Reducción de retenciones. La baja de retenciones podría ser clave para potenciar la competitividad del campo argentino, fomentando mayor producción y, a largo plazo, aumentando la recaudación fiscal.
En los últimos años, la discusión sobre la reducción de las retenciones cobró relevancia debido al impacto que este impuesto tiene en la competitividad de los productores agropecuarios. Un trabajo reciente de la Fundación Agropecuaria para el Desarrollo de Argentina (FADA) revela que el Estado se queda con el 58% de la renta agrícola del país. Aunque esta cifra muestra una leve reducción con respecto al 64% del informe anterior, la carga sigue siendo elevada y tiene un impacto significativo sobre la inversión, la producción y el empleo, según publicó Ámbito.
Según el informe, el peso de los impuestos bajó 6,3 puntos en relación a la última medición que había dado 64,3%. Es decir, de cada 100 pesos, 58 se van en impuestos y hace unos meses se iban 64.