Con el objetivo de recuperar las áreas devastadas por los incendios de 2014 y 2015, Chubut avanza en un ambicioso plan de restauración forestal.
La iniciativa contempla la plantación de 17.000 árboles nativos en las zonas de Cholila y Lago Puelo, para fortalecer la biodiversidad, recuperar la cobertura vegetal y promover la adaptación al cambio climático.
Reforestación en Cholila y Lago Puelo
En el marco del Plan Integral de Manejo y Restauración de Áreas Afectadas por Incendios Forestales 2014-2015, se concretaron tareas de reforestación en 23 hectáreas del noroeste del Bosque Andino Patagónico.
Las acciones incluyeron la plantación de 10.000 coihues (Nothofagus dombeyi) y 7.000 cipreses de la cordillera (Austrocedrus chilensis), en el Área Natural Protegida Nacientes del Río Tigre (Cholila) y en la Reserva Forestal Provincial Currumahuida (Lago Puelo).
Según informó Vida Silvestre Patagonia, la actividad se enmarca en el componente Restauración de Paisajes Forestales del proyecto ProCLIM-AR, con el apoyo técnico de la Secretaría de Bosques del Chubut y organizaciones de la sociedad civil.
Un trabajo conjunto por el ambiente
La logística del operativo fue financiada por la Fundación para Cuidar al Planeta y sus Habitantes “ReforestArg”. En Cholila, el trabajo se concentró en el valle del río Alerce, donde se colocaron 15.000 ejemplares en una experiencia piloto de restauración ecológica.
En Lago Puelo, 2.000 cipreses fueron plantados con la participación del Colegio Agrotécnico N°717, docentes y estudiantes de escuelas secundarias de Lago Puelo, El Hoyo, Epuyén, Cholila, Esquel y Trevelin, fortaleciendo el vínculo entre la educación ambiental y la acción climática.
Recuperar el bosque, fortalecer la comunidad
“La restauración de estas áreas no solo significa volver a plantar árboles, sino reconstruir la funcionalidad ecológica del bosque y fortalecer la relación entre las comunidades y su entorno natural”, señaló Ariel Medina, especialista en bosques de la Fundación Vida Silvestre Argentina.
Por su parte, Gastón Arancibia, director general de Programas y Proyectos de la Secretaría de Bosques, destacó que “Chubut atraviesa un proceso de reconstrucción ecológica y social sin precedentes, que integra la conservación con el bienestar de las comunidades locales”.
Un modelo sostenible de restauración
El componente “Restauración de Paisajes Forestales” forma parte del proyecto internacional ProCLIM-AR, impulsado por la Iniciativa Internacional sobre el Clima (IKI) del Gobierno Federal Alemán y ejecutado a través de la Agencia de Cooperación Alemana (GIZ).
En Argentina, el liderazgo del programa lo asume la Fundación Vida Silvestre Argentina, junto a la Fundación AVINA y la Secretaría de Bosques del Chubut, con el propósito de recuperar las 42.176 hectáreas afectadas por los incendios en la Patagonia.
El enfoque combina restauración ecológica, resiliencia climática y desarrollo socioeconómico, integrando a comunidades e instituciones locales en la planificación a largo plazo.
Hacia una Patagonia más verde y resiliente
Con este esfuerzo colectivo, Chubut da un paso clave hacia la recuperación de uno de los ecosistemas más valiosos del país. Cada árbol plantado representa un compromiso con el futuro y una apuesta por la vida silvestre, la sostenibilidad y la adaptación frente al cambio climático.
 
									 
					



