Las protestas continúan en Cataluña a pesar de los violentos incidentes que se registraron en las jornadas previas. El Gobierno de Pedro Sánchez lleva adelante reuniones para superar el conflicto.
Miles de personas volvían a movilizarse este miércoles por las calles de Barcelona, en el tercer día de protestas contra las condenas que se le fijaron a los líderes independentistas, en las que también se produjeron serios incidentes en varias de las capitales catalanas.
Según publicó el diario El País de España, los dirigentes que fueron condenados por el Tribunal Supremo condenaron a través de las redes sociales los episodios que se produjeron en las recientes manifestaciones.
Sin embargo, el presidente regional catalán, el independentista Quim Torra, evitó pronunciarse en el mismo sentido, como le había pedido Madrid, para repudiar los episodios de violencia vividos en Cataluña en manifestaciones de rechazo a la sentencia contra separatistas catalanes.
«Es fantástico ver al pueblo movilizado. Que nadie dude que este gobierno está al lado de la gente«, dijo Torra mientras participaba en una marcha de Girona contra la sentencia.
«Hemos venido para expresar nuestro apoyo a las marchas de rechazo de las sentencias y derecho de autodeterminación», añadió.
El gobierno de Pedro Sánchez había pedido a Torra que «llame a convivencia pacífica» tras los disturbios de los dos últimos días registrados en Cataluña El ministro español del Interior, Fernando Grande-Marlaska, le exigió una «condena expresa y concreta contra los actos violentos».
Numerosos disturbios y enfrentamientos entre policía y manifestantes se registraron ayer en distintos puntos de Cataluña durante las protestas contra la sentencia que condenó a penas de entre 9 y 13 años de cárcel a 9 líderes separatistas catalanes.
Un centenar de personas resultaron heridas y la policía efectuó una treintena de detenciones.En Barcelona ardieron decenas de fogatas y dos centenares de contenedores utilizados para barricadas fueron destrozados.
El lunes, al conocerse la sentencia, miles de independentistas se manifestaron en el aeropuerto de Barcelona, donde tuvieron que ser cancelados un centenar de vuelos.
El presidente catalán también recibió hoy una advertencia por parte del presidente del Poder Judicial, Carlos Lesmes, para poner freno a los disturbios. «Hay unos límites y esos límites son las leyes y los derechos de los demás. Creo que los responsables públicos, empezando por Torra, tienen una especial responsabilidad para que esos límites no se sobrepasen», declaró Lesmes a la prensa, informó El Clarín.