El canciller ruso Serguéi Lavrov y el secretario de Estado estadounidense Marco Rubio mantuvieron conversaciones este lunes para ultimar detalles de una próxima cumbre entre los presidentes Vladimir Putin y Donald Trump.
Aunque Volodímir Zelenski expresó su disposición a participar, ni Moscú ni Washington mencionaron su posible inclusión en la cita.
Según DW , el encuentro entre Lavrov y Rubio giró en torno a los preparativos para una cumbre presidencial que buscaría destrabar el estancado proceso diplomático por la guerra entre Rusia y Ucrania.
Rubio destacó que las próximas reuniones representan “una oportunidad para que Moscú y Washington colaboren en avanzar hacia una resolución duradera del conflicto”. Desde el Departamento de Estado, su portavoz Tommy Pigott subrayó que la prioridad de Washington es promover “una paz estable y verificable”.
Por su parte, el Kremlin se mostró reservado y aseguró que aún “no tiene detalles” sobre la posible participación del presidente ucraniano.
Zelenski, dispuesto pero no invitado
El mandatario ucraniano, Volodímir Zelenski, había declarado previamente que estaba “listo para asistir a cualquier encuentro que impulse la paz”, siempre que fuese invitado oficialmente. Sin embargo, tanto Rusia como Estados Unidos evitaron mencionarlo en sus declaraciones oficiales.
Fuentes diplomáticas indicaron que la exclusión del líder ucraniano podría dificultar los avances hacia un acuerdo de cese de hostilidades, ya que Kiev exige participar directamente en toda negociación que involucre su soberanía y territorio.
Budapest, la próxima sede del diálogo
El Kremlin y la Casa Blanca confirmaron que la nueva ronda de conversaciones se realizará en Budapest, luego del primer encuentro celebrado en Alaska en agosto.
Aquella reunión, aunque simbólica, no logró frenar la escalada militar en el este de Ucrania ni consolidar compromisos concretos entre las partes.
La cita en Hungría será clave para definir si Putin y Trump pueden reactivar el diálogo diplomático, mientras Europa observa con cautela y pide mayor inclusión de Ucrania en el proceso.
Expectativas internacionales
La comunidad internacional mantiene expectativas moderadas sobre la cumbre. Organismos como la ONU y la Unión Europea insisten en que cualquier acuerdo debe contar con la participación activa de Kiev para garantizar legitimidad.
Mientras tanto, los esfuerzos diplomáticos parecen centrarse en construir un marco de entendimiento bilateral entre Washington y Moscú, más que en un diálogo multilateral que incluya a todas las partes del conflicto.