El Senado de Estados Unidos rechazó un intento de los republicanos de declarar inconstitucional el nuevo juicio político al expresidente Donald Trump, pero el resultado de la votación ratifica que será muy difícil para los oficialistas demócratas lograr el número de legisladores dispuestos a condenar al magnate.
Una resolución presentada por el republicano Rand Paul fue rechazada por 55 votos a 45. Entre los votos de la mayoría se cuentan los de los de 5 republicanos (Mitt Romney, Ben Sasse, Susan Collins, Lisa Murkowski y Pat Toomey).
No obstante, la gran mayoría de los senadores del Partido Republicano, 45 -incluido el líder de esa minoría en el Senado, Mitch McConnell-, respaldaron la propuesta de Paul, según informó la cadena CNN y recogieron las agencias Europa Press y AFP.
La votación fue apenas después de que los 100 senadores se comprometieran a impartir «una justicia imparcial» en el proceso.
Paul consideró que el juicio de impeachment contra Trump es inconstitucional porque el magnate ya no es presidente de Estados Unidos, por lo que, si avanza, el proceso sería “a un ciudadano particular y no a un presidente».
El líder de la mayoría demócrata en el Senado, Chuck Schumer, replicó al senador republicano que la Constitución permite evitar a exfuncionarios ocupar cargos federales en el futuro.
Para Paul, el resultado de la votación marca que el juicio «nació muerto», aunque la compulsa no necesariamente significa que todos vayan a sostener su voto al final del proceso. Muestra, sí, la fuerte influencia que el expresidente conserva en el partido.
Tras el rechazo de la moción, los senadores votaron las reglas para la organización del juicio, una resolución aprobada por 83 votos contra 17, en una inusual sesión con el centenar de legisladores presentes en sus bancas.
El demócrata Patrick Leahy encabezará el juicio, en su calidad de «presidente pro tempore» del Senado, título que tradicionalmente ostentaba el miembro de mayor edad de la mayoría.
De todos modos, habrá que ver su evolución, ya que Leahy, de 80 años, fue internado esta noche preventivamente ante una indisposición, aunque sus portavoces no especificaron el motivo de su malestar.
La Cámara de Representantes de Estados Unidos remitió el lunes por la noche al Senado el artículo de acusación contra Trump por «incitar a la rebelión» durante los disturbios y el asalto al Capitolio del pasado 6 de enero, paso con el que abrió formalmente un nuevo juicio político en su contra, el segundo en menos de un año.
No obstante, la votación el Senado se retrasará hasta previsiblemente el 8 o 9 de febrero, después de que Schumer y McConnell acordaran otorgar más tiempo al equipo legal de Trump para que pudiera preparar su defensa.
La Cámara de Representantes de Estados Unidos, de amplia mayoría demócrata, aprobó el miércoles 13 de este mes iniciar un impeachment contra Donald Trump, en una votación en la que hasta diez republicanos dieron su apoyo.
Sin embargo, la ajustada mayoría de la que dispone el Partido Demócrata en el Senado -sólo puede alcanzarse con el voto de desempate de la vicepresidenta Kamala Harris- lo que obliga a lograr al menos el apoyo de 17 republicanos para que la iniciativa salga adelante.
En febrero de 2020, Trump fue absuelto tras ser acusado de abuso de poder y obstrucción al Congreso por presionar a dirigentes de Ucrania para que investigaran a Joe Biden y a su hijo Hunter por sus actividades empresariales.