El 16 de enero de 1900 nace, en el barrio porteño del Abasto y bajo el nombre de José Pablo Arias, el reconocido actor Pepe Arias. Quien dominara tanto el drama como la comedia, pionero de los monólogos radiales y teatrales y destacado intérprete en la gran época del cine argentino. Así lo celebra Gobierno argentino
Con 16 años subió, por primera vez, a un escenario, en el Teatro Excelsior. Luego de pasar por varias e importantes compañías teatrales, en 1931, crea su propia compañía de revistas en el Teatro Maipo. Instalándose como el Rey del Teatro de Revistas e influyendo en grandes capocómicos que fueron sus sucesores.
Participó en más de una docena de obras de teatro, entre las que figuran Día social porteño (1916), La vida inútil (1916), Locos de verano (1916). El papá del año (1924), Stéfano (1928), El ejército de la salvación (1930), Pasen a ver las fieras (1930), El mercado de abasto (1930), Arias es un rico tipo (1931), Pa’ el 32 esto es una jauja (1931), Cristóbal Colón en colectivo (1936) y Canciones del mundo (1948).
El cine le abrió las puertas, en 1933, cuando debutó en la película Tango. Luego participó en 24 filmes, como Kilómetro 11 (1938), El haragán de la familia (1940), El hermano José (1941), Fantasmas en Buenos Aires (1943). Las seis suegras de Barba Azul (1945), Todo un héroe (1949), Fúlmine (1949), Mercado de Abasto (1954) y su última película. Y la señora del intendente (1967).
En radio desplegó su comicidad y comenzó con sus inolvidables monólogos referidos a la actualidad. Por lo cual se lo considera un predecesor e inspirador del recordado Tato Bores.
«El monólogo tiene una clave: es una especie de reportaje político; yo leo los titulares de los diarios y cuento las noticias en el escenario agregándole un comentario jocoso. Pero siempre hay que actualizar la información: un chiste político del jueves no hace reír el viernes», expresaba Pepe Arias en 1956. (Fuente diario La Nación)
Entre sus personajes más reconocidos por el público figuran Justo Justino Reyes, un pícaro abogado, el maestro Vistobueno Ciruela y el Hermano José. Este último un curandero que engañaba a las personas aprovechándose de su inocencia. Allí nació el término «Filipipones», que quedó en el vocabulario común de la gente para designar a las personas ingenuas y comunes.
Pepe Arias falleció el 23 de febrero de 1967, a los 67 años, después de sufrir una descompensación cardíaca producida por un ataque de asma. Mientras actuaba en la obra cómica satírica La revista del Tío Vicente de Carlos A. Petit y Francisco Raimundo.