El líder petrolero de Chubut confirmó que se reunirá en Buenos Aires para resolver el conflicto con contratistas. También se refirió al futuro de Manantiales Behr y Restinga Alí.
La tensión en el sector petrolero de Chubut suma un nuevo capítulo. El secretario general del Sindicato del Petróleo y Gas Privado del Chubut, Jorge Ávila, anunció que este martes mantendrá un encuentro clave en Buenos Aires con directivos de PECOM para buscar una solución inmediata a los problemas con contratistas.
Según ADNSUR, la reunión tiene como objetivo desactivar la posibilidad de un paro y resolver las demoras salariales que afectaron a trabajadores, algunas de hasta 30 días. El conflicto se encuadra en un escenario marcado por la conciliación obligatoria dictada días atrás para frenar una medida de fuerza.
Conflicto con contratistas y advertencia sobre Manantiales Behr
Ávila fue tajante: “Si no se arregla, nos ponen a nosotros en otra pelea. No puedo ir a apoyar a PECOM en la venta de Manantiales Behr con el problema que me está generando en las otras áreas”.
El dirigente aclaró que, aunque los aguinaldos se pagaron en su totalidad, es urgente garantizar que las demoras no se repitan en septiembre.
Respecto a las áreas de Escalante-Trébol, señaló que tras dos años de inactividad previa a la cesión de YPF, no volverán a producir por perforación primaria, por lo que el enfoque será la recuperación terciaria.
El traspaso de áreas y el futuro de Restinga Alí
En cuanto a Manantiales Behr, Ávila indicó que YPF ya negocia con posibles compradores, entre ellos CAPSA, PECOM y el grupo San Martín, aunque el interés es limitado. Destacó que la producción se mantiene estable y que los retiros serán principalmente por jubilación o acuerdos voluntarios.
Sobre Restinga Alí, adelantó que quedará en manos de Petrominera, debido a que no se trata de un bloque con potencial productivo a futuro. “En 10 o 15 años pasará lo mismo que en áreas de Petroquímica: pozos abiertos, pero producción mínima”, evaluó.
Empresas de servicios especiales en crisis
Ávila también se refirió a la situación de empresas como Schlumberger y Halliburton, que atraviesan un fuerte ajuste. En el caso de Schlumberger, denunció que se notificaron despidos al 90% del personal en Chubut, es decir, entre 100 y 120 trabajadores.
Planteó la necesidad de un esquema de rotaciones laborales para sostener empleos durante la crisis: “Mientras dure, vamos a buscar un sistema que permita que todos puedan trabajar y que las empresas que se quieran quedar lo hagan con condiciones claras”.
Un llamado a preservar puestos y estabilidad
El dirigente sostuvo que el sindicato no intervendrá para retener empresas que decidan irse, siempre que se cumplan las indemnizaciones. En cambio, el foco estará en sostener a las que permanezcan en la cuenca y garanticen trabajo estable para sus empleados.
La reunión con PECOM será decisiva para determinar si el conflicto se encamina hacia una solución o si el sector deberá enfrentar nuevamente un paro que afecte la producción en Chubut.