Tarjetas de créditos. Desde fines de 2024 y hasta comienzos de 2025, el Gobierno impulsó una baja de tasas que se trasladó desde el Banco Central al resto de los productos crediticios.
Ese fenómeno, combinado con una inflación más estable y dólar calmo, profundizó el uso de las tarjetas de crédito.
Según datos reportados por Payway, uno de los principales proveedores de medios de pago del país, durante el primer trimestre del año, el 61% del volumen operado con tarjetas se hizo con crédito.
Así, el instrumento mantuvo su participación en comparación con el último trimestre de 2024, un dato que no es menor teniendo en cuenta que entre octubre y diciembre es la temporada más alta de financiamiento al consumo.
En la comparación contra el primer trimestre del año anterior -convulsionado luego del cambio de Gobierno y la devaluación- la proporción del volumen explicado por tarjetas de crédito ganó casi siete puntos porcentuales. El análisis de la cantidad de transacciones también muestra un crecimiento interanual de las abonadas tarjetas de crédito: subieron un 8,8%.
La baja de tasas y la competencia entre los bancos explica buena parte de este fenómeno, ya que los datos muestran un aumento en la participación de los planes de cuotas bancarios entre la preferencia de los clientes. Por el contrario, pierden participación las propuestas de financiación oficial, como Cuota Simple.
La baja de tasas y la competencia entre los bancos explica buena parte de este fenómeno, ya que los datos muestran un aumento en la participación de los planes de cuotas bancarios entre la preferencia de los clientes. Por el contrario, pierden participación las propuestas de financiación oficial, como Cuota Simple.
El aumento que se vio en la financiación bancaria fue en detrimento de los planes oficiales. El uso de Cuota simple pasó de representar casi el 15% del volumen a explicar el 7,8%. Según publica TN.
Por otra parte, el aumento del uso de la tarjeta de crédito y la mayor oferta de cuotas generó un menor uso de las tarjetas de débito. Al comparar por cantidad de transacciones, los pagos con débito cayeron 14,4% a nivel interanual y 8,3% con respecto al trimestre previo. En la medición por volumen, débito perdió casi siete puntos en el año.