“La cifra se reduce progresivamente”, dijeron las autoridades. El problema aún sigue siendo grave en los geriátricos.
Francia comienza de a poco a tener algo de alivio en medio de la crisis del coronavirus. Este domingo, el país galo informó que en las últimas 24 horas registró un total de 357 muertes en hospitales por Covid-19, la cifra más baja en una semana, superando los 441 del sábado.
La Dirección General de Salud (DGS) comunicó que en total la cifra de muertos se elevó a las 8.078 personas desde que estalló la epidemia, de las cuales 5.889 fallecieron en el hospital y otras 2.189, en centros no hospitalarios, como residencias geriátricas medicalizadas. «La cifra se reduce progresivamente», según el comunicado, aunque siga habiendo casi 7.000 pacientes en reanimación.
Pese a las cifras alentadoras, la DGS advirtió de que «la epidemia sigue golpeando duramente» a Francia.
Una muestra de ello está en los geriátricos. De los más de 10.000 establecimientos de tercera edad y centros para dependientes que hay en el país, 3.704 están afectados e indican que hay 22.361 casos o posibles casos de Covid-19.
En cuanto a los contagios, hay 748 personas más hospitalizadas, ligeramente por encima del dato del sábado (711) y suman en total 28.891 personas ingresadas. Desde el inicio de la epidemia se han curado completamente 16.000 pacientes, según estas fuentes.
En Francia, donde el Gobierno contabiliza 70.478 casos confirmados, los hospitales de las zonas sometidas a mayor tensión, especialmente la región parisina y la de Gran Este, son aliviados con la transferencia de pacientes a áreas menos afectadas.
En las últimas veinticuatro horas hubo 47 traslados, con lo que ascienden a 613 los enfermos trasladados en trenes medicalizados o aviones militares desde el 18 de marzo.
También miembros del personal médico de las regiones menos afectadas fueron llevados en este tiempo hasta Gran Este (250 profesionales) e Île de France (300).
Por último, el Ejecutivo francés anunció que movilizará a partir de mañana la reserva sanitaria para ayudar en los centros de ancianos de la región parisina, publicó El Clarin.