A más de 20 meses de haber iniciado un reclamo salarial al Gobierno, el Sindicato de la Salud Pública del Chubut (Sisap) lanzó un nuevo paro de actividades a cumplirse la semana entrante. La «falta de diálogo» ante el pedido de recomposición salarial llevó a los trabajadores de la Sanidad a decretar un plan de lucha de 120 horas.
«Tuvimos que retomar las medidas de fuerza, anunciadas ya desde hace más de 15 días, ante la falta de respuestas y convocatoria a un canal para dialogar y abordar la problemática central que es lo salarial, más allá de todos los reclamos que tenemos», comentó a FM EL CHUBUT el secretario General del Sisap, Carlos Sepúlveda.
«Lamentablemente, ante la falta de diálogo, tenemos que anunciar que paramos 120 horas», relató el sindicalista, al ratificar que el reclamo central es salarial. «Todavía adeudan parte de los sueldos de mayo, retroactivos por cláusula gatillo que representan más de un sueldo por cada trabajador y que es una deuda desde el 2019», añadió.
También «adeudan una categoría trineal y el retroactivo de una de las categorías. Más la deuda implícita que es la falta de recomposición salarial por más de 20 meses, donde en la zona patagónica perdimos un promedio del 65% sobre nuestro poder adquisitivo».
Además de lo marcado precedentemente, existen pedidos vinculados con el respeto al Convenio Colectivo de Trabajo, que se reformen los puntos más relevantes y la apertura de la discusión para revisarlo.
«PROPUESTA INSUFICIENTE»
Con relación a la propuesta salarial del Gobierno, Sepúlveda señaló que en el caso de la Salud «no tuvimos nada oficial y todo lo que conocemos desde nuestro sindicato es extraoficial».
«Sabemos que el Gobierno se sentó con docentes, que está tejiendo por afuera con determinados dirigentes gremiales para acordar en el marco de ese 30%, y estamos en condiciones de decir que si será aumento, no nos sirve. Es realmente insuficiente con relación a la pérdida del poder adquisitivo, más aún frente a la deuda que tiene Salud Pública».
«Con nuestro sindicato -explicó-, aún no se sentaron, no nos convocaron bajo ningún punto de vista, y lo que quiere hacer el Gobierno es imponerlo de forma compulsiva y unilateral».