Un nene estaba jugando en el patio de la casa de su abuelo cuando encontró restos fósiles de un dinosaurio de hace 85 millones de años. El hecho ocurrió en la localidad de Añelo, ubicada en la zona centro-este de Neuquén.
Tiziano Muñoz, de 12 años, descubrió un hueso incrustado en una de las rocas ubicadas en el patio. El equipo de Paleontología de la Universidad Nacional de Comahue (UNCO) confirmó que se trataba de los restos de un dinosaurio.
El pequeño había ido a visitar a su abuelo Juan Carlos, como tantas otras veces y en un momento subió a las bardas junto a su padre para apreciar la vista panorámica de la ciudad. Con la inquietud y la curiosidad, Tiziano se desvió de las huellas del camino y caminó por una zona más silvestre.
En e trayecto, se topó con algo que le llamo la atención: un hueso de una “costilla” que salía de la superficie rocosa. Entusiasmado por el descubrimiento, llamó a su padre y se lo mostró.
Toda la familia se acercó para evaluar si realmente se trataba de un resto fósil. Después de un rato, concluyeron en que efectivamente lo era, entonces se comunicaron con el Museo Municipal del Desierto Patagónico de Añelo (MDPA), para advertir sobre el descubrimiento.
Los paleontólogos se acercaron al lugar y confirmaron que se trataba de los restos de un dinosaurio local, por lo que programaron una excavación en el área. El pasado jueves retiraron la pieza, que será expuesta en el museo municipal.
“Hoy junto al equipo paleontológico que tenemos acá en la localidad se puede verificar el hallazgo tan importante y tan rico que tenemos en nuestra casa, en el patio de la casa de Juan Carlos”, expresó el intendente de Añelo, Fernando Banderet.
“Somos afortunados de vivir en un suelo tan rico que nos da este tipo de sorpresas y que aportan a la construcción colectiva de la historia de Añelo y nuestra provincia”, agregó y destacó el trabajo de los paleontólogos Doménica Dos Santos y Juan Porfiri, que trabajaron en el lugar.
Los huesos pertenecían a un tiranosaurio
Al inspeccionar la pieza, los especialistas notaron que no se trataba de una costilla, sino que eran piezas pertenecientes a la parte trasera de un tiranosaurio herbívoro. El más grande de los huesos extraídos fue un fémur de 1,10 metros de largo, que aún permanecía unido a la tibia y a la fíbula, detallaron desde la Universidad Nacional de Comahue.
El tamaño del hueso llevó a los expertos a determinar que el animal habría medido entre 12 y 16 metros de largo. A su vez, señalaron que se trataba de una especie correspondiente al período Cretácico tardío que había habitado la zona hace unos 85 millones de años.
Los antropólogos reconocieron el accionar de la familia de Tiziano, por denunciar el hallazgo. La directora del Museo Municipal del Desierto Patagónico remarcó la importancia de dar aviso de esos descubrimientos para “poder dar a conocer a toda la sociedad y enriquecer el patrimonio”.