En un hecho sin precedentes en la Quinta República, el Parlamento francés rechazó este lunes la votación de confianza del gobierno de François Bayrou.
Con 364 votos en contra y 194 a favor, el primer ministro deberá presentar su dimisión, dejando a Emmanuel Macron frente al desafío de designar a su cuarto jefe de gabinete en 12 meses.
El centrista François Bayrou buscaba obtener apoyo para su plan presupuestario de 44.000 millones de euros destinado a reducir el déficit público. A pesar de sus esfuerzos y discursos cargados de gravedad sobre la deuda y el modelo social, la Asamblea Nacional rechazó ampliamente la confianza.
“Una túnica blanca solía protegerte. Hoy, si quieres salvar tu vida, te la quitas, y eso es intolerable”, declaró Bayrou, recordando la gravedad de la situación económica y social del país. Según La Nación la votación marca la tercera vez consecutiva que un gobierno no supera el año en el poder en Francia.
Reacciones de la oposición y perspectivas
La izquierda criticó duramente el balance gubernamental, acusándolo de debilitar la protección social y aumentar las desigualdades. La extrema derecha, liderada por Marine Le Pen, destacó décadas de “gestión derrochadora” y llamó a Macron a convocar nuevas elecciones legislativas.
En la derecha, líderes parlamentarios subrayaron la necesidad de sanear las finanzas públicas, criticando medidas como la supresión de dos días festivos, percibida como un ataque a los trabajadores.
Próximos pasos para Macron
Emmanuel Macron enfrenta tres opciones:
- Designar a un nuevo primer ministro capaz de generar consenso.
- Mantener un gobierno dimisionario en funciones mientras se busca solución política.
- Disolver la Asamblea Nacional y convocar a nuevas elecciones legislativas, aunque esta opción es arriesgada políticamente.
Mientras tanto, Francia vive un clima social tenso, con llamados a movilizaciones nacionales y bloqueos el 10 de septiembre, reflejando la combinación de inestabilidad política y social.