Fue este martes a la mañana en el Cementerio Municipal de Trelew, tras casi tres años de que la Justicia los tuviera embargados. El padre de la pequeña habló después con Radio 3 AM 780 y confesó que “fue duró” para él y su familia ver los huesitos amontonados de su hija, a los que para entregárselos los sacaron de Formol: un líquido de olor fuerte y desinfectante, que se emplea para impedir la descomposición de cuerpos muertos.
Marcial Orias, el papá de Zumara, asegura no estar convencido de que los despojos que la fiscalía le entregó sean de la chiquita y cuando observó el cráneo dudó aún más. ¿Les entregaron el cuerpo en un cajón cerrado o pudieron ver los restos? Se le preguntó “No. Pedí verificar que estuviera todo y me dejaron. Quería ver el cráneo…”
El otro día hablábamos con el abogado y comentó que no estaban todos los huesitos; que faltaban algunas partes. –“Sí. Había una sola manito, pero los piecitos estaban los dos. Y después el resto de los huesitos también estaban”.
“Estuve mirando el cráneo y en la foto que le sacaron se ve un agujero grande pero al de hoy (por ayer) no le vi ningún agujero. Mi comadre también me dijo que no tenía ningún orificio”, afirmó. ¿Y ustedes están seguros de que esos restos pertenecen a Zumara? Se insistió. “La verdad que yo nunca estuve seguro y no estoy convencido ahora”, confió Marcial.
“Cuando la encontraron el cráneo estaba todo completo: se le veía las orejitas, la carita. Tenía piel. Ahora esta pelado; como si hubiese estado a la intemperie. No tenía ni un solo pelo, estaba limpio. Blanco”, describió.
“Habiendo estado en Formol no se puede reconocer nada, está todo echado a perder eso”, añadió refiriéndose a los restos de su hija. “Y nunca estuve seguro. Para mí no es el cuerpo de mi hija. Uno con las cosas que hicieron no puede confiar”, acotó en clara indicación a la actuación del fiscal Fabián Moyano.
Luego, contó que quien les entregó los restos de Zumara fue el secretario de Moyano y que el fiscal no lo quiso recibir. “Moyano pasó enfrente mío y ni me saludo”, dijo Orias.
El cuerpo de la chiquita –que tenía un año y medio cuando perdió la vida—en un hecho que aún sigue siendo discutido en la Justicia fue enterrado a las diez de la mañana en una modesta ceremonia que duró solo unos minutos.
“Habíamos pedido velarla aunque fuese dos horitas pero el de la sala velatoria me dijo que no, por el tema del fuerte olor a Formol”, contó Marcial Orias, quien consignó sobre el final de la nota que en el sepelio estaba él, su mujer, un hermano, un amigo del matrimonio y la comadre: la madrina de la pequeña.
Ahora viene otro momento duró para Marcial Orias y su mujer Alejandra Valenzuela y es afrontar en un juicio la acusación del fiscal Moyano que los considera responsables de la muerte de la criatura.
En unas semanas más se haría la audiencia preliminar y quizás antes de fin de año tenga lugar el debate. Será un juicio extraño porque el fiscal anticipó que no pediría condenas si los papas de Zumara son hallados penalmente responsables del deceso de la criatura.
Como se recordará, la tarde del 30 de noviembre de 2014 la nenita se perdió en una chacra a la que la familia había ido a pasar el día y no se supo más de ella hasta un mes y medio después cuando encontraron su cuerpo desmembrado a pocos metros del lugar en donde había sido vista por última vez. La discusión que se plantea en la Justicia es si se ahogó al caer accidentalmente a un canal de riego o la mataron.
Radio 3