Luego de la reunión con autoridades del SENASA y funcionarios nacionales, el Bloque Rural Patagónico emitió un comunicado en el que pidió su derogación.
Este jueves 15 de mayo el Bloque Rural Patagónico ratificó su rechazo a la norma que permitiría el ingreso de carne con hueso en la región y pidieron su derogación. Así lo mencionaron en comunicado y tras la reunión que mantuvieron con autoridades de la Secretaría de Agricultura y Pesca y el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (SENASA) y funcionarios nacionales.
De acuerdo con el medio ADN Sur, en el encuentro discutieron la Resolución 180/25, promulgada el 18 de marzo. Durante la jornada, las autoridades nacionales informaron que no se levantará la barrera sanitaria vigente, ni se modificará el estatus sanitario de la región como libre de fiebre aftosa sin vacunación.
También mencionaron que se están realizando consultas con organismos internacionales, como la Unión Europea y Chile, cuyas respuestas serán clave para decidir si se suspende la resolución. Además, se adelantó la posibilidad de modificar la norma para permitir solo el ingreso de la plancha de asado.
“Sin medidas claras, retrocedemos”: productores patagónicos exigen garantías sanitarias y estabilidad regional
Los representantes del Bloque Rural Patagónico reiteraron su rechazo a la resolución y pidieron su derogación. Argumentaron que, en un contexto internacional con nuevos brotes de aftosa, la medida podría afectar gravemente las exportaciones de carne con hueso de la Patagonia y generar consecuencias geopolíticas negativas para la región.
En este sentido, los productores propusieron avanzar hacia un plan nacional integral que permita declarar a toda Argentina libre de fiebre aftosa sin vacunación. Según su planteamiento, esto ayudaría a eliminar las barreras sanitarias internas y consolidar los avances logrados en materia sanitaria, en lugar de retroceder.
Por otra parte, el Bloque Rural Patagónico expresó su descontento por la falta de definiciones claras y advirtió que la incertidumbre sigue afectando la región. Este escenario compromete el arraigo y el trabajo genuino en una zona que representa el 33% del territorio nacional, perjudicando la producción y el desarrollo sostenible.
Por último, reafirmaron el compromiso del sector agroindustrial patagónico de contribuir con su experiencia para mejorar el estatus sanitario del país. En tanto, el Bloque se mostró dispuesto a colaborar con las autoridades para fomentar el crecimiento del país, pero subrayó la necesidad de medidas concretas para garantizar la estabilidad de la región.
Requisitos sanitarios para el ingreso de carnes con hueso a la Patagonia
La Resolución 180 del Senasa modificaba las condiciones sanitarias para el ingreso de carnes con y sin hueso desde zonas libres de aftosa con vacunación hacia regiones sin vacunación. Esta medida se alinea con las recomendaciones de la Organización Mundial de Sanidad Animal (OMSA) y busca garantizar la sanidad del ganado y la inocuidad de los productos sin afectar la comercialización interna ni los mercados externos.
Para autorizar el ingreso de carnes con hueso a la Patagonia, estas debían cumplir con algunos requisitos estrictos:
- Origen y Sacrificio: Deben provenir de animales que permanecieron en un país o zona libre de aftosa con o sin vacunación, y que fueron sacrificados en establecimientos habilitados por el Senasa, resultando aptos en los exámenes ante y post-mortem.
- Exclusión de Partes de Riesgo: En el caso de rumiantes, debe excluirse la cabeza, incluyendo la faringe, la lengua y los nódulos linfáticos asociados.
- Empaque y Transporte: Los cortes o cuartos primarios enfriados y/o congelados, con o sin hueso, deben contar con un empaque primario y uno secundario debidamente rotulados cada uno de ellos individualmente.
- Menudencias Comestibles: Deben contar con empaque primario y secundario debidamente identificado, pudiendo ser su presentación individual o en block, según el producto en presentación enfriada y/o congelada.
- Proceso de Maduración: La carne debe haberse obtenido de canales a los que se les han extraído los principales ganglios visibles y que han sido sometidos a un proceso de maduración a una temperatura de más de dos grados centígrados (+2 °C) durante al menos 24 horas después del sacrificio, y en las que el valor del Potencial de Hidrógeno (pH) ha sido menos o igual a cinco coma nueve (≤=5,9), medido electrónicamente en la mitad del músculo dorsal largo previo al cuarteo y/o desposte.