Tener pestañas largas, fuertes y saludables no requiere gastar en costosos tratamientos o extensiones.
Con cuidados simples y productos naturales, es posible estimular su crecimiento y mantenerlas en buen estado.
El uso excesivo de maquillaje, rizadores o extensiones puede debilitarlas y provocar su caída. También influye una dieta pobre en nutrientes esenciales. Para cuidar las pestañas es importante:
- Desmaquillarse con suavidad.
- Evitar dormir con máscara de pestañas.
- Mantener una alimentación equilibrada rica en vitaminas A, C, E y biotina.
- Reducir el uso de rizadores o extensiones.
Estos hábitos ayudan a mantener la fortaleza del folículo piloso y a favorecer un crecimiento natural.
Aceite de ricino: el aliado más efectivo
Uno de los métodos caseros más recomendados es el aceite de ricino, rico en vitamina E y ácidos grasos que nutren desde la raíz. Para aplicarlo correctamente:
- Retirar todo el maquillaje.
- Usar un cepillito limpio o un hisopo.
- Colocar una pequeña cantidad desde la raíz hasta la punta.
- Dejar actuar toda la noche y enjuagar por la mañana.
Se recomienda hacerlo entre 3 y 4 veces por semana para notar resultados en pocas semanas.
Otros aceites que también ayudan
Si no contás con aceite de ricino, existen otras opciones igual de efectivas:
- Aceite de almendras: suaviza y nutre.
- Aceite de coco: hidrata profundamente.
- Aceite de oliva: fortalece y aporta brillo.
Según C5N, estos productos naturales favorecen que las pestañas se vean más densas, sanas y resistentes al paso del tiempo.
El cuidado de las pestañas no depende solo de productos cosméticos, sino de hábitos saludables y rutinas simples que, con constancia, ofrecen grandes resultados.