La baja de la producción de gas y los meses de menor consumo en el país presionan al presupuesto neuquino en medio de la discusión del precio sostén de petróleo. En Marzo, esta parte de la recaudación provincial implicó $ 3360 millones, con una leve caída respecto de Febrero (3370).
Con todo, la cifra está lejos del mejor momento del 2019, aquel donde se registró el pico de consumo de gas por los meses de menor temperatura. Respecto de ese período (Agosto-Septiembre), los datos oficiales dan cuenta de que la caída llega al 15%, manteniendo una tendencia que ya se había establecido a principios de año.
El número de marzo llega en medio de un crecimiento de la producción de crudo durante el último trimestre (en Febrero fueron 166.000 barriles diarios en promedio), algo que evita un derrumbe mayor de estos ingresos para Neuquén, aunque propone interrogantes para los próximos meses.
Todavía no está claro sobre la base de qué precio para el petróleo argentino se computará el cobro de regalías de las provincias productoras. Se trata del equivalente al 13% de la producción que reciben las administraciones provinciales. En los dos primeros meses se calcularon a un precio del barril en torno a los u$s 50 (es lo que señalan fuentes del Gobierno). Hoy ese marco está variando rápidamente: las refinerías cierran operaciones en torno a los u$s 40/45, en un contexto de desplome del precio internacional (hoy el Brent cotizó a u$s 26/27).
De acuerdo a los datos del ministerio de Energía de la Provincia, el pico de regalías máximo del 2019 se situó 1046 millones de pesos por encima del de hoy. Esto es un 26 por ciento más que en la actualidad. Desde entonces, por motivos como la baja del precio del gas y la caída estacional del consumo, sumado a la retracción económica y la menor demanda, el número siguió a la baja.
YPF acaba de dar un dato que suma una variable adicional: solo la principal productora de hidrocarburos del país registra una caída del 15% en la demanda de gas desde el inicio de la cuarentena por el coronavirus. Todavía no recorta producción de crudo, si bien es un escenario muy posible si no encuentra mercados en el exterior: bajó un 70% el consumo interno de naftas y un 50% el del gasoil.
En este momento de retracción pronunciada del gas, a las provincias petroleras les queda la apuesta por sostener el precio del barril interno, algo que ya acordaron en la Ofephi, la organización que las nuclea, y desde la que le pidieron al Estado Nacional un precio sostén de u$s 54 por barril para el mercado interno. Esto, con las tensiones que subyacen a la industria como telón de fondo, con las petroleras integradas (producen y refinan) apostando a un precio más bajo para el mercado interno y las no integradas (solo producen) a uno más alto que les permita optimizar el rango de ganancias de sus costos de producción.
Neuquén ya llevó al Congreso de la Nación un proyecto de declaración, avalado por el resto de las provincias productoras, en el que le pide a Nación que deje vigente el nuevo precio sostén. Para estos Gobiernos está en juego la obtención de recursos para hacer frente a la pandemia del coronavirus, un escenario repleto de dificultades en el que tendrán que dar todo tipo de respuestas, con economías que ya vienen golpeadas por el anterior contexto económico.
La discusión viene quedando en segundo plano –según publica La Mañana de Neuquén-, de a ratos perdida en la agenda urgente que busca evitar daños mayores con el avance del virus que pone en vilo al mundo, pero desde la perspectiva de las provincias petroleras es parte de ese mismo cuadro, uno en el que contarán con más o menos recursos para afrontar los momentos más duros de los próximos meses, señaló El Comodorense.