Lo que debía ser un viaje tranquilo hacia Ushuaia terminó convirtiéndose en una verdadera pesadilla para los pasajeros del vuelo AR1870 de Aerolíneas Argentinas.
El desvío inesperado a Comodoro Rivadavia, la falta de información y un posterior regreso a Buenos Aires extendieron la odisea por más de nueve horas, generando indignación entre los viajeros.
Según informó ADN Sur, el episodio dejó expuestas serias fallas en la comunicación y en la gestión operativa de la aerolínea.
Desvío inesperado y un aterrizaje que cambió todo
El vuelo AR1870 partió de Aeroparque a las 19:40 del viernes con destino al “Fin del Mundo”. Sin embargo, la aeronave aterrizó a las 23:00 en Comodoro Rivadavia, donde permaneció detenida sin brindar información clara.
Minutos después, la tripulación comunicó que regresarían a Buenos Aires debido a un supuesto “mal tiempo” en Ushuaia. Esta explicación fue rápidamente rechazada por los pasajeros, quienes aseguraron que en destino no se registraban condiciones adversas.
Una pasajera, citada por Diario Jornada, afirmó que “no había temporal, ni viento, ni nieve”, lo que acrecentó las sospechas de un posible conflicto interno o gremial que no fue comunicado.
Regreso a Ezeiza y horas de desorganización
Tras despegar de Comodoro a las 00:08, el vuelo aterrizó en Ezeiza a las 02:30 del sábado, donde comenzó un nuevo capítulo del calvario.
Desde las 03:30, los pasajeros formaron largas filas para intentar reprogramar sus viajes. Luego fueron derivados a Aeroparque mediante cupones para taxis, pero el servicio se prestó con demoras significativas. “Con suerte te daban un taxi a las 6 de la mañana”, relataron los afectados.
En Aeroparque debieron retirar su equipaje y reiniciar por completo el proceso: check-in, despacho y nuevas esperas. Entre los damnificados había adultos mayores, familias con niños y personas con movilidad reducida.
Falta de información y dudas sobre la versión oficial
La molestia principal de los pasajeros fue la ausencia de comunicación clara. A medida que avanzaba la madrugada, se confirmaba que el clima en Ushuaia era estable, lo que contradecía el argumento meteorológico de la compañía.
A las 6:25 de este sábado, muchos aún seguían sin certezas sobre su reubicación. Según relataron, Aerolíneas comenzó a distribuir a los afectados en distintos vuelos del día para intentar completar el trayecto de manera fragmentada.




