irse.
En consecuencia, Massoni estaría operando políticamente en contra de Arcioni con el fin de perpetuarse en su cargo de ministro de seguridad y es por eso que habría inventado estar contagiado de coronavirus.
Esto, a los efectos de convertirse en un ser “indispensable” para la seguridad de la provincia y de esta manera intentar lograr en la gente una manipulación política para conseguir un consenso social, con lo que pretende provocar en caso de que funcionara su supuesta “opereta”: un malestar en la sociedad ante la eventualidad de que lo reemplacen en su cargo.
Se suma a su vez el agravante de que Ricardo Sastre estaría acaparando cada vez más el “afecto” del gobernador y el hecho de que Arcioni se haya tomado licencia, involucraría un mensaje que dejaría entrever el conflictivo clima que se vive en el gabinete a causa de Massoni y por otro lado un gesto de confianza al vicegobernador.
Cabe destacar que la relación entre Massoni y Sastre nunca habría sido buena en razón de una rivalidad de muchos años, sobre todo si tenemos en cuenta que el vicegobernador poco antes de asumir habría dicho: “Ni bien asuma… a Massoni me lo llevo puesto”, por lo tanto el hecho de que hoy se encuentre provisoriamente al frente de la provincia no creemos que sea de agrado del ministro de seguridad.
Massoni debería salir a aclarar esto a los chubutenses publicando los resultados médicos que acrediten realmente que tiene la enfermedad.
Y en caso de que se confirme que está enfermo de coronavirus, nos tendríamos que sentar a evaluar a cuantas personas pudo haber puesto en riesgo teniendo en cuenta que todo éste tiempo, ha estado ingresando a domicilios (sin tener las facultades para hacerlo) en el marco de allanamientos policiales.
Pero también debemos pensar a cuantos agentes de policía podría haber expuesto al virus, en razón de que el ministro si bien en cámaras “choca puños”, cuando nadie está filmando se abraza con comisarios amigos, lo cual sería un tanto preocupante en caso de que resulte estar realmente infectado, pues de ser así toda la plana mayor de la Policía estaría contagiada.
La mente de Massoni estaría obnubilada en estos momentos por una intensa paranoia a causa de pensamientos que le hacen creer que todo el mundo está conspirando en su contra, eso sería entendible en razón de que la mayor parte del gabinete de Arcioni está harto de que el polémico ministro quiera tener todo el poder de decisión en la “mesa chica” del poder ejecutivo provincial; el gobernador Arcioni esté cansándose cada vez más de él y su eterno rival sea quien se encuentre temporalmente al frente de la gobernación en virtud de la licencia de Arcioni, como la constitución provincial manda.