El James Webb, que será lanzado al cosmos en 2021, será el principal observatorio de ciencia espacial y explorará el Sistema Solar.
Los especialistas llevaron a cabo la unión
en las instalaciones de Northrop Grumman, en Redondo Beach, California, Estados Unidos.Para combinar ambas mitades, levantaron cuidadosamente el telescopio, que incluye los espejos y los instrumentos científicos, sobre el parasol y la nave espacial ya combinados usando una grúa.
Los miembros del equipo guiaron lentamente el telescopio en su lugar, asegurando que todos los puntos de contacto primarios estuvieran perfectamente alineados y asentados. El observatorio fue conectado mecánicamente. Los siguientes pasos serán asociar eléctricamente las mitades y, luego, probar que esas conexiones funciones correctamente.
“El montaje del telescopio y sus instrumentos científicos, el parasol y la nave espacial en un observatorio representa un logro increíble para todo el equipo de Webb”, resaltó Bill Ochs, gerente de proyectos del Webb para el Centro de Vuelo Espacial Goddard de la NASA en Greenbelt, Maryland. “Este hito simboliza los esfuerzos de miles de personas dedicadas durante más de 20 años en la NASA, la Agencia Espacial Europea, la Agencia Espacial Canadiense, Northrop Grumman y el resto de nuestros socios industriales y académicos”, agregó.
Para continuar evaluando el imponente artefacto, los ingenieros desplegarán por completo el intrincado protector solar de cinco capas, que está diseñado para mantener fríos los espejos e instrumentos científicos de Webb al bloquear la luz infrarroja de la Tierra, la Luna y el Sol. La capacidad del parasol para desplegarse en su forma correcta es crítica para el éxito de la misión.
“Este es un momento emocionante para ver ahora todas las partes finalmente unidas en un solo observatorio por primera vez”, explicó Gregory Robinson, director del programa Webb en la sede de la NASA en Washington. “El equipo de ingeniería logró un gran paso adelante y pronto podremos ver nuevas vistas increíbles de nuestro increíble universo”, afirmó.
Los dos componentes principales del telescopio ya fueron probados individualmente, teniendo en cuenta todos los entornos que podrían encontrar durante un viaje en cohete y una misión en órbita a un millón de millas de la Tierra. Ahora que Webb es un observatorio completamente ensamblado, pasará por pruebas ambientales y de implementación adicionales, informó Imneuquen.