Un sustancial robo de aproximadamente 600 kilogramos de cobre mantiene en alerta a la localidad de Pico Truncado, en la provincia de Santa Cruz.
El hecho, denunciado durante la noche del último 22 de noviembre, activó un operativo policial que, sin embargo, enfrentó contratiempos para su inmediata verificación.
La Denuncia y el Operativo Inmediato
Según la información oficial extraída del medio La17, la alerta fue recibida a las 21:37 horas. El denunciante, Carlos Niz, relató a la Policía de Santa Cruz que había ocurrido un hecho irregular en un sector próximo al cementerio local y la planta de YPF, solicitando de manera urgente el corte de accesos a la zona. Inmediatamente, la División Comisaría Primera, en conjunto con la Comisaría Segunda, movilizó sus efectivos para realizar un rastrillaje preventivo con el objetivo de localizar vehículos o personas sospechosas.
Las Dificultades en la Investigación
El procedimiento se topó con una traba significativa. Si bien los móviles policiales arribaron al área, los efectivos reportaron que «no observaron ningún rodado en los accesos relevados». Más crítico aún fue que la fuerza indicó que «no contaba con el equipamiento logístico necesario para ingresar al sitio señalado y realizar las diligencias de rigor». Esta situación obligó a posponer la inspección directa en el presunto lugar del robo, dejando las diligencias en un punto muerto hasta nuevo aviso.
A la Espera de una Nueva Inspección
Para poder continuar con la investigación, las autoridades dispusieron que el propio denunciante debe estar presente para guiar a los investigadores hacia el punto exacto del hecho. Solo una vez realizada esta inspección, se podrá confirmar la sustracción, cuantificar con precisión el volumen de cobre hurtado y avanzar con las actuaciones correspondientes. Hasta el momento, no se han reportado testigos ni registros que permitan delimitar con exactitud la hora del suceso.
El caso pone de manifiesto los desafíos operativos en la investigación de delitos de gran magnitud en la región. La comunidad de Pico Truncado aguarda respuestas mientras las autoridades dependen de una próxima inspección para esclarecer el importante robo de metal.




