Esto sucedió en pocas horas, entre la noche del miércoles y la madrugada del jueves y en distintos sectores de la ciudad ante la total ausencia de la policía, que habitualmente es distraída por el ministro de Seguridad Federico Massoni para ir a esos procedimientos organizados por él, en los que se hace fotografiar para salir al otro día en la tapa de algún diario, haciéndole creer a la ciudadanía que con eso brinda seguridad.
El taxista que golpearon e hirieron al intentar resistirse a un robo aseguro, por ejemplo, que en el mismo lugar en donde lo asaltaron a él hubo otros cuatro o cinco hechos similares en los que las víctimas fueron remiseros y otros taxistas que no quisieron denunciar. “Estamos podridos de denunciar y que no pase nada”, exclamó al hablar públicamente de lo que le había pasado.
“Trabajamos de noche, somos dos o tres coches por parada y la policía nos para más o menos unas treinta o cuarenta veces por noche para tomarnos los datos. Pero este chorro (por el que lo asaltó) se cruzó desde Planta de Gas, el barrio Ocho de Diciembre, la (avenida) Eva Perón y el Cementerio (Municipal) hasta la parada donde yo trabajo para buscar a algún taxista para robarle y nadie lo paró”, aseguró.
Víctor Hugo García, de 57 años, resultó herido al resistirse a un asalto trenzándose en lucha con el ladrón y con dos cómplices, que terminaron reduciéndolo a golpes para sustraerle unos 1000 pesos que había recaudado hasta ese momento, dos celulares, las llaves de su departamento y otras pertenencias.
Fue la noche del miércoles, momentos antes de las 23,30, en la zona norte de Trelew, en la calle Nahuelpan al 400. Hasta allí le pidió que lo llevara un supuesto pasajero que lo tomó en la parada y cuando llegó al lugar lo envolvió desde atrás con el nylon divisorio que han colocado en los coches de alquiler por la pandemia y pegándole en la cabeza con un arma que resultó ser un revolver de juguete metálico pretendió reducirlo, pero él no se dejó; logró zafar, bajarse del auto y enfrentar al asaltante.
Fue ahí cuando lo sorprendieron dos cómplices del maleante que habrían salido de un negocio cercano y que luego de golpearlo y reducirlo le terminaron robando de todo.
“Con el mismo nylon que nos pusieron para que nos protejamos del virus me envolvió y me pegó un culatazo en la cabeza que me lastimó. Nos trenzamos dentro del auto y pude bajarme del coche, seguía peleando con él y en eso salieron otros dos de un negocio de las cercanías que me pegaron patadas, abrieron las puertas del taxi y me robaron”, conto el taxista.
“En la lucha que tuve con ellos vi algo que brillaba que no sabía si era un arma, un cúter o algo parecido y salté para el patio de un vecino, ahí me escondí mientras ellos me gritaban que saliera. A todo esto pasaron ocho minutos por lo menos”, dijo.
Con respecto a este hecho, la policía dice que detuvo al ladrón que es un sujeto de entre 20 y 24 años en un allanamiento que le hicieron a la casa en donde lo habían visto esconderse después del asalto al taxista.
Robo de casi medio millón en un chino
El otro hecho de inseguridad –hubo varios en las últimas horas en Trelew— ocurrió en un autoservicio chino al que dos boqueteros entraron por un agujero que hicieron en el techo para robar cerca de medio millón de pesos.
Los ladrones primero ocasionaron un corte en la zona del suministro de energía eléctrica para ingresar al establecimiento comercial sin que se active la alarma, a la que rompieron como lo hicieron con las cámaras de seguridad que había en el lugar.
El robo sucedió en la calle Maipú al 900 este jueves al comienzo de la madrugada y más tarde, en la zona norte de la ciudad sucedería el caso del joven que recibió un balazo en la espalda, al ser atacado a tiros por un menor mientras se encontraba en un auto.
Baleado dentro de un auto
La víctima, que tiene 21 años, aparentemente está bien y sus familiares vengándose del agresor fueron horas después a atacarle el domicilio en un confuso y feroz enfrentamiento vecinal que de milagro no terminó en un hecho fatal porque el pibe se había ido del lugar.
El hecho que dio inicio a la represalia habría sucedido entre las cuatro y las cinco de la madrugada entre las calles Williams Davies, Posadas y Urquiza Norte en el barrio Don Bosco y momentos antes de las diez de la mañana los familiares del baleado, entre seis y ocho personas, fueron hasta la vivienda del agresor situada en el mismo vecindario y allí provocaron daños, se decía que también efectuaron algunos disparos y después se retiraron.