Esta semana se conoció un mensaje en las redes sociales de la doctora Carla Simioni, de terapia intensiva del hospital de Esquel, en el que presentó una crítica situación en Epuyén y alentando a que la gente no viaje al lugar. Casi al mismo tiempo, Eduardo Herrero, licenciado del Área de Salud Mental de Río Negro y Dianela Gallardo, médica de hospital zonal, dijeron “no hay que ser alarmistas con este tema”, recordaron que es un tema que se repite cada año y reiteraron los consejos para todos, en forma especial, para las zonas rurales.
Eduardo Herrero, en principio, sostuvo “hace una semana, fuimos invitados a Esquel desde el ministerio de salud de Río Negro y el ministerio de Chubut con el instituto Malbrán para explicar la situación ocasional de estos casos de hanta virus en la zona de Epuyén”, dijo.
En esa línea, agregó: “Oficialmente, podemos informar que hay seis casos confirmados, de los cuales, dos fallecieron (un chico de 14 años y un adulto de 61) y se dieron en un espacio y en 20 días de noviembre. Podemos decir que se produjo un brote, pero circunscripto a ese evento, lo cual no significa que todo Epuyén está infectado, y tampoco que no se pueda acampar o que no se pueda viajar a esa zona. Es un brote extraordinario en un lugar y días puntuales”.
También remarcó: “nada distinto a lo que sucedió en Bariloche en 1996 con 16 personas infectadas y 8 de ellas fallecieron. Ojalá nunca más se presente otro brote, pero recordar que pasaron diez años para este brote que se dio en Epuyén”, expresó.
“Lo importante es no alarmar a la gente. Sabemos de un audio que es alarmista. Sólo hay que aplicar medidas de precaución que se repiten siempre, hacer vida normal”, indicó Herrero.
Sobre la importancia de la floración de la caña colihue para la aparición de los colilargos, Dianela Gallardo explicó: “No, este brote nada que ver con la caña colihue. En este brote, se trató de una persona infectada que asiste a una fiesta y allí se contagiaron otras personas. No hay que ser alarmistas”, afirmó.
En el plano de las recomendaciones, recordaron: “Transitar por lugares habilitados, si se acampa hacerlo en un lugar limpio, no dejar alimentos al aire libre para que no aparezcan los roedores”, expresó. Y, Eduardo Herrero, ante la consulta sobre si habría peligro de los colilargos en el basural, explicó: “Son roedores silvestres. En un basural, lo que vamos a encontrar es un mus músculus y rattus norvegicus. Este es muy agresivo y es más lógico que elimine a otros roedores por ser muy territorial”.
Finalmente, Herrero sostuvo: “La idea no es no convivir con colilargos, es no convivir con roedores. Si en la vivienda hay un agujero, hay que taparlo, para que no ingrese roedor alguno. Hay que ponerles barreras físicas. No tener el césped alto, tampoco poner chapas apoyadas sobre las paredes de afuera, porque hace que el predador se acerque sin temor, es orden, limpieza; no dejar restos de comida al aire libre”, finalizó.
Precauciones
• Si se va al campo, no se debe acampar cerca de matorrales o leña acumulada, ni con agua estancada.
• Si se va a cabañas o a refugios, hay que abrirlas y ventilarlas por varias horas antes de instalarse.
• Limpiar con paños húmedos para no levantar residuos y no caminar por zonas sin huella humana, ya que pueden estar en contacto con excremento, orina o saliva del ratón.
• Se recuerda que, en caso de presentar fiebre alta, dolor de cabeza y del cuerpo, similares a una gripe o molestias gastrointestinales, se debe consultar al médico o recurrir al hospital o centro asistencial más cercano.
• Es importante remarcar que el período de incubación de la enfermedad puede llegar a ser de hasta 45 días luego de la exposición, por lo que los síntomas pueden presentarse mucho después de la exposición al virus.
El Cordillerano