La Justicia Federal de Río Grande hizo lugar a un amparo presentado por productores rurales y frenó por 30 días la resolución del Senasa que habilitaba el ingreso de carne con hueso plano a la Patagonia.
La jueza federal Mariel Borruto resolvió suspender de manera provisoria la resolución 460/2025 del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa), que flexibilizaba la histórica barrera sanitaria en la región. La medida alcanza únicamente a Tierra del Fuego y surge tras el pedido de la Asociación Rural local.
Según adnsur, el fallo se fundamenta en la importancia del reconocimiento internacional de la Patagonia como “zona libre de fiebre aftosa sin vacunación”, un diferencial estratégico para la economía nacional y regional.
Argumentos de los productores
Los productores advirtieron que la flexibilización de la normativa compromete décadas de inversión público-privada, esfuerzos económicos y cumplimiento de protocolos sanitarios.
En el amparo presentado, sostuvieron que la apertura generaría un “riesgo sanitario grave e inmediato”, con consecuencias como la pérdida de certificaciones internacionales, caída de contratos, cierre de mercados externos, reducción de precios para los productores y pérdida de empleos rurales y urbanos.
Chile cierra sus fronteras a la carne argentina
En paralelo, el Gobierno de Chile, a través del Servicio Agrícola y Ganadero (SAG), resolvió suspender la importación de carnes y productos de origen animal desde Argentina. La medida fue tomada tras el levantamiento de la barrera sanitaria en el país.
El SAG argumentó que la decisión argentina altera las condiciones epidemiológicas que motivaron en 2008 el reconocimiento de la Patagonia como zona libre de aftosa sin vacunación. En consecuencia, se prohibió el ingreso de carne bovina, ovina, caprina, porcina, aviar, además de lácteos, cueros y reproductores en pie.
La disputa por la carne con hueso abre un nuevo capítulo en la tensión sanitaria y comercial entre Argentina y Chile, mientras productores patagónicos buscan preservar un estatus que consideran vital para su desarrollo económico y social.