El freno en la construcción de barrios de viviendas ha tenido un fuerte impacto en cuanto al empleo y las empresas privadas del sector.
Mientras que para 2015 había empleados entre 3.700 y 4.000 trabajadores, actualmente en actividad en la provincia hay 2.000. Uno de los mayores impactos tiene que ver con que Nación no activa barrios de viviendas hace al menos un año. Inquieta que no se hagan las obras del endeudamiento.
El freno en la construcción de barrios de viviendas ha tenido un fuerte impacto en cuanto al empleo y las empresas privadas del sector.
La obra pública en Chubut sigue sin reaccionar este año. Desde el sector de la construcción afirman que hoy el sector está funcionando con la mitad de ocupación que dos años atrás. Mientras en 2015 había ocupados entre 3.700 y 4.000 trabajadores, hoy no se superan los 2.000.
Los datos son avalados por la propia CGT del Valle, que días atrás había manifestado que llegaban a 1.500 los desocupados de la Uocra y que desde el sindicato se estaba buscando una reunión con las autoridades para encontrar una solución a la tardía reactivación.
En este marco, preocupa a los empresarios las modificaciones introducidas semanas atrás en la ley de Emergencia, en su artículo 10. Allí se establece que hasta un 50% del bono provincial los municipios lo podrán destinar para cubrir gastos corrientes. Pasándolo en limpio, para el pago de sueldos.
La ley de emergencia expresaba que los fondos coparticipados a las distintas jurisdicciones debían ser destinados a obras. Incluso cada localidad hizo un listado, lo consensuó con los distintos sectores y esto tuvo que tener aprobación de los distintos Concejos Deliberantes. Había ejecuciones ya comprometidas.
A nivel general, desde el Gobierno Provincial ya se ha distribuido entre un 40 y 50 por ciento de los fondos para los distintos proyectos que se fueron ejecutando. El resto, podrá reconsiderarse de acuerdo a las necesidades o desequilibrios de caja.
Hay varios municipios del interior que están complicados desde sus cuentas y adelantaron que van a hacer uso de la opción. Uno de los ejemplos es Río Pico, donde recién el 20 de septiembre cobraron los sueldos y hubo retención de servicios. En El Hoyo la demora fue de 10 días y en Corcovado el intendente también anticipó que recurrirán a los fondos para poder cumplir en el mes a mes.
Dentro de los municipios grandes por ahora hay mesura y se expresó que habrá que administrar los recursos con responsabilidad para poder cumplir los compromisos asumidos. Aunque la coyuntura siempre se va imponiendo al mediano y largo plazo.
El empresariado de la construcción ve este contexto como otra mala señal, dentro de una tendencia que incluso vislumbran que podría empeorar. Y el análisis no es antojadizo. En primer lugar, hacen foco que varias localidades que ejecutan obras con el bono lo están haciendo por administración para ahorrar. Esto es con su propia gente. Lo cual no genera trabajo y tampoco mueve a las empresas privadas.
Por otra parte, si bien reconocen que los índices generales de la construcción en el país están yendo para arriba, lo atribuyen a una distribución despareja donde lo fuerte se está ejecutando en 4 provincias que mueven el “amperímetro”: Buenos Aires, Santa Fe, Córdoba y Mendoza.
Otro factor determinante es que hace un año que no se licita un barrio de viviendas en la provincia por parte de Nación. La construcción de casas suele ser lo que más empleo genera en la construcción. En ello influye la nueva política desarrollada por el Gobierno Nacional, que se la define como “crediticia”, ya que apunta a los planes hipotecarios para acceder al hogar propio y relega a varios de los planes sociales que se venían ejecutando.
La interrupción abrupta de la política de vivienda que se venía llevando adelante en los últimos años ocasionó un impacto muy fuerte. Y hoy la gente que quedó fuera luego de que se termine una obra, cada vez tarda más en reinsertarse en la rueda de la construcción.
Este viene siendo un tema de discusión que generó fuertes cruces entre funcionarios nacionales y el Gobierno Provincial.
Y hoy también se refleja en los números. En esta edición del Económico se observa cómo en el Presupuesto Nacional del año que viene se dispone de una sensible baja en cuanto a los fondos que se girarán a la provincia para la construcción de viviendas sociales. Algo que viene ocurriendo con la finalización de planes que se ejecutaban años anteriores como el de “Techo Digno”.