Ante un contexto pandémico, con los efectos nocivos declarados en cualquier ámbito, el trabajo entre instituciones resulta necesario, y cuando se ejecuta con madurez los resultados son pomposos. Sucede con frecuencia, sobre todo ante esta emergencia obligada por el COVID-19, entre los municipios de Rawson y Gaiman.
La política transforma y responde a cualquier necesidad cuando se la canaliza a través de buenas intenciones. Y en las últimas semanas, la gentileza resultó auspiciosa para la población de ambos municipios. Primero Gaiman, donando salsa de tomate para que la ciudad que conduce políticamente Damián Biss distribuya entre los vecinos afectados por la pandemia. Después Rawson, suministrando bolsas de papa para que el Ejecutivo a cargo de Darío James entregue a los sectores vulnerables.
“Ambos intendentes tienen comunicación permanente y nos ayudamos mutuamente en lo que sea, está muy bueno trabajar así”, describió la directora de Desarrollo Social de Gaiman, Marcela Side.
Con relación a las bolsas de papa, la funcionaria dijo que “fue una sorpresa encontrarme con esta ayuda para que sea entregada a las familias más vulnerables. Tenemos una asistencia de aproximadamente 300 personas, así que bienvenido sea para poder ayudar a las familias”.
Side señaló que con Rawson “nos ayudamos bastante, eso nos satisface, y lleva tranquilidad a la gente. O sea, si le falta a uno, el otro le responde”.
Trabajo intenso
La directora del área social de Gaiman señaló que la localidad “se encuentra dentro de todo bien; aunque tenemos sectores críticos”. Desde el municipio, describió, “ayudamos a amas de casa que no están blanqueadas, albañiles, peluqueros, taxistas, familias numerosas donde sólo el jefe del grupo tiene trabajos temporales”. A eso se suma que “no es época de producción en la zona del Valle por la temporada en que estamos, así que mermó bastante el trabajo”, por eso “ayudamos como podemos”.