El fiscal Carlos Stornelli reveló que la investigación de la causa Cuadernos fue el proceso «más violento y amenazante» de su carrera.
En una entrevista exclusiva, detalló las presiones, hostigamientos y agresiones que sufrió junto a su entorno familiar durante aquellos años.
Amenazas que incluyeron artefacto explosivo y vigilancia
Stornelli describió un clima de hostigamiento persistente durante el gobierno anterior. La persecución incluyó vigilancia por parte de la Policía de Seguridad Aeroportuaria, publicación de fotos de sus hijastras menores y la colocación de un artefacto explosivo en la puerta de la casa de su hijo. «Solo faltó la bala», afirmó el fiscal al repasar estos graves episodios.
El temor tras los casos Nisman y Di Natale
El funcionario judicial reconoció que durante la investigación temió por su integridad física. «Por el caso Nisman entendí que podía morir por una investigación», sostuvo Stornelli, refiriéndose también al fallecimiento de la fiscal Lourdes Di Natale. Estas experiencias previas marcaron su percepción sobre los riesgos que enfrentaba al investigar casos de corrupción durante los gobiernos kirchneristas.
La magnitud del dinero detectado en la causa
Sobre la estructura de recaudación ilegal, Stornelli señaló que los 70 millones de dólares fugados al exterior por el exsecretario presidencial Daniel Muñoz representan «solo la punta del iceberg». Afirmó que «eran cifras enormes, que no caben en la cabeza», sugiriendo que los montos totales involucrados superan ampliamente lo detectado formalmente en la causa.
A pesar de reconocer el impacto personal y familiar que le generaron estas investigaciones, Stornelli mantiene que «el deber de investigar está por encima del miedo», mientras se prepara para los alegatos finales en una de las causas de corrupción más resonantes de la historia judicial argentina. Información extraída del medio La17.




