Profesionales del hospital zonal «Ramón Carrillo» de Bariloche realizaron esta mañana una ablación de órganos tras la muerte de un joven de 30 años que se encontraba internado en terapia intensiva.
Los órganos fueron trasladados a Buenos Aires, Rosario y Neuquén en el marco de un riguroso protocolo que establece el Incucai para ser trasplantados a los pacientes en lista de espera.
El donante tuvo muerte cerebral como consecuencia de un accidente cerebro vascular (ACV) y estaba inscripto como donante de órganos.
De todos modos, la ley Justina, reglamentada recientemente, permite que todas las personas mayores de 18 años sean donantes excepto que hayan dejado constancia expresa de lo contrario.
Se trata de la quinta ablación que se realiza en Río Negro en los primeros 20 días del año. La última se practicó el martes en el hospital de Cipolletti. En ese caso, dos personas pudieron recuperar la visión por la donación de tejido ocular.
El Cordillerano