Tag

Guzman

Browsing

El ministro de Economía, Martín Guzmán, confirmó este lunes que solicitará al Fondo Monetario Internacional (FMI) un programa de facilidades extendidas para devolver al organismo los US$ 44.000 millones que el país recibió durante el gobierno de Mauricio Macri, según la agencia Bloomberg.

“El staff del FMI y el Gobierno argentino consideran que en las circunstancias actuales, ese tipo de programa es la mejor alternativa disponible”, dijo Guzmán a periodistas extranjeros en una reunión en el Ministerio de Economía, según Bloomberg.

Fuentes del Palacio de Hacienda señalaron a Télam que las declaraciones de Guzmán se dieron en el marco de un contacto mantenido con medios internacionales.

Mañana arribará a la Argentina una misión del FMI encabezada por la subdirectora del Departamento del Hemisferio Occidental, Julie Kozack, y el asistente del Directorio, Luis Cubeddu, que dará inicio a las conversaciones formales con el organismo multilateral de crédito para renegociar el fallido acuerdo stand by firmado por la anterior gestión de gobierno.

Kozack y Cubeddu ya visitaron la Argentina a principios de octubre último, en la que fue una primera visita exploratoria de la situación económica y social en la Argentina, tras el pedido del Gobierno de renegociar un programa de financiamiento con el organismo por la deuda de US$ 44.000 millones generada entre los años 2018 y 2019.

Durante su estadía en el país, los enviados del FMI analizaron las cuentas públicas, las demandas del sector privado y el dañado entramado social tras varios años de caída de la actividad económica y el efecto de la actual pandemia; y escucharon a dirigentes de la oposición, a representantes del sector privado, de los sindicatos y a economistas, entre otros actores de la sociedad civil.

«Argentina enfrenta complejas dificultades económicas y sociales, en el contexto de una crisis de salud sin precedentes. La profunda recesión ha provocado un aumento de los ya elevados niveles de pobreza y desempleo, cuyos efectos se ven agravados por importantes presiones en el mercado cambiario. Estos son desafíos excepcionalmente difíciles sin soluciones fáciles. Un conjunto completo de políticas podría respaldar el restablecimiento de la confianza, pero deberá calibrarse con mucho cuidado para promover la recuperación y asegurar la estabilidad macroeconómica», se explayaron Kozack y Cubbedu en su reporte público, una vez concluida la misión.

Como parte del resultado de las deliberaciones con el Fondo y de la situación de inestabilidad macroeconómica que padeció el país en la últimas semanas, se conoció que el Gobierno podría terminar solicitando fondos adicionales de los necesarios para refinanciar la deuda heredada del macrismo.

El representante argentino y del Cono Sur ante el FMI, Sergio Chodos, no descartó -en declaraciones radiales la semana pasada- dicha posibilidad, si bien aclaró que el principal objetivo del Gobierno argentino sigue siendo alcanzar un programa para refinanciar la deuda con el organismo multilateral.

«No es el escenario base, pero existe la posibilidad de que pueda suceder», aseguró Chodos.

El ministro de Economía, Martín Guzmán, ratificó hoy que «no va a haber devaluación» y anunció que la próxima semana se realizará una licitación de bonos atados a la evolución del dólar o dollar linked, con el que se confía absorber una importante cantidad de pesos, que presionan en la actualidad el mercado cambiario.

Guzmán reconoció, en declaraciones a Radio Con Vos esta mañana, que hay «una brecha cambiaria muy elevada» disparada por «actores que quieren salir de su posición en pesos con poco volumen» y que «no tiene que ver con la economía real».

«Hubo una medida que se tomó y luego se revirtió. Bueno, no funcionó. Sí, no funcionó, ¿nos vamos a pegar de manera dogmática a una medida?», se preguntó el ministro al justificar la corrección de algunas decisiones en el frente cambiario, e insistió con que el Gobierno no quiere «que lo financiero contagie a lo real».

«Tenemos las condiciones y los instrumentos para continuar con las políticas cambiarias que venimos llevando adelante y no hacer una devaluación.”

MARTÍN GUZMAN

«Trabajamos para estabilizar la economía y dar todos los pasos. Día a día, hora a hora y ponerla en el sendero de la recuperación que ya se demuestra en la economía real, si bien es heterogénea y tenue por ahora», indicó.

El titular del Palacio de Hacienda destacó que en la Argentina hay «también superávit comercial, no hay pagos de deuda externa y, a pesar de lo que se dice, hay US$ 41.000 millones de reserva de los cuales una parte son de depósitos encajados de alrededor de US$ 12.000 millones», a lo que se suman los controles de capitales.

La brecha cambiaria «genera una expectativa de devaluación que no se condice con la circunstancia que enfrentamos en el frente externo», señaló el ministro.

La combinación actual en ese sentido «permite continuar con la política cambiaria para el tipo de cambio oficial, que es el que importa de forma directa para los precios y la macroeconomía», resaltó.

Guzmán insistió en la relevancia de que el tipo de cambio oficial «vaya de la mano de los precios», y consideró que «a pesar de que hay una brecha que genera ansiedades importantes y nos ocupa fuertemente, tenemos las condiciones y los instrumentos para continuar con las políticas cambiarias que venimos llevando adelante y no hacer una devaluación».

El ministro explicó que los valores de los tipos de cambio paralelos «están muy lejos de representar la capacidad del país para generar ingresos en dólares», y remarcó que la Argentina «es un país de ingresos medios, no de US$ 4.000 per cápita o menos si se mide con el paralelo».

«El tipo de cambio oficial es el que importa de forma directa para los precios y la macroeconomía.”

Guzmán indicó que los mercados no oficiales «son muy pequeños y no tienen de forma directa una relevancia macroeconómica: el contado con liquidación (CCL) opera volúmenes de US$ 30 millones por día y con pocas operaciones el precio se dispara, amplia la brecha y genera mucha ansiedad».

«Las expectativas de devaluación indirectamente afectan a la economía, por supuesto. Y por eso la brecha nos ocupa, apuntamos a estabilizarla y después bajarla», afirmó.

Sin embargo, advirtió que «estabilizar no es algo que se pueda lograr un día a otro y se acabó, pero cuando miramos los datos de 10 meses, el índice de precios no se ha movido con el dólar CCL o el blue, ha ido de la mano con el dólar oficial».

Guzmán dijo que la semana próxima se realizará «una subasta de bonos en dólares que se puede integrar con bonos en pesos, un mecanismo de mercado al mejor postor para limpiar parte de las presiones que generan una elevación de la brecha».

Esta mañana, minutos antes de que abrieran los mercados, fuentes del Ministerio de Economía señalaron que confían en concretar la próxima semana una importante licitación de pesos que ayude a secar la plaza, con un menú de opciones que incluirían un nuevo bono linked.

«En Economía se espera una gran licitación de pesos para la semana que viene que ayude a secar la plaza, con un menú muy variado de instrumentos que incluirán muy probablemente un nuevo bono linked», afirmaron a Télam fuentes del Palacio de Hacienda.

Los bonos dollar linked son títulos de deuda nominados en dólares, y los pagos de renta como los de amortización de capital se efectúan en pesos según el tipo de cambio de referencia de la emisión.

En otro tramo del reportaje, Guzmán dijo que en la actualidad en las transacciones con el dólar blue «hay fuerzas de mercado, de oferta, que hoy no están presentes en el contexto de la pandemia, como el turismo».

Mientras, las medidas del 15 de septiembre derivaron en que ya no haya una parte de la gente que compraba dólar ahorro y lo vendía en el blue.

«Tomamos esa decisión porque había que cuidar el frente de las reservas internacionales para poder manejar el dólar oficial, que es el que más importa», explicó Guzmán, al respecto.

El ministro precisó que en el CCL la situación es distinta porque «son transacciones financieras en las que se cambian títulos públicos en una moneda por títulos en otra, pesos por dólares o viceversa».

Guzmán reseñó que en los cuatro años anteriores, «hubo un proceso de entrada de capitales especulativos, que buscaban retornos altos de corto plazo, en Lebacs, y empezaron a salir en 2018 y 2019».

«Pero una parte quedó atrapada por los controles de capitales y buscan salir, y eso ha ido goteando por este mercado. Si piensan que no van a poder salir empiezan a apurar la salida, y a eso se suman actores locales», concluyó.

Por otra parte, Guzmán anunció que el Gobierno elabora «un programa fiscal plurianual» que tendrá «como mínimo tres años» de duración, en el marco del programa sobre el que se trabaja con el FMI, y que será enviado para su tratamiento al Congreso de la Nación.

El ministro de Economía, Martín Guzmán, afirmó que el objetivo del Gobierno es que «la sostenibilidad fiscal sea política de Estado”, al disertar en el “Encuentro Iberoamericano con empresarios” de la Organización de Estados Iberoamericanos para la Educación, la Ciencia y la Cultura (OEI).

El ministro explicó que “definir un sendero de acumulación de reservas va a ser parte del programa con el FMI”.
El ministro explicó que “definir un sendero de acumulación de reservas va a ser parte del programa con el FMI”.

“Tenemos un superávit comercial robusto, no hay pagos de deuda externa por la reestructuración que logramos y tenemos un nivel de reservas suficiente para lidiar con las presiones cambiarias; hay instrumentos para hacerle frente a esta situación”, aseguró Guzmán al exponer sobre las “Perspectivas económicas de la Argentina”.

El ministro explicó que “definir un sendero de acumulación de reservas va a ser parte del programa con el FMI” y ratificó que el mismo “va a ser enviado al Congreso de la Nación e incluirá un sendero fiscal y de recuperación de reservas plurianual”.

De esta forma, resaltó, “no van a ser políticas de gobierno sino de Estado, y van a mostrar el compromiso del Estado con transitar un camino de sostenibilidad fiscal y de las cuentas externas”.

En esta línea, Guzmán hizo hincapié en que “hay una alineación de visiones con el organismo respecto a que la estabilidad requiere una recuperación de la economía”, y afirmó que “esperamos tener un programa que ayude a restaurar la estabilidad económica y el crecimiento”.

Con respecto al Presupuesto 2021, afirmó que “la Argentina necesita transitar el camino de la sostenibilidad fiscal y tener las cuentas en orden, pero a una velocidad que permita que el país se recupere y sostenga esa recuperación”.

Asimismo, señaló que “el Presupuesto muestra principalmente una redefinición de los rubros del gasto, privilegiando aquellos que fomentan la recuperación y el crecimiento económico como el gasto de capital, salud, educación e innovación y desarrollo”.

Participantes

En el encuentro virtual estuvieron presentes, la secretaria ejecutiva de CEPAL, Alicia Bárcena; el embajador de Argentina en los EEUU, Jorge Argüello; el secretario general OEI, Mariano Jabonero; el consejo rector IIEYP-OEI, Miguel Hakim; el director de Celulosa Argentina, José Urtubey; el secretario general de la UOCRA, Gerardo Martínez; el presidente de Pan American Energy, Alejandro Bulgheroni; el CEO del Grupo Los Grobo, Gustavo Grobocopatel; el presidente de la Bolsa de Comercio, Adelmo Gabbi; y el presidente de Cabrales, Martin Cabrales.

También participaron la jefa de Gabinete del Ministerio de Economía, Melina Mallamace, y el subsecretario de Relaciones Institucionales, Rodrigo Ruete; el subsecretario de Relaciones Financieras Internacionales para el Desarrollo de la Presidencia de la Nación, Christian Asinelli; el presidente del Banco Nación, Eduardo Hecker; entre otros.

Desde la cartera económica aseguraron que el monto total, de $136.105 millones, “permite comenzar a planificar la cobertura de los cerca de $225.000 millones que vencen a lo largo de octubre, de los cuales unos $166.000 millones corresponden a pagos de amortización e intereses de distintos instrumentos de mercado”.

El Ministerio de Economía colocó hoy US$ 1.766 millones en un bono es pesos atado a la variación del dólar, a 13 meses de plazo, con lo que superó con creces la oferta inicial prevista en US$ 500 millones y permitió cubrir más del 60% de necesidades de financiamiento del Tesoro para octubre.

La licitación forma parte del esquema de refinanciación de la deuda en pesos del Tesoro, pero también del paquete de medidas anunciado la semana parada por el Gobierno para dar nuevas opciones de cobertura al sector exportador, como incentivo para acelerar la liquidación de dólares y descomprimir la presión sobre las reservas del Banco Central.

Al respecto, el Ministerio de Economía informó que el monto suscripto en la licitación de hoy alcanzó los $136.105 millones y que permiten «planificar la cobertura de los cerca de $225.000 millones que vencen a lo largo de octubre, de los cuales unos $166.000 millones corresponden a pagos de amortización e intereses de distintos instrumentos de mercado”.

La cartera que conduce Martín Guzmán subrayó en un comunicado que las ofertas recibidas sumaron un monto equivalente a US$ 1.768 millones de valor nominal, de los que se adjudicaron US$ 1.766 millones, con una tasa de interés de 0,10% anual, por debajo del máximo de 0,25% establecida en el llamado a licitación.

Asimismo, señaló que la colocación del este bono «dólar linked» genera «una retracción de la base monetaria en el corto plazo y un adecuado manejo de la liquidez de las cuentas del Tesoro en función de la programación financiera del mes».

También enfatizó que con esta operación «se amplían las opciones de financiamiento del Tesoro Nacional, disminuye el grado de asistencia monetaria a la vez que se procura colaborar en la estabilización y coordinación de expectativas de los distintos agentes económicos».

La semana pasada, el Gobierno anunció una serie de medidas para incentivar el ingreso de dólares al país, entre ellas la baja de retenciones para el agro, la industria y la minería, de modo de aliviar la situación del mercado de cambios donde, en las últimas semanas, el Banco Central se transformó casi en el único oferente de divisas.

Desde mediados de junio que el Central acumula ventas netas en el mercado de cambios por unos US$ 3.550 millones, mientras que las reservas internacionales finalizaron ayer en US$ 41.172 millones, casi US$ 2.000 millones por debajo del nivel que tenían hace tres meses y medio.

«Necesitamos generar fortalezas, buscando acumular reservas. Estabilizar a la economía es un proceso, hay que ir a la velocidad que corresponde», dijo Guzmán al presentar días atrás el paquete de medidas, que incluyó la suba de reintegros para las exportaciones con mayor valor agregado y estímulos para el sector inmobiliario y de la construcción.

Para el director de la consultora Ecolatina, Lorenzo Sigaut Gravina, la licitación de hoy «es una señal positiva» ya que el Tesoro «consiguió financiamiento en pesos por más del triple de lo que esperaba» y «si bien es un título que tiene su riesgo porque está atado al tipo de cambio, aumenta las chances de que haya colocaciones netas por parte del Tesoro y se reduzca la necesidad de emitir pesos para cubrir el déficit».

En ese sentido, apuntó que el Banco Central necesita dejar de vender dólares y «frenar la sangría de reservas», por lo que «es bueno que tenga que emitir menos pesos»

«La idea de este instrumento es que haya menor presión cambiaria, ya sea frenando la emisión monetaria u ofreciendo alternativas de cobertura para exportadores o ahorristas distintas al dólar MEP o CCL», dijo el director de Ecolatina en diálogo con Télam.

El analista financiero Christian Buteler aseguró que «hoy sobran pesos y faltan instrumentos, entonces cualquier instrumento que permita una cobertura contra el tipo de cambio va a ser bien recibido por el mercado».

Sin embargo, analizó que «no va a cambiar la situación sobre el dólar».

«Eso lo dice el valor del CCL que hoy cerró arriba de $152 por dólar. La gente se sigue cubriendo pagando valores que son altos. Pero no hay otra alternativa por el alto nivel de incertidumbre», afirmó Buteler a Télam.

Al mismo tiempo, un informe de la calificadora Moody’s señaló que los riesgos crediticios de la Argentina «siguen siendo altos» dada la profundización de la crisis económica iniciada en 2018 y que «probablemente continúe afectando a distintos sectores».

«Sin embargo, no pronosticamos nuevas pérdidas (en el valor de los bonos) más allá del rango de 35%-65% asociado a la calificación soberana Ca de la Argentina», apuntó Gersan Zurita, vicepresidente senior de Moody´s.

El ministro de Economía adelantó que buscarán «un programa distinto al stand by anterior acordado en 2018 que nos permita transitar el camino de la recuperación económica y hacerlo de manera sostenible, generando un ambiente propicio para las inversiones, con más trabajo».

El ministro de Economía, Martín Guzmán, convocó este lunes a empresarios y sindicatos a involucrarse en las negociaciones que el Gobierno encarará a partir de mañana con el Fondo Monetario Internacional (FMI) con el objetivo de acordar un nuevo programa de financiamiento por la deuda de US$ 44.000 millones que tiene el país con el organismo.

Con el FMI «lo que buscamos es un programa que ayude a Argentina. Este es un proceso que importa a la sociedad en su conjunto porque hace a la cuestión macroeconómica, la estabilidad y generación de empleo», dijo Guzmán durante la reunión celebrada en Casa de Gobierno.

«Queremos involucrarlos a todos ustedes para trabajar de forma articulada en este proceso como también lo hicimos durante la reestructuración de la deuda con acreedores privados y agradecemos el apoyo que valió para Argentina», sostuvo el ministro, según confiaron fuentes que participaron del encuentro.

Guzmán adelantó que buscarán «un programa distinto al stand by anterior acordado en 2018 que nos permita transitar el camino de la recuperación económica y hacerlo de manera sostenible, generando un ambiente propicio para las inversiones, con más trabajo».

El programa que impulsan estará basado «en preceptos sensatos, que nos permita transitar el camino de la recuperación, poder hacerlo de manera sostenible y, al mismo tiempo, ir ordenando la situación externa».

Este programa deberá estar «alineado con los objetivos de crear trabajo, reducir de inflación, generar un ambiente más propicio para la inversión privada y aumentar el valor agregado de la economía, que es lo que también nos va a permitir poder sostener la trayectoria de crecimiento».

Guzmán insistió en que esta «es una tarea colectiva. Una de las cosas que más nos ayudó en ese proceso tan complejo de reestructurar la deuda fue que hubo legitimidad. Ante el mundo se vio eso».

«El apoyo que nos dio el Congreso de la Nación fue muy importante, también del sector privado. Los diálogos que había con los distintos ministros y ministras, pero sobre todo de los países del G20, ese reconocimiento existía, era muy visible y ayudó mucho a afirmar la posición del gobierno. Esa mecánica, aquí va a valer mucho», aseguró el ministro.

El ministro de Economía, Martín Guzmán, afirmó este domingo por la noche que «una brecha cambiaria amplia no es buena para la economía, pero esos mercados cambiarios como el contado con liquidación no son significativos para la macroeconomía y no reflejan la realidad argentina».

Guzmán en declaraciones al programa «Antes de mañana» que se emite por el canal América, aseguró que «la Argentina es un país de ingresos medios de unos 4.700 dólares por habitante si medimos el PBI per cápita por el dólar del contado con liquidación, pero la Argentina no es un país de 4,700 dólares por habitante, es un país de ingresos más altos».

El jefe del Palacio de Hacienda manifestó que «hay otro problema que es lo que está llevando a que los dólares alternativos sean altos, y es el control de capitales que hoy está por una razón de que si se abrieran sería peor para la economía y habría más inflación».

Guzmán puso de relieve que «la primera condición para invertir es la estabilidad y la alternativa de no hacer nada terminaba en una situación de un salto cambiario. Estas no son medidas que nos ponen contentos pero sí nos permiten proteger la situación cambiaria que es un pilar de estabilidad».

El ministro señaló que «hay pilares para la estabilidad económica para una economía tranquila, La Argentina necesita tener una deuda sostenible, necesita tener sostenibilidad fiscal y necesita que las exportaciones acompañen el crecimiento de la economía para no quedarse sin dólares, y en esa dirección se está avanzando».

«El presupuesto 2021 es un presupuesto para lograr la recuperación económica», dijo Guzmán, para luego señalar que «siempre hay un elemento de discrecionalidad que puede ocurrir como es el caso que ocurrió este año con la pandemia».

El ministro destacó que había distintos caminos para seguir, «uno era el esquema de desdoblamiento cambiario, el otro era el esquema que se implementó, esto tiene que ver con una situación de que hay que cuidar las reservas porque es muy importante para la estabilidad cambiaria porque es un pilar de la recuperación».

«El presupuesto 2021 es un presupuesto para lograr la recuperación económica»

Más adelante, Guzmán expresó que «el impuesto a la riqueza es un aporte extraordinario por una situación extraordinaria que no tiene precedente en la historia que nosotros conocemos; los números fiscales son duros porque hemos tenido que aumentar el gasto por la pandemia y cayeron los ingresos».

El ministro descartó que se vaya a tratar algún proyecto de reforma laboral porque «la principal manera de recuperar el empleo es a través de la recuperación económica, pero hoy no está en la agenda del gobierno».

Respecto de la reforma tributaria, Guzmán dijo que «la llamaríamos una ley de medidas tributarias que buscan corregir deficiencias en la estructura tributaria y hay que hacerla en los tiempos correctos porque hoy estamos viviendo tiempos de pandemia».

El ministro admitió que «se está avanzando en el cambio del cálculo jubilatorio sobre la base de los principios del crecimiento compartido, la solidaridad y la sostenibilidad del sistema. Nosotros buscamos un esquema que va a estar atado al crecimiento económico».

Guzmán puntualizó que «el objetivo central es la recuperación económica; en una economía que se recupera, los ingresos fiscales se recuperan, lo que sí hay que hacer con el gasto, hay que darle más racionalidad al gasto, gastar para lo que más importa, para la recuperación y el desarrollo de la economía, y eso es lo que refleja nuestra visión».

El ministro fue enfático: «lo que necesitamos es que la economía se recupere; tenemos que normalizar las cuentas públicas».

Empresarios pymes destacaron los beneficios a exportaciones industriales anunciados por Guzmán.Representantes de entidades empresarias destacaron el paquete de medidas anunciado esta noche por el ministro de Economía de la Nación, Martín Guzmán, en particular los beneficios a las exportaciones industriales.

El presidente de la Cámara Argentina de la Industria del Juguete, Emmanuel Poletto, celebró la decisión del Gobierno nacional de eliminar los derechos de exportación a los bienes industriales.

«Para lograr un crecimiento sostenido hay que exportar cada vez más, podemos hacerlo por la diferenciación en diseño y calidad de nuestros juguetes, la medida anunciada es muy acertada para mejorar la competitividad de nuestras exportaciones», afirmó Poletto.

El sector del juguete se propone alcanzar el objetivo de exportar 30% de la producción de juegos y juguetes en un plazo de cinco años.

A tales efectos, la entidad trabaja para contar con una marca sectorial que le permita destacarse en los mercados regionales en base a la diferenciación de producto por su calidad y diseño.

En tanto, el presidente la Confederación General Empresaria de la República Argentina (Cgera), Marcelo Fernández, dijo que «la reducción de los derechos de exportación permitirá incentivar las exportaciones con valor agregado, generando una reactivación en distintos sectores de la industria nacional”.

«Por un lado, los empresarios tendrán mayores incentivos a la hora de exportar, y por el otro, el país podrá obtener divisas sin recurrir al endeudamiento, y de manera genuina; exportando trabajo argentino”, agregó Fernández.

Sergio Echebarrena, dirigente de CGERA y Presidente de la Cámara Argentina de Proveedores de la Industria Petro Energética (CAPIPE), hizo hincapié en que “los pymes necesitamos un Estado presente, y más aún en esto momentos en los que nos enfrentamos a la pandemia del COVID, que agravó la situación económica a la que nos llevaron las políticas económicas del gobierno anterior”.

En la misma sintonía, la Asamblea de Pequeños y Medianos Empresarios (Apyme) celebró la decisión del Gobierno nacional en lanzar un paquete de medidas tendientes a promover la actividad económica.

«Las iniciativas anunciadas este jueves por el ministro de Economía Martín Guzmán se orientan en el sentido de fortalecer el mercado interno, promover el ahorro en pesos y estimular la liquidación de divisas a los conglomerados exportadores. Buscan impulsar el empleo y fortalecer el mercado interno», dijeron en Apyme.

Eduardo Fernández, presidente de la entidad que nuclea a pequeños y medianos empresarios de todo el país, consideró que todas las medidas “tienen una coherencia total con la propuesta del Presupuesto 2021 y eso constituye un mensaje positivo”.

“El primer principio del Presupuesto es la estabilización macroeconomía y la sostenibildad fiscal. Lo anunciado hoy cumple con esos objetivos. Las medidas tienen una segmentación tendiente a favorecer a las pequeñas y medianas empresas, las exportaciones de sectores de nuestra industria con un incentivo y también con la posibilidad de acceso a crédito”, dijo Fernández en un comunicado.

Desde la Fundacion ProTejer, Jorge Sorabilla, consideró «una medida necesaria e inteligente la de liberar de retenciones a la industria».

«La ecuación es todo win, ya que se genera actividad económica, valor agregado, empleo y divisas que resultan escasas; es una decisión para destacar, felicitar y apoyar», afirmó Sorabilla.

Por su parte, Daniel Rosato, presidente de Industriales Pymes Argentinos, señaló: «Vemos de gran importancia las medidas que ha tomado el Gobierno frente a la quita de retenciones para las exportaciones industriales».

«Para todo el sector pyme es fundamental, sumamente importante porque sin ninguna duda va a generar una reactivación en las exportaciones más que nada en aquellas que tienen que ver con los productos de consumo masivo especialmente los alimentos que vendemos a nivel Mercosur», completó Rosato.

En tanto, Marco Meloni, vicepresidente de IPA y Fundacion ProTejer, dijo que «no hay duda que estamos en un cambio crucial del paradigma de la producción, se está apostando fuertemente al mercado interno, lo que implica mayor producción, mayor generación de empleo».

«Ese mercado interno pujante es y será el trampolín para exportar manufacturas industriales con mayor valor agregado y precios que permitan competir; no es menor, las nuevas líneas de crédito para Pymes a tasas muy conveniente tanto para inversión como para capital de trabajo», agregó Meloni.

Por último, la Cámara Industrial de las Manufacturas del Cuero y Afines (CIMA) destacó también los anuncios en materia reducción de los derechos de exportación para los productos industriales y el aumento de los reintegros.

“Estas son medidas largamente reclamadas por nuestro Sector, que tiene una larga tradición exportadora y que necesita este tipo de apoyos para recuperar mercados, que valoran la calidad de nuestros productos pero que muchas veces se ven imposibilitados de hacer negocios por falta de políticas que alienten las exportaciones”, dijo Luciano Ciambella, presidente de CIMA.

«La realidad es dura en todo el mundo y es dura para la Argentina, pero los datos que venimos observando en el tercer trimestre del año dan indicios de que son alentadores», indicó el Ministro de Economía.

El ministro de Economía, Martín Guzmán, afirmó que «la Argentina va a transitar el sendero de la recuperación económica en 2021», según informó el Palacio de Hacienda.

Al encabezar la segunda reunión del Consejo Federal de Responsabilidad Fiscal junto con sus pares de todas las provincias del país, el ministro sostuvo que «lo que Argentina necesita es, colectivamente, abordar la tarea de estabilizar y tranquilizar la economía argentina. Necesitamos tener una sociedad que debata sobre la base de la seriedad y de forma civilizada. La grieta cuesta. Tiene un costo económico y social, genera niveles de ansiedad y falta de confianza que nos dañan a todos».

A través de una videoconferencia, el ministro repasó las proyecciones del proyecto enviado por el Poder Ejecutivo al Parlamento el pasado 15 de septiembre, el cual, según dijo, «da un paso en el camino de ordenar las cuentas públicas» y «va a ayudar a anclar el esquema macroeconómico y a la Argentina para la recuperación de corto plazo y para generar las condiciones de una economía que dé tranquilidad y estabilidad».

«La realidad es dura en todo el mundo y es dura para la Argentina, pero los datos que venimos observando en el tercer trimestre del año dan indicios de que son alentadores. Por ejemplo, en septiembre, luego de mucho tiempo, la variación interanual de la recaudación tributaria en términos reales no está siendo negativa. Hay que ir construyendo mayor confianza sobre un sendero que la Argentina va a transitar, que es el de la recuperación económica en 2021», afirmó Guzmán.

Respecto del presupuesto, Guzmán reiteró los dos principios rectores que lo guían: «no hay estabilización macroeconómica sin recuperación de la actividad económica, donde el Estado juega un rol central», y el de «la sostenibilidad fiscal que es una condición necesaria para una economía tranquila y estable».

«Nos basamos en el principio de la prudencia y la responsabilidad. Queremos partir de supuestos sensatos para la situación que estamos viviendo. Planes y proyecciones que sean cumplibles», agregó el ministro.

El jefe del Palacio de Hacienda repasó las proyecciones principales del proyecto, que contempla un déficit fiscal primario de 4,5% y un déficit total del 6% sumando el servicio de deuda, un crecimiento del PBI del 5,5%, y una inflación anual del 29%. Hay una reducción sustancial de la carga de intereses respecto a la que se transitó en 2019, del 1,9% del Producto. Esto nos da margen para implementar políticas públicas en pos de la recuperación».

Asimismo, sostuvo que «el aumento del gasto en términos reales respecto a 2019 es del 10,6%, al mismo tiempo que se reduce el déficit fiscal con respecto a 2020 y también se reduce la porción que es financiada por la autoridad monetaria y en este contexto lo deseable es seguir profundizando el mercado de deuda pública en pesos».

En cuanto a la situación de endeudamiento de las provincias, Guzmán señaló que las jurisdicciones que «tienen deuda en moneda extranjera deben respetar los lineamientos de sostenibilidad que emitió el Gobierno nacional. Las provincias no deben caer en la tentación de hacer un mal arreglo porque el problema de la deuda externa de cada provincia afecta negativamente a todos los demás».

«Vemos que hay oportunidades para que las provincias puedan ir desarrollando mayor cantidad de instrumentos de financiamiento para financiarse en el mercado de capitales. Eso necesitamos como país, que haya desarrollo de mercado de capitales para que las provincias tengan financiamiento en moneda propia, el peso», destacó Guzmán.

El Ministro también dejó en claro que «si la pandemia dura más, se requerirá revisar estas proyecciones y flexibilidad en los planes presupuestarios».

Por su parte, los ministros hicieron referencia a la situación puntual de cada una de sus provincias, destacaron la «mirada federal» del Gobierno nacional respecto de la obra pública, al tiempo que felicitaron al ministro Guzmán por «el éxito» en la reestructuración de la deuda pública externa.

Desde el Palacio de Hacienda, participaron de la reunión el secretario de Hacienda, Raúl Rigo; el titular de la Unidad de Reestructuración de la deuda de las provincias, Rafael Brigo; la jefa de Gabinete del Ministerio de Economía, Mellina Mallamace, y su par de la secretaría de Hacienda, Santiago Pérez Pons, y la secretaria de Provincias del Ministerio del Interior, Silvina Batakis.

El jefe del Palacio de Hacienda expresó que «las proyecciones de las que partimos como guía para la política económica son prudentes. El contexto nos exige extremar la sensatez».

El ministro de Economía, Martín Guzmán, afirmó este domingo por la noche que «el proyecto de Ley de Presupuesto 2021 tiene como objetivo central la recuperación económica y constituye un paso fundamental en el camino de tranquilizar nuestra economía».

A través de su cuenta Twitter, Guzmán expresó que la iniciativa «tiene como base dos principios. El primero es que no hay estabilización posible sin recuperación de la actividad económica. Y ello requiere de un Estado que impulse la demanda y vaya de la mano con el sector privado en el camino de la reconstrucción productiva con generación de trabajo y agregación de valor.

El segundo es la sostenibilidad fiscal como condición necesaria para una economía estable. Paso a paso debemos construir una economía ordenada, donde la sostenibilidad de la deuda esté garantizada y el fisco deje de depender estructuralmente del financiamiento del Banco Central».

Más adelante, el jefe del Palacio de Hacienda expresó que «las proyecciones de las que partimos como guía para la política económica son prudentes. El contexto nos exige extremar la sensatez. Necesitamos políticas para transformar la realidad partiendo de la base de la cautela y responsabilidad, y no de ilusiones de dudosos fundamentos».

Guzmán puntualizó que «El proyecto de Ley muestra una sustancial caída del rubro de interés sobre deuda gracias a la reestructuración de la deuda. Esto nos da espacio para expandir el gasto en sectores estratégicos clave para construir un puente entre donde estamos y hacia donde apuntamos».

El responsable de la cartera económica acompañó sus manifestaciones con un gráfico donde destaca la reducción del pago de los intereses de la deuda, tras la reestructuración, que baja de un 3,4% del PBI en 2020 a un proyectado de 1,5% del PBI para 2021.

El ministro concluyó señalando que «el Presupuesto 2021 es parte de un esquema integral de transición que apunta hacia un horizonte de estabilidad y crecimiento, en el que las familias, los trabajadores y las trabajadoras y las empresas puedan estar en un ambiente de certidumbre».