Boca Juniors informó hoy la aparición de un brote de coronavirus dentro de la delegación que realizaba una burbuja sanitaria en la localidad bonerense de Ezeiza y suspendió de manera preventiva sus entrenamientos por 72 horas, hasta cumplir con nuevos testeos PCR.
El club de la Ribera detalló en un comunicado que «algunos integrantes del plantel dieron resultado positivo» durante los hisopados rápidos que se realizaron el viernes pasado por la noche cuando «se detectaron síntomas compatibles con Covid-19».
«El domingo 30 se repitieron los testeos PCR a todos los integrantes de la delegación, arrojando la aparición de un brote de contagio», aseguró oficialmente el club sin precisar el número de personas afectadas.
Frente a esa situación, los miembros del plantel y el todo el staff «xeneize» fueron aislados en sus habitaciones del hotel Howard Jonhson en Ezeiza y quedaron suspendidas las prácticas por 72 horas.
Las sesenta personas que integran el plantel, cuerpo técnico, utilería y empleados, que se encuentran concentrados desde el lunes 24 de este mes, tendrán que permanecer durante tres días en sus habitaciones en el marco de una estricta cuarentena.
Las personas infectadas por el coronavirus presentan un «estado de salud excelente» y se encuentran «bajo estricta supervisión médica, kinésica, nutricional y psicológica», indicó el comunicado oficial de Boca.
«El plantel está siendo evaluado dos veces por semana desde la reanudación de la actividad presencial y ya se cumplieron más de 500 testeos. Los días 18, 21 y 26 de agosto, todos los PCR presentados fueron negativos y el día 24 de agosto los estudios enviados por la AFA también resultaron negativos», agregó.
«En la evaluación están incluidos todo el personal del Centro de entrenamientos de Ezeiza y también el personal del hotel donde el plantel esta alojado», completó el informe del club.
Fuentes boquenses indicaron a Télam que al menos tres futbolistas tuvieron manifestaciones compatibles con la Covid-19, por lo que hoy no se entrenaron y se quedaron en sus habitaciones. pero con el correr de las horas trascendió que el número de infectados es mayor a una docena de casos.
Según finaliza el comunicado difundido por Boca Juniors, «a excepción de un jugador, se pudo identificar previo a la aparición de síntomas a aquellos que dieron positivo. El estado de salud es excelente en todos los casos, esperando los tiempos sanitarios y médicos para el pronto retorno a la actividad»
En tanto, el director técnico Miguel Russo, enmarcado dentro del grupo de riesgo por edad (64) y antecedentes de una enfermedad oncológica, se retiró de la burbuja sanitaria en su auto particular.
De la rutina de entrenamiento participaban unos 32 futbolistas, con excepción de los que habían presentado la enfermedad previamente: los mediocampistas Agustín Almendra e Iván Marcone, y el juvenil arquero Agustín Lastra.
El DT Russo ya había dado la orden, antes de esta crisis sanitaria, de que Gonzalo Maroni, quien volvió de Italia de su préstamo de la Sampdoria y ayer ´completó sus 14 días de aislamiento; y Edwin Cardona, la segunda incorporación y quien está aislado con su familia en un hotel del centro porteño, no se integren aún a la concentración.
De la lista de 40 jugadores que Boca presentará para jugar la Copa Libertadores, ya no tiene al colombiano Sebastián Perez, quien fue cedido a préstamo al Boavista de Portugal por 18 meses.
El otro jugador que no integrará esa lista es Sebastián Villa: el club comunicó hoy que no jugará partidos oficiales hasta que la justicia no se expida sobre la denuncia en su contra por violencia de género, presentada por su expareja Daniela Cortés.
La burbuja sanitaria de Boca estaba prevista hasta el sábado próximo, día en el que Boca tiene agendado un partido amistoso ante Tigre a puertas cerradas en la Bombonera.
Boca volverá a jugar un partido oficial el 17 de septiembre en Asunción, contra Libertad de Paraguay, por la tercera fecha del Grupo H de la Copa Libertadores 2020.