Celeste Magalí González Guerrero, una de las detenidas por el triple crimen de Florencio Varela, amplió su declaración y reveló detalles escalofriantes sobre el funcionamiento de la organización narco.
Según su testimonio, el robo de 30 kilos de cocaína desató la brutal tortura y asesinato de las tres jóvenes, un crimen que habría sido transmitido en vivo por videollamada.
La causa: el robo que desató la venganza
«Le robaron 30 kilos de cocaína al Duro«, declaró González ante el fiscal Adrián Arribas, refiriéndose a Víctor Sotacuro Lázaro, quien ahora es identificado como el verdadero jefe de la banda narca. Este cuantioso robo de drogas, valuado en millones de pesos, habría motivado la represalia que terminó con la vida de Lara Gutiérrez, Brenda del Castillo y Morena Verdi en una vivienda del barrio Villa Vatteone.
La jerarquía narco y los roles criminales
El testimonio reconfiguró completamente el mapa de la organización. Sotacuro Lázaro, detenido en Bolivia, pasó de ser considerado un colaborador menor a ser señalado como el líder máximo, por encima de Tony Janzen Valverde Victoriano (alias «Pequeño J»). González describió una estructura criminal con roles definidos: «Duro estaba por encima de Julio (‘Pequeño J’), era el que daba las órdenes«, afirmó sobre la cadena de mando.
La brutalidad del crimen y la videollamada siniestra
La limpieza posterior y la investigación
Tras los asesinatos, según relató la imputada, compraron lavandina, guantes, agua oxigenada y nafta para limpiar la escena del crimen. Cargaron colchones y sábanas ensangrentadas en una camioneta Tracker blanca que luego incendiaron en un descampado. El fiscal Arribas, consideró que este testimonio «arroja luz sobre la estructura narco» y adelantó que podría derivar la causa a la Justicia Federal, mientras se realizan 20 allanamientos en busca de los celulares de las víctimas. Información extraída del medio La17.