Luego de conocerse que una facción de las FARC retomará la lucha armada, el Gobierno colombiano tomó cinco medidas para enfrentar esta amenaza al país y la región: la creación de una unidad de élite, la colocación de carteles para indicar quiénes son los guerrilleros más buscados, el establecimiento de 3.000 millones de pesos de recompensa (unos 872 mil dólares) por Iván Márquez y todos los que aparecieron en el video, reconocerlos como una «red criminal» y efectuar pedidos de extradición si se encuentran en otros países.
En una cumbre militar y de Policía, se dieron las primeras instrucciones para cumplir con la orden del presidente Iván Duque de crear una unidad de élite para la persecución de los disidentes. Este grupo tendrá «capacidades reforzadas de inteligencia, investigación y movilidad en todo el territorio colombiano», anunció el propio mandatario.
Según recuerda el periódico El Tiempo, tal como se utilizó entre los años ’90 y 2000, los guerrilleros aparecerán en carteles como los más buscados. Esto será a partir de la próxima semana.
Además, Colombia ofrece una recompensa de 3.000 millones de pesos (unos 872 mil dólares) por Iván Márquez y cada uno de los que lo acompañaron en el video.
Por último, el Ejecutivo acudió además a la comunidad internacional y pidió que los guerrilleros sean entregados si se encuentran en otros países.
El que fuera número dos de las FARC, alias Iván Márquez, cuyo paradero se desconoce desde hace más de un año, reapareció el jueves en un video junto con otros ex líderes de esa guerrilla para anunciar que inician «una nueva etapa de lucha» armada.
«Anunciamos al mundo que ha comenzado la segunda Marquetalia (lugar de nacimiento de las FARC hace más de medio siglo) bajo el amparo del derecho universal que asiste a todos los pueblos del mundo de levantarse en armas contra la opresión», afirma Márquez en el video divulgado en Internet, en el que aparece al lado de una veintena de hombres y mujeres armados con fusiles.
«Nunca fuimos vencidos ni derrotados ideológicamente. Por eso la lucha continúa. La historia registrará en sus páginas que fuimos obligados a retomar las armas», señala en otra parte del manifiesto leído en el video de 32 minutos.
En la grabación, el jefe guerrillero dice que hablan desde algún punto en la zona del río Inírida, situado en la región amazónica del sureste del país, cerca de las fronteras con Venezuela y Brasil.
Márquez fue jefe del equipo negociador de las FARC en los diálogos de paz de La Habana y designado senador por el partido de la antigua guerrilla, cargo que no asumió porque a mediados de abril de 2018 se trasladó a un espacio de reunión de ex combatientes en Miravalle, en el departamento de Caquetá (sur), donde se lo vio por última vez en compañía del Paisa.
El disidente, que en el video se ve vestido de verde militar y con una pistola en la cintura, asegura que la decisión de volver a las armas «es la continuación de la lucha guerrillera en respuesta a la traición del Estado al acuerdo de paz de La Habana», y asegura que buscarán alianzas con la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN), así lo reseña Infobae.