La compañía Capex consolida su estrategia diversificada con proyectos que abarcan petróleo, gas, generación eléctrica, renovables e hidrógeno. En Agua del Cajón, el desarrollo shale progresa; mientras en Chubut marca récord de producción.
Capex/Capsa, grupo empresario históricamente ligado a la producción convencional en el Golfo San Jorge, amplió en los últimos años su presencia al segmento no convencional en Vaca Muerta. De acuerdo con Río Río Negro.
En Agua del Cajón, donde perforó nueve pozos en los últimos dos años, la firma avanza en una explotación no continua, “de pasos cortos y firmes”, asociada a la disponibilidad de financiamiento. “Sabemos que el no convencional requiere varios años para alcanzar flujo positivo”, dijo Adolfo Storni, CEO de Capex, a EnergíaOn. El desarrollo se programa de forma estacional y controlada.
El próximo desafío será Cinco Saltos Norte. “Vemos mucho potencial: nuestros vecinos en Confluencia ya tuvieron resultados muy buenos”, apuntó el directivo, quien reconoció su escala más acotada frente a los grandes jugadores de Vaca Muerta. “Somos el operador más chico, pero estamos aprendiendo y creciendo de forma gradual, cuidando el flujo y la sustentabilidad de los otros negocios”, afirmó.
Eficiencia en tiempos duros
La transformación hacia el shale no borró la raíz convencional de Capex, que se define como especialista en operación eficiente de yacimientos maduros. El mejor ejemplo es Diadema, su activo más antiguo, con más de 101 años de historia, que sigue siendo un emblema de productividad. “Nos dicen que el petróleo es finito, pero con innovación y gestión eficiente siempre encontramos una nueva vida para el yacimiento”, afirmó.
En 2024, la empresa alcanzó su récord histórico de producción total en el yacimiento chubutense. Logró sostener costos en un contexto de fuerte inflación en dólares, donde muchos insumos se duplicaron.
“El costo por barril solo aumentó un 50% porque generamos eficiencias en otros sectores”, describió Storni. Pese a una baja de unos US$ 10 en el precio promedio del crudo respecto del año anterior, el balance fue positivo.
El 75% del crudo de CAPEX abastece al mercado interno, mientras que el 25% se exporta a destinos como la costa oeste de Estados Unidos, Hawái y el nordeste de Brasil.
La recuperación terciaria
CAPEX fue la primera operadora de la cuenca compartida por Chubut y Santa Cruz en aplicar tecnología de recuperación terciaria con polímeros, hace unos 17 años. Desde entonces, la técnica se expandió entre sus pares, como YPF. “Diseñamos nuestras propias plantas y encontramos una receta adaptada a la temperatura y salinidad del subsuelo chubutense”, detalló el directivo.
La recuperación terciaria permitió rescatar volúmenes de petróleo que antes quedaban atrapados en el reservorio, aportando una ventaja competitiva clave frente al declino natural de los campos maduros. “Es una herramienta que demanda más inversión, pero abre un potencial enorme para aumentar la producción”, sostuvo.
Renovables e hidrógeno: aprendizajes tempranos
Otro hito pionero de Capex fue la instalación del primer parque eólico privado del país, en Diadema, y la puesta en marcha de una planta experimental de hidrógeno verde, una de las primeras de Latinoamérica. El gas obtenido se mezcla con gas natural para generar electricidad, y el oxígeno resultante se vende como insumo industrial.
“Fue un aprendizaje valioso, pero el horizonte comercial del hidrógeno todavía no está cerca. No hay mercado ni precio retributivo, y difícilmente arranque antes de 2040”, reconoció Storni. Aun así, la empresa mantiene su capacidad técnica para escalar el negocio cuando el contexto global madure.
La estrategia de Capex condensa una lección para el sector: el salto al no convencional no implica abandonar la experiencia convencional, sino complementarla. En tiempos de volatilidad, la diversificación es el verdadero activo.