El plan de paz de Trump para Gaza ya se encuentra en ejecución tras el acuerdo firmado por Israel y Hamás el 8 de octubre.
La iniciativa, negociada con países árabes como Egipto, Qatar y Turquía, se estructura en tres fases consecutivas que buscan establecer una paz duradera en la región, comenzando con el cese inmediato de hostilidades y la liberación de rehenes.
Fase 1: Alto el fuego y acciones humanitarias urgentes
La primera etapa ordena el cese inmediato de todas las operaciones militares y la liberación de todos los rehenes israelíes -vivos y fallecidos- en un plazo de 72 horas. Según informó la Casa Blanca en su comunicado oficial, esta fase también incluye la liberación de prisioneros palestinos en Israel, entre ellos 250 condenados a cadena perpetua y 1.700 detenidos desde el inicio del conflicto, estableciendo las bases para las negociaciones posteriores.
Fase 2: Desmilitarización y medidas de seguridad
Una vez completada la liberación de rehenes, comenzarán las negociaciones para la desmilitarización de Hamás. El plan propone la destrucción de túneles e infraestructura militar, ofreciendo amnistía a miembros de Hamás que se comprometan con la paz o salvoconducto para quienes opten por el exilio. Se desplegará una fuerza internacional de estabilización con personal estadounidense, árabe y europeo para supervisar la seguridad y formar una fuerza policial palestina.
Fase 3: Gobernanza y reconstrucción de Gaza
La etapa final establece una administración transitoria dirigida por tecnócratas palestinos y supervisada por un organismo internacional. La estrategia presentada por Trump incluye el reconocimiento de Palestina como Estado, condicionado al éxito de las reformas en la Autoridad Palestina. Gaza sería gobernada por un comité palestino apolítico, con supervisión de una Junta de Paz presidida por Trump e integrada por figuras como el ex primer ministro británico Tony Blair.
Las tensiones pendientes y el camino a seguir
Aunque el plan menciona la «aspiración del pueblo palestino» a un Estado, Netanyahu ya afirmó que no se creará un Estado palestino bajo este acuerdo. Esta contradicción marca uno de los principales desafíos para la implementación completa del plan, que dependerá de la capacidad de las partes para mantener los compromisos asumidos en cada fase. La información sobre los detallesfue extraída del medio Euro News.