La diferencia de jerarquía entre algunas selecciones se notó en las áreas: Alowais, arquero de Arabia Saudita, falló y Luis Suárez no perdonó. Ese error de los saudíes les costó el partido, ya que el conjunto sudamericano no tuvo su mejor tarde en Rostov del Don y ganó con lo justo. El 1-0 le bastó para clasificarse a los octavos de final de la Copa del Mundo.
El Maestro Tabárez planificó un cerrojo en su propio área -como en el debut ante Egipto- y apostó por la jerarquía de sus delanteros. No le sobró nada y volvió a ganar con lo justo frente al limitado equipo de Juan Antonio Pizzi, que venía de ser goleado 5-0 por Rusia.
La diferencia en el tanteador se dio por el yerro del guardameta saudí: la Celeste no brilla, no generó muchas más situaciones de gol que esa y todavía está lejos de exhibir su mejor semblante, pese a haber sacado pasaje para los octavos de final.
El lunes que viene definirá si queda en la primera o segunda posición del grupo A: para ser líder tendrá que ganarle a Rusia, que tiene mejor diferencia de gol (+7 contra +2). El puntero de esta zona se medirá con el segundo de la B, muy posiblemente España o Portugal.
La desazón quedó por el lado de los árabes, que si bien mejoraron respecto a su estreno en la Copa del Mundo, continúan sin sumar unidades y se despedirán contra Egipto (el otro eliminado) también el día lunes.
Un párrafo aparte merece Luis Suárez, quien convirtió su 52° gol con la camiseta charrúa justo en su partido número 100. Además, alcanzó a Diego Forlán en la tabla histórica de uruguayos en Mundiales con 6 tantos (había gritado tres en Sudáfrica 2010 y dos en Brasil 2014) y está a solamente dos del máximo artillero Óscar Míguez, quien registra 8.
Infobae