Los neerlandeses comenzaron a votar este lunes para elegir un nuevo Gobierno, en unos comicios que por el coronavirus se extenderán hasta el miércoles y son considerados una prueba para la crisis sanitaria.
El Ejecutivo del primer ministro Mark Rutte, quien a priori sería reelecto para un cuarto mandato.
En la mañana del lunes abrieron los colegios electorales para las personas con mayores riesgos de contraer la Covid-19 y cerrarán el próximo miércoles, en un horario adaptado debido al brote.
Las encuestas presentan al Partido Popular por la Libertad y la Democracia (VVD) de Rutte como gran ganador, con alrededor del 25% de los sufragios.
Centenares de personas manifestaron ayer su descontento en una protesta antigubernamental en La Haya, que la policía dispersó con cañones de agua.
En unas elecciones marcadas por la pandemia, los votantes sufragan en lugares insólitos, como un parque de miniaturas en La Haya.
Las estaciones de tren de las grandes ciudades o cerca de un centro de detección de coronavirus ubicado en un estadio de Rotterdam.
El primer ministro anunció que habrá excepciones al toque de queda, en vigor desde las 21 a las 4.30 horas, durante los comicios electorales.
En un primer momento las autoridades neerlandesas adoptaron medidas anticovid mucho más flexibles que las de sus vecinos, decidieron endurecerlas en los últimos meses.