Tapia respondió a Milei y defendió su gestión en la AFA.
En medio de una escalada de declaraciones cruzadas entre el Gobierno nacional y la Asociación del Fútbol Argentino (AFA), Claudio “Chiqui” Tapia lanzó un contundente mensaje público tras los cuestionamientos del presidente Javier Milei y miembros de su Gabinete.
El titular de la casa madre del fútbol argentino reivindicó su conducción, marcó diferencias con la administración nacional y recibió un fuerte respaldo de los clubes del ascenso. La información se extrajo de C5N.
Tapia reivindicó su continuidad frente a las críticas del Gobierno
Tapia habló por primera vez luego de la polémica por el título anual otorgado a Rosario Central y el pasillo de espaldas de Estudiantes, un gesto que derivó en críticas del Presidente y de Juan Sebastián Verón.
Durante la entrega de los premios Alumni, el dirigente defendió su autoridad dentro de la AFA:
“Pasaron tres presidentes en mis nueve años al frente del fútbol argentino y me quedan muchos años más. Cuando termine mi mandato, el que quiera podrá presentarse”, sostuvo Tapia ante dirigentes y representantes de distintas instituciones.
El titular de la AFA apuntó también contra quienes, según indicó, buscan instalar un clima de desestabilización alrededor del organismo. “Las luchas se dan desde adentro, no desde afuera. Las discusiones son cara a cara”, remarcó.
Críticas a Verón y defensa del sistema competitivo
En uno de los tramos más fuertes de su discurso, Tapia se refirió a la situación deportiva de Estudiantes y cuestionó las declaraciones de Verón.
“Algunos se olvidan de que jugaron dos días antes que Barracas Central y estaban afuera del reducido. Se clasificaron porque no ganaron Huracán ni Belgrano”, lanzó, en relación al camino que llevó al Pincha a competir por el título.
El dirigente también destacó el rol de jugadores, técnicos y directivos en la construcción del fútbol argentino, subrayando la necesidad de mantener reglas claras y respeto institucional.
La AFA denuncia un “plan de desestabilización”
Tapia aprovechó el escenario para enviar un mensaje al Gobierno y a sectores que, según la conducción de la AFA, impulsan un intento de interferencia directa en la vida interna del organismo.
“A mí no me vota la gente de afuera, me votan los dirigentes del fútbol argentino”, afirmó, en clara referencia al Ejecutivo nacional.
El conflicto escaló tras la designación de Rosario Central como campeón anual, a lo que se sumó la aparición del nombre de Tapia en la investigación sobre una financiera sospechada de lavado. Ambos episodios aumentaron la presión política y mediática sobre el dirigente.
Los clubes del ascenso se alinean detrás de Tapia
En paralelo, las categorías del ascenso publicaron un comunicado de apoyo masivo al presidente de la AFA. Instituciones de la Primera Nacional, B, C y D difundieron mensajes en redes sociales respaldando su continuidad y denunciando ataques externos.
El apoyo remarcó la cercanía de la conducción, la asistencia económica recibida en los últimos años y la necesidad de proteger la autonomía del fútbol argentino. Para los clubes, la coyuntura actual exige “unidad y fortaleza institucional”.
Además, advirtieron que las críticas mediáticas y las causas judiciales buscan “desestabilizar la actual conducción”, motivo por el cual consideran indispensable mostrar cohesión interna.




