Energía Argentina. Según MDZO. Uno de los grandes datos del año que pasó ha sido el despegue que tuvo (y sigue teniendo) la producción de hidrocarburos en Argentina de la mano de Vaca Muerta, que conlleva la posibilidad cierta de que el país se convierta en una potencia energética. Pero Argentina no solo se destaca en el sector energético por su producción de combustibles fósiles. Las privilegiadas ubicación y extensión geográfica de nuestro país también lo convierten en campo fértil para la producción de energía a partir de fuentes renovables. Mientras los fuertes vientos patagónicos permiten la instalación de parques eólicos, la potente radiación solar de Cuyo y el Norte genera zonas perfectas para ubicar paneles solares.
Pero de nada serviría que el país pudiera ofrecer energía limpia si no hay demanda de ella para la producción. Por suerte, cada vez son más las empresas que avanzan hacia lo que se conoce como “descarbonización” de sus operaciones. Es decir, reemplazar el uso de fuentes no renovables por energía limpia.
Un ejemplo de ello ha sido el acuerdo que recientemente firmaron la filial argentina de la empresa productora de gases Air Liquide con MSU Green Energy, una compañía nacional dedicada a la generación de energías renovables. Este entendimiento, el segundo entre ambas compañías, conllevará que Air Liquide alcance a cubrir aproximadamente el 60% de su consumo energético en Argentina mediante fuentes de energía renovable. De esta forma, se evitará la emisión de más de 220.000 toneladas de CO2 durante los diez años de vigencia del acuerdo.
La energía será producida en un parque solar que MSU está próximo a inaugurar en la Provincia de Chaco, y abastecerá a cinco de las plantas de Air Liquide que proveen de gases industriales y medicinales a cuencas industriales clave de nuestro país.
El camino hacia la neutralidad de carbono en las operaciones industriales es el eje de la transición energética. Este cambio transformador hacia una energía más limpia, contribuye no solo a cubrir la creciente demanda de energía, sino que también marca un camino responsable y visionario para la industria global.