El ex candidato a Senador Nacional, Federico Massoni, recientemente renunciado al cargo de Ministro de Seguridad de la Provincia del Chubut, utilizó como eje central de su campaña política que la mejor manera de mostrar lo que haría en el caso de ser electo Senador Nacional, seria plebiscitar su función en la cartera de seguridad y las urnas hablaron: salió cuarto detrás del PICH, quinto en algunas localidades detrás del Frente de Izquierda y hasta sexto en localidades detrás del voto en blanco y lleva la mochila de la mayor derrota de un oficialismo en la provincia del Chubut.
Dilapidado por el resultado y el rechazo que generó en la sociedad, lanza una campaña de victimización en las redes exponiendo inclusive a su amante, Guillermina Gelvez, quien habiéndose quejado con este portal por exponer su vida pública, no hace más que redoblar la apuesta y mostrar con orgullo su apoyo incondicional a su nuevo amor, Federico Massoni.
La realidad es que, por más publicaciones que hagan en redes sociales, hay algunas realidades que son incontrastables:
– Massoni es el gran perdedor de estas elecciones
– Salió cuarto, quinto y hasta sexto por más publicaciones que hagan
– Las relaciones extramatrimoniales (amantes) de un funcionario público, que las contrata, les mejora los salarios y las saca de paseo con recursos del estado, TIENEN INTERES PUBLICO.