Un grupo de auxiliares de la educación que se manifiestan a través de un acampe frente al Ministerio de Educación ingresaron ayer miércoles al edificio con el fin de ser atendidos por el titular, Paulo Casutti.
El motivo fue solicitarle información respecto a una notificación de Recursos Humanos en la que se les comunica que están evaluando descontar los días de paro al personal que esté adherido al paro. Además, dieron continuidad al reclamo que vienen sosteniendo desde hace ya 50 días.
Un trabajador auxiliar de la sede del Ministerio Educación, Marcelo Bezunartea, explicó que “hemos hecho asambleas permanente, paros, estuvimos con una toma y ocupación pacífica. Hubo compañeros que hicieron una huelga de hambre también. Reclamamos porque sentimos que se están vulnerando nuestros derechos relacionados a lo salarial».
«Venimos siendo afectados al sistema de pago escalonado. Hay compañeros que perdieron un mes de salario. Recién este fin de semana estarían cobrando salarios que deberían ser percibidos a principios de mes. No se nos liquidan los incrementos acordados en paritarias de marzo”, manifestó.
Bezunartea indicó que “existen otros agravantes como el no funcionamiento de la obra social y una situación de absoluta irregularidad en nuestra situación. En cada puerta que se abrió, no hay respuesta satisfactoria. Nos obligan a permanecer en esta medida”, sostuvo en contacto con Jornada.
Y agregó. “Hemos tenido una reunión con el ministro de Educación el lunes. Queríamos una respuesta a un petitorio y se nos plantea una postura de resignación, que no depende de ellos, que no hay plata, que no se define en esta instancia, etcétera”, manifestó.
Aclaró que las medidas de acampe y ocupación del edificio continuarán. “Vamos cambiando de formas pero queremos visibilizar el reclamo. La conciliación obligatoria que firmó Guillermo Quiroga sobre la que dicen que los compañeros volvieron al trabajo, no es así. No estamos satisfechos. No estamos conformes”.
Respecto a la declaración del Gobierno sobre la vuelta de los docentes a las aulas y el dictado de clases los sábados, dijo el auxiliar que “son declaraciones que se hicieron por los diarios, no trae aparejada ninguna mejorar. Hay compañeros que perciben salarios por debajo de la línea de pobreza. Es una situación por demás complicada”.