El rey Felipe VI de España realizó un contundente llamamiento este miércoles ante la Asamblea General de la ONU para exigir el cese inmediato de lo que calificó como «la masacre» en Gaza.
En su primer discurso ante este organismo en nueve años, el monarca reconoció el derecho de Israel a defenderse pero exigió el cumplimiento del derecho internacional humanitario. Según información de Euro news, el soberano evitó emplear el término «genocidio», diferencia significativa con la posición del presidente del gobierno español, Pedro Sánchez.
Un discurso de alto impacto tras nueve años de silencio
La intervención del jefe del Estado español marcó su regreso a la tribuna de Naciones Unidas después de casi una década. Con un tono firme y emotivo, Felipe VI declaró: «Exigimos que detengan ya esta masacre. No más muertes para este pueblo que ha sufrido tanto». El monarca condenó específicamente «la masacre de Hamás» mientras reconocía el derecho de Israel a defenderse, pero estableció condiciones claras para este derecho.
Demandas concretas al gobierno israelí
El Rey fue específico en sus exigencias hacia Israel: «Con la misma firmeza, demandamos que el Gobierno de Israel aplique sin reservas el Derecho internacional humanitario en toda Gaza y Cisjordania». Además, reclamó que la ayuda humanitaria «llegue sin dilaciones», solicitó «un alto el fuego con garantías» y la «liberación inmediata de todos los rehenes que aún retiene Hamás con tanta crueldad». Estas declaraciones representan la posición más firme de la monarquía española sobre el conflicto.
La omisión del término «genocidio» y sus implicaciones
Un aspecto notable del discurso fue la ausencia de la palabra «genocidio», término que sí ha utilizado el presidente Pedro Sánchez. Esta diferencia semántica refleja la postura más cauta de la Casa Real y se alinea con la posición del Partido Popular, que ha rechazado el uso de esa calificación. El Rey prefirió describir la situación como «actos aberrantes que están en las antípodas de todo lo que este foro representa».
El discurso de Felipe VI ante la ONU establece una posición clara de la monarquía española frente al conflicto en Gaza, equilibrando la condena a Hamás con exigencias concretas a Israel, pero manteniendo distancias terminológicas con el gobierno de su propio país. Esta intervención marca un punto importante en la diplomacia internacional española mientras la crisis humanitaria en Palestina continúa. Información extraída del medio Euro News.